Nacional > DEBATE EN LA FEDERACIÓN RURAL

Coincidencias y diferencias de los candidatos en cuatro temas clave

Presentaron sus propuestas en políticas cambiarias y tributarias, su visión del precio del combustible y la energía y el decreto que regula las ocupaciones
Tiempo de lectura: -'
26 de mayo de 2019 a las 05:02

Mario Bergara ya había desarrollado gran parte de su exposición cuando desde el costado uno de los productores que lo escuchaba exclamó: “¡al fin!” y le dijo a un hombre que estaba a su costado que era lo que “venían pidiendo” hacía años.

Junto a Daniel Martínez, el expresidente del Banco Central participó de una actividad organizada por la Federación Rural en el marco de su congreso anual en Paso de los Toros en el que los presidenciables dieron su posición en temas relacionados principalmente a la competitividad y productividad del sector agropecuario. Bergara hablaba de los “impuestos ciegos” y reconocía que se debía ir hacia un sistema que permitiera suavizar esas cargas cuando haya baja rentabilidad y permitiera “pagar más” cuando la situación se revirtiera.

En este tema fue prácticamente el único en el que los candidatos del oficialismo y la oposición exhibieron sus coincidencias –aunque blancos y colorados propusieron eliminar estos tributos-, ya que luego, en cada punto de discusión, mostraron dos visiones diferentes acerca del país. Aunque no lo respetaron ­–e incluso algunos como Edgardo Novick recibieron reclamos por no contestar lo pedido- cada uno disponía de quince minutos para responder acerca de política cambiaria, energía y combustibles, política tributaria, consejos de salarios y ocupación de lugares de trabajo como extensión del derecho de huelga.

Mientras que Bergara y Martínez destacaron el sistema de “libre flotación del dólar” empleado por el gobierno, Luis Lacalle Pou, Carlos Iafigliola, Enrique Antía, Jorge Larrañaga, Ernesto Talvi, Edgardo Martínez Zimarioff,  Pablo Mieres y  Novick, señalaron que Uruguay tenía “atraso cambiario” y que esta situación afectaba la productividad, principalmente del campo. 

Lacalle Pou dijo que estaba “convencido” que se podían bajar las tarifas públicas y que se debía “terminar de proteger” a Ancap permitiendo la libre importación de combustibles para que deje de ser “ineficiente”. Su planteo fue rechazado por Martínez, que dijo que si bien había “deberes para hacer en el Estado”,  se debía tender hacia un “gradualismo” que permitiera que los precios de “energía y combustible” reflejen los “costos reales” y tender hacia los “precios de paridad de importación”.

Un rato antes, Larrañaga había señalado que en los últimos veinte años los “grandes enemigos” del campo habían sido “la aftosa y el Frente Amplio”, llevándose la mayor ovación de la tarde. A su turno, Mieres se mostró de acuerdo con prohibir las ocupaciones, algo con lo que estuvieron de acuerdo la mayoría de sus colegas menos Abella, que ofreció un discurso contra la corriente y pidió “pesificar la economía”, reinstaurar el impuesto a las actividades bancarias y hacer una auditoría de la deuda externa.

Las coincidencias en la oposición fueron destacadas por Talvi, que dijo que estaba construyendo “en silencio” una “relación de confianza” con Lacalle Pou para sentar las bases –junto al Partido Independiente- de una coalición que “sustituya” al Frente Amplio. Antía agregó que debían sumarse los que “piensen igual” y comprometerse para “encarar firme la recuperación del país”.

El “shock” volvió a cruzar a Martínez y Lacalle Pou

Martínez fue el primer expositor y durante su discurso dijo que la “austeridad” era un deber “ético y moral” que no debía ser ejecutada mediante un “shock”, en referencia a la propuesta de Lacalle Pou.

El líder de Todos no estaba en la sala pero siguió la actividad por radio y le contestó unas horas más tarde cuando fue su turno. “Me criticaron la palabra shock. ¿Si no se hace de una vez y rápido cómo se hace?”, dijo y recordó ineficiencias en el Estado para señalar que “ejercer” la autoridad era “hacerse cargo”.

Tiempo de reproches

Bergara aprovechó su intervención para –sin nombrarlo- criticar a Juan Sartori por su planteo de que cada candidato financie su campaña y dijo que había procesos “basados en el dinero” que estaban “erosionando” la democracia.

Quien le salió al cruce fue Novick, que defendió la idea del millonario y ofreció un discurso antipolítico contra quienes “vivían del Estado” que molestó a Larrañaga.

También sin nombrarlo, el líder de Alianza Nacional se tomó varios minutos para decirle que no le había gustado. “No es aceptable la vieja y la nueva política. La división es entre la mala y la buena, que ha existido toda la vida. No concuerdo con eso de que los que vivimos de la política vivimos del Estado”, señaló.

Un rato más tarde el que hizo su descargo fue Iafigliola, que había sido de los primeros en llegar aunque era uno de los últimos en exponer. Al precandidato nacionalista le molestó que sus colegas se fueran una vez que habían terminado sus discursos y dijo que eso era una “falta de respeto” intolerable ya que los que estaban en la actividad pública debían dar el ejemplo.

El rezongo fue reconocido por Lacalle Pou, que había llegado algunos minutos antes porque estaba de gira por departamentos cercanos, aunque no impidió que los que quedaban se fundieran en abrazos y destacaran la camaradería con la que venían desarrollando la campaña.

Comentarios

Registrate gratis y seguí navegando.

¿Ya estás registrado? iniciá sesión aquí.

Pasá de informarte a formar tu opinión.

Suscribite desde US$ 345 / mes

Elegí tu plan

Estás por alcanzar el límite de notas.

Suscribite ahora a

Te quedan 3 notas gratuitas.

Accedé ilimitado desde US$ 345 / mes

Esta es tu última nota gratuita.

Se parte de desde US$ 345 / mes

Alcanzaste el límite de notas gratuitas.

Elegí tu plan y accedé sin límites.

Ver planes

Contenido exclusivo de

Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.

Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá

Cargando...