Hola. Es día de Pícnic! y la mesa está que estalla de delicias, novedades y mucho espíritu de reconstrucción. Es hora de empezar de nuevo o de empezar, directamente, en tantos planos de la vida. Para hacerlo necesitamos objetivos claros y foco. Y para concentrarse, lo dicen los científicos, debemos permitirnos desconcentrarnos en lo que vale la pena: un libro, un café especial, un plato que te hace explotar los sentidos, una obra de teatro que te permite soñar con la vieja normalidad. De todo eso hablaremos hoy y también de esto de vivir con el tapabocas en la cartera de la dama y el bolsillo del caballero. Esta es la primera semana en la que realmente tuve que usar bastante el nuevo adminículo y sigo sin poder empatizar con los orientales que lo adoptaron hace décadas. Tiene sus pros y sus contras; por un lado te ahorra muchas sonrisas por compromiso (y unos pesos en botox para borrar las líneas de expresión) y por otro tenés que aprender a respirar mejor. Soy Carina Novarese, te abro la puerta de Pícnic! Y espero que me cuentes en qué andás, para lo cual solo tenés que mandarme un mail acá.
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