Rocketman y otras siete películas que llevaron la música y a sus íconos a la gran pantalla

Rocketman es lo más nuevo de una tendencia que está presente en el cine desde hace tiempo y que ha dejado grandes películas e interpretaciones. Es, también, la continuidad para un subgénero –las biopics musicales– que parecen tener mucha vida por delante. A continuación, un repaso por algunas de las películas que tomaron la vida de un ícono –o varios– de la música y lo pusieron bajo los focos del séptimo arte.

Sid y Nancy (1986)

Como líder de los Sex Pistols, Sid Vicious es parte del Olimpo del punk, y como él, Gary Oldman logró una de sus interpretaciones más recordadas. Con la dirección de Alex Cox, Sid y Nancy recorre el romance entre el mítico frontman de los pelos parados y Nancy Spungen, primero groupie de la banda y posteriormente su pareja. Cosa extraña, esta película no tiene ninguna canción de los Pistols y fue criticada por los miembros remanentes de la banda por supuestamente alejarse demasiado de los hechos reales. 

Jonnhy & June: pasión y locura (2005)

“Hola, mi nombre es Jonnhy Cash”. La prisión es la de Folsom y el que lo dice bien podría ser el propio hombre de negro; la voz es similar, el tono y el porte también. Sin embargo, en pantalla tenemos a Joaquín Phoenix, y lo que estamos viendo es Jonnhy & June: Pasión y locura –Walk the line en inglés–, la película que narra el ascenso y el auge de Cash, así como la turbulenta relación que tenían él y su esposa/colega June Carter. Con frecuencia ubicada en la cima de las listas de biopics musicales, esta película dirigida por James Mangold casi no tiene fisuras y ofrece un retrato inolvidable del enorme músico que fue Cash. Reese Witherspoon se llevó el Oscar por su papel como June. 

Control (2007)

Ian Curtis debe ser una de las figuras más trágicas del rock alternativo. Epiléptico, depresivo y agorafóbico, el vocalista de Joy Division apenas vivió hasta los 23 años y pasó gran parte de su vida preso de un espiral de desolación y autodestrucción. A pesar de lo breve de su vida, su legado fue extremadamente influyente y así lo deja pautado la película Control, dirigida por el fotógrafo de estrellas del rock Anton Corbijn. Sam Riley se pone en la piel de este poeta maldito y protagoniza un film que, rodado en blanco y negro, adapta las memorias de la viuda del cantante, Deborah. 

Amadeus (1984)

Una de las obras cumbres del mítico Milos Forman. Con sus tres horas de duración y sus ocho premios Oscar –incluido el de Mejor película–, Amadeus recorre la historia de Wolfgang Amadeus Mozart a través de los ojos de Antonio Salieri, compositor contemporáneo al músico, que celoso de su éxito asegura haberlo asesinado. Con la música como tercer gran personaje, diferencias sustanciales con la vida real de Mozart y decorados originales que realzan el espíritu de la época, Amadeus permanece como uno de los retratos más originales, histriónicos y destacados en el terreno de las biografías musicales.

I’m not there (2007)

I’m not there sirve para cumplir con un viejo deber del cine: darle una película a esa leyenda viviente de la cultura que es Bob Dylan. Seis personajes diferentes interpretados por varios actores –Cate Blanchett, Christian Bale, Ben Whishaw, Heath Ledger, Richard Here y Marcus Carl Franklin– retratan diferentes aspectos de la personalidad de Dylan, y terminan conformado así una extraña antología que desnuda al músico en distintas facetas. Todd Haynes se puso al frente de este proyecto y Blanchett logró con ella su cuarta nominación al Oscar.

Ray (2004)

A los 7 años Ray Charles Robinson se quedó ciego. Eso no le impidió, sin embargo, convertirse en el “padre del Soul”: hoy, Ray Charles es considerado uno de los exponentes más importantes de la música norteamericana, propulsor de influencias que llegan hasta los ritmos y géneros de hoy. En 2004, Jamie Foxx se puso en la piel del músico para protagonizar Ray, una biopic que le dio el Oscar a mejor actor al año siguiente. Onírica y vertiginosa, esta película dirigida por Taylor Hackford se mantiene vigente como una de las mejores biografías musicales de los últimos años.

Letras explícitas (2015)

Hace algunos años llegó a los cines una película que pasó un tanto desapercibida pero que, sin embargo, hoy se constituye como una de las producciones sobre la historia del rap en Estados Unidos más potentes. Straight Outta Compton, como se titula originalmente, recorre la formación y la disolución del grupo N.W.A. (Niggas With Attitude), un colectivo que en la década de 1990 impulsó al género desde uno de los barrios más peligrosos y marginales de Los Ángeles; de él salieron algunas de las figuras más importantes del rap de los últimos años, como Dr. Dre y Ice Cube. Dirigida por F. Gary Gray, la película ahonda en la brecha social y racial de una de las ciudades más importantes de EEUU, y eso mismo fue lo que situó al film en medio de una conversación contemporánea que estaba hablando, justamente, de eso.

Las que quedan y las que faltan