Hacia un modelo de ganadería a la australiana

El stock va a caer entre 400 mil y 500 mil vacunos, y Uruguay precisa 3,2 millones de terneros para mantener el rodeo con niveles de extracción que superan las 50.000 cabezas semanales desde hace casi un año. Los consignatarios hablan de una creciente escasez de ganado disponible, pero el presidente de la Asociación Uruguaya de Productores de Carne Intensiva (Aupcin), Álvaro Ferrés, cree que con 4,2 millones de vacas de cría y acelerando el entore de vaquillonas desde los 15 meses, no debería haber problemas con la materia prima. En ese contexto, los corrales de engorde, juegan un papel cada vez más protagónico.

¿Cómo ve Aupcin la situación? ¿Se va a llegar a un momento de escasez aguda de reposición? 

El hecho de tener 4,2 millones de vacas de cría es una fortaleza y no una debilidad, porque el potencial productivo de esas vacas de cría es muy superior al que Uruguay tiene (2,8 a 2,9 millones de terneros). Yo no vería un problema con los vientres. Esas vacas son suficientes para producir más de 3 millones de terneros con tecnología conocida, y hay categorías de vaquillonas –de más de dos dientes y de uno a dos años– que se podrían entorar antes para incrementar rápidamente el rodeo de cría y comenzar a producir terneros más pronto.

Es una decisión de las empresas porque la tecnología está. En el mundo se entoran las vaquillonas de 15 meses, no solo de 24 a 36 meses. Es un tema uruguayo, perfectamente se puede. La cuestión está en que la gente confíe que hacer eso le genera retorno al negocio, y que pase a ser un negocio productivo y no especulativo. Veo un desafío de aplicar tecnología para que la máquina de producción produzca más; sobra información de cómo hacer más eficiente el rodeo de cría.

¿Resulta mejor negocio vender la vaca preñada al frigorífico y hacerse de un dinero que hoy es mayor al habitual, y no esperar un año y medio para destetar al ternero que está en el vientre?

Si estoy en un negocio puntual, que por una vaca preñada de 400 y pico de kilos me van a pagar más de US$ 1.000, te digo sí. Pero mañana tengo que seguir trabajando. Si lo veo del otro lado, que mañana voy a tener un ternero que dentro de un año va a valer US$ 500, es un bruto negocio también. Uno es un negocio puntual y el otro es una oportunidad de seguir haciendo negocios para adelante. No es tan fácil desprenderse de una vaca de cría. ¿Y después qué, voy a salir a comprar terneros?

Hoy el ternero pasó a valer lo que parecería debería haber valido en una lógica de convencimiento de los productores. Porque si el ternero no valía más en relación al precio del ganado gordo, es porque la gente no está creída que este precio del ganado gordo vino para quedarse. Está empezando a pasar que el precio del gordo se mantiene alto y que la reposición va a ser un tema interesante para el futuro; puede llegar a escasear y habrá que cinchar de la cadena, entonces la gente le empezó a poner las fichas. Donde el Uruguay vea una mínima señal de mayor certeza para los buenos valores, enseguida se pone a trabajar.

Faltan seis o siete meses para el próximo entore, ¿ya se va a subir un escalón de vacas de cría por esa aceleración de la recría?

Yo creo que, si para el próximo entore los terneros siguen valiendo más de US$ 3, y las terneras cerca de esos valores, la gente va a intentar entorar todo lo que pueda, inclusive por el lado de las vaquillonas.

La cría es un negocio, y dentro de la ganadería hay distintos negocios para diferentes situaciones.

Si estos valores perduran en el tiempo, de la misma manera que estamos viendo un cambio muy importante en los procesos de recría y terminación de ganado con un salto importante en la faena, ya va a venir para el entore y para la vaquillona. Uruguay va camino a una mayor producción o una demanda de terneros a muy buenos valores. Y eso es una buena oportunidad de negocios. Estamos en el negocio ganadero para quedarnos, no para salir de todo hoy porque el valor está en niveles que no imaginábamos.

¿El negocio del corral puede sostener un ternero de US$ 500 y un maíz de US$ 300 la tonelada?

Mi respuesta es sí, no tenga ninguna duda. ¿Cómo no va a ser posible? Por eso el ternero y el maíz valen lo que valen, porque alguien lo está pagando. Estamos enfrentados a que los granos están altos. Y si los granos están altos, las carnes están altas: el pollo, el cerdo y la carne vacuna. Y si alguien no lo estuviera pagando no estarían altos. El soporte va a estar en el precio de venta. Lo que no es posible es mantener estos niveles de faena y crecer sin los corrales de engorde, que van a adaptar sus números en función de la realidad de sus ventas.

Si en el próximo entore se incorpora un número importante de vaquillonas, con terneros que van a nacer en la primavera de 2023 y van a estar disponibles en el otoño de 2024, ¿se sostiene esta faena de más de 50.000 cabezas por semana hasta el 2024 o se cae por el camino por falta de ganado?

Creo que se puede sostener. Los corrales de engorde, al imprimirle velocidad, también dan la posibilidad de que el animal que entre sea más nuevo y tiene que tener una mejor recría.

Un ternero nacido en la primavera de 2021 tiene el potencial de ingresar a un corral de engorde en noviembre o diciembre de 2022, con un peso de entre 350 o 400 kilos, y sale gordo en enero febrero de 2023. Sumando todos los novillos que hay, que tienen potencial de entrar en un corral de engorde, y si la cría se acelera, perfectamente podríamos crecer en la cantidad de animales que podemos encerrar.

El tema es si estamos dispuestos a tomar el riesgo, y a invertir para que eso suceda. La faena se puede mantener, sí, lo que implica es un aceleramiento productivo. Los precios permiten poner plata en el negocio para que eso pase.

“El novillo a más de US$ 5 no se va a caer mañana”

Uruguay se está enfrentando a un desafío, un cambio que está sucediendo más rápido de lo que nos imaginábamos. La edad de faena de los animales se está achicando, más del 70% de los novillos que se faena actualmente es de menos de cuatro dientes, eso se da como consecuencia de los corrales de engorde. Y hacia atrás tiene que haber un aceleramiento en los ciclos productivos. 

Tenemos récords de faena con seca de gran intensidad, que va a afectar en los sectores de ganado de cría. Sin embargo el sistema está pujante, con récord de exportaciones de precios; antes cuando había una seca de tres meses había vacas flacas en los frigoríficos, novillos flacos, y el precio del ganado se derrumbaba. Eso no pasó. Entonces estamos frente a un nuevo escenario productivo. 

Cuesta convencer a los productores ganaderos de eso, pero se van a convencer por la vía de los hechos, porque si no lo hace uno, hay otro inversor que ya lo está haciendo. Y eso es lo que está pasando en Uruguay. 

Hoy ya no hay más de esas familias con campo, en su lugar hay empresarios agropecuarios que a veces no se sabe ni quiénes son, y que le están imprimiendo a la producción ganadera, agrícola, y a los potenciales que tiene el Uruguay, una transformación muy rápida y que en la ganadería ya se está viendo.

El productor puede preferir ser cauteloso a la hora de comprar terneros. ¿No es arriesgado comprar un ternero arriba de  US$ 3 cuando no sé si se va a sostener 12 meses más el novillo a US$ 5,30?

Los productores pueden hacer un negocio más especulativo que productivo, tienen derecho a hacerlo; el tema es que el retorno del dinero los hará cuestionarse. Si soy invernador tengo que comprar reposición al precio que está en el mercado. Comprar terneros hoy a US$ 3,30 y vender novillos a US$ 5,30 es una relación fantástica.

Si mañana la carne baja, cuando venda ese novillo veré a cuánto está el ternero y haré de vuelta la diferencia. Nosotros estamos en un negocio para quedarnos, no para especular en el momento en que está todo allá arriba y después vemos qué se compra cuando baja.

Normalmente a los productores nos gusta seguir produciendo, ser más eficientes, tener un retorno económico y tratar de mejorarlo.

En otros momentos buenos de la ganadería la relación de reposición se iba más arriba, a US$ 1,30 o US$ 1,40. ¿Por qué ahora sigue baja?

Estaba peor y está empezando a acercarse más a ese valor. La gente tiene que convencerse que el novillo a más de US$ 5 no se va a caer mañana. Podrán pasar cosas en el mundo, pero da la sensación de que tenemos un precio bueno, que puede ser algo más estructural.

Si hoy quiero comprar terneros no tengo más remedio que pagar a lo que esté en el mercado. Y está bien que la gente empiece a animarse. En un mes el ternero subió 20 o 30 centavos, porque el precio del novillo sigue alto, y si uno quiere terneros tiene que pagarlos bien. Si no, no los consigue, y es la manera de que el que está abajo produzca más terneros. No existe más comprar terneros baratos y vender novillos caros. La relación del precio del ternero va a ser aun peor para el invernador.

¿Qué valor hay que ponerle al novillo gordo para que cierre la cuenta con el ternero a US$ 500 y el maíz a US$ 300?

Cuando hablamos de corral de engorde nuestro insumo principal no es el ternero sino el novillo de 400 kilos que lo metemos en un corral. Vamos a suponer que hoy vale US$ 2,80 puesto y el maíz US$ 300 la tonelada. Tenemos que ver un número generoso arriba de US$ 5 para que el corral de engorde vea atractivo encerrar ganado. Generoso no es US$ 5.05

¿Puede ser US$ 5,65?

Es un número que a mi entender hoy es atractivo, si no sigue subiendo el novillo. Hace un mes el novillo de cuota, de reposición, estaba a US$ 2,50 y hoy está a US$ 2,70. Y en las pantallas de la última semana se llegaron a pagar hasta US$ 2,80. Por lo tanto ¿US$ 5,65 puede llegar a ser un número atractivo, hoy? Sí. Ahora, si sigue subiendo la reposición capaz que no es suficiente.

¿Y hoy ese precio se está alcanzando?

En los convenios que se están haciendo hacia adelante, sí.

¿La producción de terneros, entonces, tiene el horizonte despejado?

Yo creo que sí. Y estamos hablando de que la exportación en pie no está actuando, básicamente por el lado de las hembras, por el lado de los machos no porque tenemos terneros caros respecto a otros países. Se está dando el ideal para el Uruguay: todos los terneros están yendo para faena, se exportan como carne procesada, si producimos más se faena más, y estamos viendo que la industria absorbe y los mercados demandan. Estamos en la zona ideal para los productores de carne y se están dando las condiciones internacionales para que el Uruguay lo pueda acompañar.

¿Cuáles son los riesgos posibles, la dependencia de China no le preocupa?

Obviamente que una dependencia de un 80% de un mercado me preocupa, pero si China está creciendo, demanda y es difícil que tenga una marcha atrás, alguien lo tiene que abastecer. Parecería ser que Uruguay en su posición de neto exportador tiene una oportunidad fantástica. Australia también, excepto que tiene un tema político.

Me preocupa la dependencia de China, pero no dejar de venderle para venderles a otros mercados. Lo que yo les pediría a las autoridades es que se preocupen de abrir otros mercados desde el punto de vista arancelario y sanitario, para que la dependencia no sea solo de China. Eso sería el desafío para Uruguay.

El resto de Asia es un potencial demandante de carne para Uruguay, pero mientras tanto no vamos a dejar de aprovechar la oportunidad de mercado que nos da China, la ventaja de tener un país que nos compra, nos reconoce, y que si le vendemos más nos acepta más. La señal está en los mercados. Si hay otros mercados alternativos que quieren comprar carne, tendrán que pagar al menos lo mismo que China, sino no le vendo. 

¿Entonces la faena no se va a caer en los próximos dos ejercicios?

El desafío es que no se caiga; la tecnología para que no se caiga existe. Si Uruguay sigue siendo el mismo, no va a poder mantener esta faena. Pero no creo que vaya a seguir siendo el mismo, ahí está la diferencia. Creo que Uruguay tiene la oportunidad de un proceso de cambio y que está la tecnología para que continúe. La faena de estos primeros meses no hubiera sido lo que fue sin los corrales de engorde. Mañana puede caerse, puede mantenerse o subir. 

¿La velocidad del cambio tecnológico determinará el escenario que termine sucediendo?

Sí. Creo que vamos en un camino como el de Australia, que tiene 30% de tasa de extracción, 50% o más de los ganados terminados en corrales de engorde, especialización en los sistemas de producción: cría, recría y engorde. Vamos camino a eso y es lo que deberíamos desear, en el ánimo de que va a desparramar en puestos de trabajo en la industria frigorífica, fletes, mano de obra.