Cómo será la pausa obligada del caso Astesiano y en qué seguirá avanzando pese a la feria judicial

“Hasta esto, nunca había visto que en Uruguay un tema ocupara los diarios más de una semana”, repitió en varias oportunidades el fiscal de Corte Juan Gómez. Una de las razones para que ello ocurriera, es que pocas investigaciones avanzaron tan rápido como esta. Pese a tener otros 500 casos a estudio, Fossati tomó declaraciones prácticamente todos los días y pidió la imputación de seis personas. Una de ellas, Roman Karpov, el ciudadano ruso que fue capturado in fraganti cuando intentaba acceder a un pasaporte con su partida falsa, fue condenado a través de un proceso abreviado.

Esa vertiginosidad se verá apaciguada y disminuida prácticamente a cero en el mes de enero, puesto que tendrá lugar la Feria Judicial Mayor. Así, jueces y fiscales se toman licencia y solo trabajan cuando les toca estar de turno. Es una especie de guardia en la que solo atienden los temas urgentes. La de Fossati, será la tercera semana de enero. Sin embargo, si tuviera interés de avanzar en la investigación, puede hacerlo.

Aún así, la agenda de la Fiscalía no se detiene. Febrero será un mes de mucho movimiento en el caso Astesiano. No solo por las varias declaraciones que ya tiene fijadas para tomar apenas vuelva de la feria judicial, sino porque tendrá que tomar decisiones respecto del futuro de la investigación. A principios de febrero vence la medida cautelar del exvicecónsul Stéfano Di Conza. Pocos días después, las de Patricia Medina, la pareja del escribano Álvaro Fernández, coimputado en esa causa. Pocos días después, en el mes de marzo, se vencen la de Astesiano, Alexey Slivaev y Fernández.

El vencimiento del régimen de la prisión preventiva y la decisión que tome la Fiscalía en consecuencia, marcan el camino de la investigación acerca de los pasaportes. En esa oportunidad, la Fiscalía puede pedir su prórroga por hasta seis meses. Si así lo considerara, también podría pedir su flexibilización (por ejemplo, pedir que se le imponga prisión domiciliaria).

En cada una de esas audiencias, deberá argumentar la importancia de prorrogarlas y para eso, debe fundamentar cada caso. Eso implica dar nuevos datos del avance de la investigación.

El plazo que elija y la medida, determinará el futuro de esa línea de investigación, que ya cuenta con un condenado (Karpov). Es sin duda la que va más avanzada: la mayoría de la información ya está en poder de la fiscalía y todos los presuntos responsables imputados. Pudieron dilucidar cómo fue la maniobra y la describieron en diferentes audiencias judiciales.

Durante la feria, la investigación que continuará avanzando es la que indaga cómo se filtró información confidencial sobre el resto de las causas. La fiscal Fossati también está a cargo de ella y encargó a  la repartición de Hechos Complejos de la Policía que tome las declaraciones, dijo  el director de Comunicación de la Fiscalía, Javier Benech.

Caras y Caretas informó que citarán a declarar como testigo a aquellos periodistas que hayan accedido a información reservada. Según supo El Observador, hubo abogados de la causa que ya concurrieron a dar su testimonio y otros lo harán la semana entrante. Las declaraciones serán analizadas por la fiscal cuando se reintegre a trabajar.

La investigación está a cargo de Fossati por la premisa de que ella ni nadie de su equipo fue quien filtró la información. Si hubiera algún indicio de que algún integrante del equipo fiscal pudo haber tenido responsabilidad, el caso pasará a otra Fiscalía. Esta definición fue avalada por Juan Gómez, dijeron fuentes de Fiscalía de Corte a El Observador.

Las otras dos líneas de investigación –la del presunto espionaje y la de las irregularidades policiales– también quedarán a la espera de la vuelta de la feria judicial. La más avanzada de las dos es aquella que recae sobre cuatro jerarcas policiales. Aún permanecen en calidad de indagados y no han sido imputados, como si lo han sido los miembros de la banda que adulteraba partidas.

El estándar probatorio para imputar a una persona es relativamente bajo (el 99% de los pedidos de la fiscalía sobre eso son aceptados por los jueces, según información oficial). Pero al momento, la fiscal no lo ha solicitado y se encuentra analizando las declaraciones que ya tomó y buscando reunir nuevas evidencias.

Una postura similar había tomado en la investigación sobre los pasaportes, en la que venía trabajando desde enero de 2022. La primera detención ocurrió 10 meses después cuando pudo detectar un caso en flagrancia.