Cine, viajes virtuales y gastronomía, en el Picnic! de hoy

Estilo de vida > PICNIC!

Lo urgente, lo importante y lo que tengo ganas de hacer

Recomendaciones de música, gastronomía y películas, y más descubrimientos de cultura y bienestar, en esta nueva edición de la newsletter Picnic!
Tiempo de lectura: -'
23 de marzo de 2022 a las 11:39

En Pícnic! le damos la bienvenida al otoño que, como la primavera, son las mejores épocas para hacer un verdadero y bucólico picnic al aire libre. Entro en tema ya mismo, porque vengo en modo hartazgo con tanta lectura, curso, podcast, tutorial y consejo para ser más productivos. Debe ser porque tengo una mini obsesión por la productividad, que en los últimos años pasó de “tengo que hacer todo esto en el día”, a “tengo que hacer todo esto lo más concentrada posible para tener el tiempo suficiente para hacer otras cosas que me gustan, además del trabajo”. En esta vida agitada y en estos mercados laborales competitivos, se suele confundir trabajar mucho con trabajar bien y productivamente, y son pocas las personas que te cruzás en tu camino laboral que te alientan a hacer otras cosas que te gustan: una charla con amigos, una película, el hobby que te hace feliz, una caminata sin apuro. La ciencia ha confirmado una y mil veces que somos más productivos y más creativos si podemos hacer esas cosas y no solo enfocarnos en una computadora para marcar como completada la lista de tareas pendientes.
 
¿Alguna vez escuchaste hablar de la matriz Eisenhower? Es el método que desarrolló el famoso general y dos veces presidente Dwight D. Eisenhower, para priorizar considerando cuatro ejes: lo urgente, lo importante, lo no urgente y lo no importante. Todo esto suena medio simplista, pero no lo es tanto, sobre todo porque los humanos no somos muy buenos a la hora de priorizar. Si te enfrentás a cada rato a tu correo electrónico o a tu Whatsapp y empezás a contestar y borrar mensajes frenéticamente, estás trabajando sí, pero casi seguro que con muy poca productividad, porque en ambas plataformas se confunden con sorprendente rapidez -y sin que ni siquiera nos demos cuenta- los cuatro cuadrante del método Eisenhower.
 
“¡Quién puede definir con precisión la diferencia entre el largo y el corto plazo! Especialmente cada vez que nuestros asuntos parecen estar en crisis, casi nos vemos obligados a prestar nuestra primera atención al presente urgente en lugar de al futuro importante”, dijo el líder en 1961. Tiene razón.

CONTENIDO EXCLUSIVO Member

Esta nota es exclusiva para suscriptores.

Accedé ahora y sin límites a toda la información.

¿Ya sos suscriptor?
iniciá sesión aquí

Comentarios

Registrate gratis y seguí navegando.

¿Ya estás registrado? iniciá sesión aquí.

Pasá de informarte a formar tu opinión.

Suscribite desde US$ 345 / mes

Elegí tu plan

Estás por alcanzar el límite de notas.

Suscribite ahora a

Te quedan 3 notas gratuitas.

Accedé ilimitado desde US$ 345 / mes

Esta es tu última nota gratuita.

Se parte de desde US$ 345 / mes

Alcanzaste el límite de notas gratuitas.

Elegí tu plan y accedé sin límites.

Ver planes

Contenido exclusivo de

Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.

Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá

Cargando...