Defensor Sporting vive momentos muy complicados en lo deportivo y en lo institucional luego de una crisis que explotó durante el fin de semana, que derivó en la salida del entrenador Leonel Rocco y que nueve futbolistas fueran separados del plantel. No obstante, hubo un tiempo de proceso silencioso en la interna del plantel y del club que fueron planteando una historia con varias aristas.
Los episodios que quedaron a la vista se remontan al miércoles pasado cuando tras una fuerte discusión entre el preparador físico Agustín Laprovítera con el capitán, Andrés Lamas, el entrenador Leonel Rocco decidió separarlo del plantel principal.
Sin embargo, uno de los puntos principales del diferendo actual es que un grupo de futbolistas no tienen una buena relación con el gerente deportivo, Fernando Fadeuille.
“Tiene su personalidad y hace su trabajo, pero a los jugadores muchas veces no les cae bien”, indicó una fuente del club consultada por Referí.
Según confió otro informante consultado por Referí, uno de los principales referentes de este plantel Nicolás “Coto” Correa tuvo diferencias con Fadeuille.
La misma fuente violeta confió que hace algunos partidos atrás, Fadeuille, como gerente deportivo, entró al vestuario y Correa lo sacó a empujones.
Ahora también se suma la veta institucional, la cual deja a la vista que en dos años y medio, pasaron cinco técnicos por Defensor Sporting y ahora, para el cierre de la temporada 2021 en el Campeonato Uruguayo de Segunda División Profesional, fueron nombrados Héctor “Samanta” Rodríguez y Gerardo Miranda, para seguir sumando.
Cuando Ney Castillo ganó las elecciones en marzo de 2019, el club contrató a 17 futbolistas. Esto generó un descuido con las divisiones formativas, que fueron las que históricamente alimentaron el plantel principal.
En aquella oportunidad, algunos jugadores de la cantera quedaron libres y otros fueron cedidos a préstamo como ocurrió, por ejemplo, con Joaquín Piquerez.
También entonces, fue cesado Jorge “Polilla” Da Silva como entrenador y contrataron a Ignacio Risso, quien no tenía experiencia en Primera. Como no le fue bien, la directiva anterior contrató a Alejandro Orfila, un uruguayo radicado en Buenos Aires. Luego recurrieron a un histórico del club, campeón con Defensor en 1976 como jugador, Gregorio Pérez y también fue cesado.
Finalmente, en 2020 fue nombrado Eduardo Acevedo cuando el descenso a la Segunda división profesional era casi un hecho.
Cuando Acevedo fue cesado en julio pasado, la gran mayoría de los jugadores violetas pusieron el grito en el cielo.
“No querían que se fuera Acevedo. No aceptaron que se diera de baja a Acevedo”, dijo otra de las fuentes consultadas por Referí, esto derivó en que “Correa y gran parte del plantel, le echaron la culpa a Fadeuille de que se fuera Acevedo”.
Tras el alejamiento de Acevedo, los violetas contrataron a Leonel Rocco, quien este sábado terminó por renunciar tras las diferencias que mantuvo con el capitán Lamas, luego de una discusión del futbolista con el preparador físico y que lo separara del plantel. Esto derivó en que el resto de sus compañeros apoyara al capitán, por lo que no entrenaron sábado ni domingo, cuando el club se está jugando el ascenso a Primera en las últimas tres fechas de la fase regular y en los posteriores playoffs, si no logra uno de los dos ascensos directos a Primera.
El sábado, por unanimidad, los dirigentes decidieron separar a nueve jugadores del plantel principal: Matías Castro, Bernardo Long, Nicolás Correa, Andrés Lamas, Robert Ergas, Mathías Cardacio, Pablo López, Sebastián Píriz y Matías Cabrera.
¿Y qué papel juega en todo esto Nicolás Olivera, el actual asesor deportivo e institucional? No se trata de un nombre cualquiera, sino del jugador emblema de Defensor Sporting de los últimos 30 años.
“Nico puso plata de su bolsillo cuando faltaban pequeñas cosas y había que tenerlas de un día para otro como cereales, frutas. Si faltaba algo, él lo ponía de su bolsillo y tuvo otros gestos con los futbolistas. Lo único que quiere es que gane Defensor”, expresó un allegado a la directiva a Referí.
Antes de que cesaran a Rocco, Olivera intentó interceder entre el plantel y la directiva para que no separaran a Andrés Lamas. Sin embargo, no lo consiguió.
“Quedó muy mal. Salió de esa reunión llorando porque no podía creer lo que había vivido. Allí, los jugadores se enojaron con él porque no defendió a Lamas y quedó muy bajoneado”, señalaron a Referí.
Por otra parte, este lunes, los jugadores que no fueron separados del plantel principal violeta, le dijeron a los dirigentes que jugarán ante Uruguay Montevideo el miércoles, pero que si sus nueve compañeros no entrenan al mismo tiempo que ellos, aunque sea en otra de las canchas de Pichincha -y no en otros horarios, como lo vienen haciendo- y si no los dejan entrar al Estadio Charrúa para ver el encuentro, ellos no jugarán los últimos dos compromisos por el Campeonato Uruguayo de Segunda división ante Rampla Juniors y Danubio, en la fecha final.
Por ello es que los directivos violetas ya hacen entrenar a un selectivo de juveniles de Tercera, Cuarta y Quinta división para, en caso de tener que utilizarlos, estén prontos.
Defensor Sporting busca un poco de paz para estos tres partidos en los que se juega la posibilidad de acceder a los playoffs por el ascenso.
Inicio de sesión
¿Todavía no tenés cuenta? Registrate ahora.
Para continuar con tu compra,
es necesario loguearse.
o iniciá sesión con tu cuenta de:
Disfrutá El Observador. Accedé a noticias desde cualquier dispositivo y recibí titulares por e-mail según los intereses que elijas.
Crear Cuenta
¿Ya tenés una cuenta? Iniciá sesión.
Gracias por registrarte.
Nombre
Contenido exclusivo de
Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.
Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá