El futuro del fenómeno de las empresas unicornio en Uruguay en un contexto favorable

En setiembre del año pasado fue dLocal que superó el umbral de los US$ 1.000 millones, al obtener una valoración total de US$ 1.200 millones luego de levantar una ronda de inversión de US$ 200 millones. 

A su vez la compañía, fundada por Sergio Fogel y Andrés Bzurovski, anunció a principios de este mes de mayo que se estaba preparando para cotizar en la bolsa de Wall Street.

Por otra parte, PedidosYa también forma parte del “club de los unicornios”, pero de una forma diferente. La empresa uruguaya -hoy propiedad de Delivery Hero y que fue creada por Ariel Burschtin, Álvaro García y Ruben Sosnke- alcanzó los US$ 1.000 millones de valuación al considerar sus volúmenes de transacción y los múltiplos de la industria. 

Además, al comprar las operaciones de Glovo en América Latina, el valor se elevó a US$ 3.000 millones.

Ante esta realidad, muchos se preguntan cuál es el secreto que tiene Uruguay para que sus empresas se consoliden. A su vez, en el marco de un contexto favorable, se espera que se puedan dar más unicornios en la próxima década.

“Desde hace 30 años a esta parte, se apostó al desarrollo de empresas de tecnología y hoy en día eso está arrojando claros resultados”, explicó el director ejecutivo de Endeavor, Joaquín Morixe. Ejemplos como el de PedidosYa o dLocal, marcan precedentes que entusiasman a los referentes del ecosistema emprendedor.

Se entiende que, actualmente, Uruguay está viviendo un momento único en materia de emprendedurismo. Si bien quedan “mucho detalles por corregir”, hay un gran impulso tanto del sector privado como del público para que los negocios se desarrollen.

Esto se ve reflejado en el día a día, según contó uno de los fundadores de PedidosYa, Ariel Burschtin. “Te das cuenta que hay ambición, que hay fuerza y empuje por parte de los uruguayos”, consideró. 

Esta actitud proactiva, se suma al hecho de que a nivel terciario se vienen implementando metodologías de enseñanzas enfocadas en emprender. Para Burschtin esto fue clave en su recorrido. Poder contar con una institución educativa, en su caso la Universidad ORT, lo ayudó a entender algunos aspectos teóricos y tuvo la oportunidad de escuchar buenos consejos por parte de referentes.

Morixe, por su parte, cree que el ambiente empresarial tecnológico tiene el diferencial de que no “se considera a todos competencia”. Esto permite tener la posibilidad de entablar charlas o mentorías con personalidades reconocidas y que se genere un ida y vuelta. 

“He tenido la oportunidad de escuchar a Nicolás Jodal (CEO de Genexus) en mentorías y la verdad es un placer. No se guarda nada”, puso como ejemplo el directivo de Endeavor.

Los pasos de otros 

Ser los primeros tiene ventajas, pero sobre todo desafíos. En cualquiera de los casos, allana el camino para que otros que vienen detrás puedan seguir pasos similares con el objetivo de alcanzar el éxito. 

En Argentina, por ejemplo, Mercado Libre fue el primer unicornio y luego hubo una especie de “explosión” en donde muchas empresas aumentaron rápidamente su valuación, llegando a tener un total de cuatro en la actualidad.

Sobre este entendido, muchos referentes tienen claro que dLocal y Pedidos Ya son solo los primeros y apuestan a que generarán un efecto contagio. De acuerdo a lo que afirmó Burschtin, en el correr de los próximos años se espera que por lo menos dos empresas más hagan un recorrido similar y se vuelvan una insignia uruguaya.

Más allá de las buenas perspectivas, hay otros que prefieren ser un poco más cautos. El director de la Fundación da Vinci, Sergio Delgado, argumentó que en lo inmediato todos los emprendedores deben apostar por aprovechar el contexto favorable en el que se encuentran.

Poder tomar estos mojones de éxito tiene que servir para dar impulso pero no puede haber un optimismo excesivo dado que provocaría el efecto contrario al que se busca. “Esto marca cómo todo el ecosistema está empujando, por eso el ahora es muy importante”, dijo.

Todos los consultados tienen en mente empresas que esperan que se conviertan en unicornios de cara al largo plazo, de igual modo prefirieron no mencionarlas porque entienden que “es demasiada presión”.  “Se van a repetir las historias, estoy seguro, pero primero hay que dejar que cada cual recorra su camino y aproveche de las oportunidades”, afirmó Burschtin.

“Algo raro”

Así como hoy en día se están viendo algunos resultados, lo ideal sería que en la próxima década se dieran más ejemplos de este tipo. Delgado comentó que en el mejor de los casos, tener empresas unicornios no tendría que ser “algo raro”, sino que simplemente un orgullo.

Esto va de la mano con una serie de cambios que se tendrán que encarar desde el punto de vista cultural y político, para seguir sumando al ecosistema emprendedor y al mundo empresarial. “Muchas veces pensamos que esto se da por generación espontánea y la realidad es que hay mucho trabajo a la vuelta”, agregó Delgado.

En lo inmediato, el trabajo será abrirles camino a las nuevas generaciones. Para muchos allí está el gran valor que tiene Uruguay y todo dependerá de las armas que tengan los más jóvenes para salir a jugar fuera de las fronteras uruguayas. “Se va a generar un efecto multiplicador, de eso no hay dudas, pero hay que ver cómo se da este efecto”, dijo por su parte Morixe.

El “efecto” viene de la mano de los propios empleados de las empresas unicornios. Muchos de ellos hacen sus primeras experiencias laborales allí y luego deciden emprender con lo aprendido durante los años trabajados.

“Nosotros fuimos un molde típico que se acostumbraba ver en países como Estados Unidos -de la Universidad, capital semilla, venture capitals, salida a bolsa-. Ahora vendrán nuevos jugadores”, dijo en esta misma línea, Burschtin.