El presidente del Directorio del Partido Nacional, Álvaro Delgado, cuestionó los apoyos de Yamandú Orsi hacia el canciller Mario Lubetkin, luego de la marcha atrás en la emisión del nuevo pasaporte que supuso inconvenientes con países como Alemania, Francia y Japón.
Parte de la oposición pidió la renuncia de Lubetkin, pero el presidente dijo que lo respalda "cada vez más".
Debido a estas declaraciones, Delgado hizo un paralelismo con el fútbol sobre el puesto del canciller. "Cuando un club respalda mucho a un técnico es porque está a punto de cambiarlo, ¿no?", dijo Delgado.
"El presidente Orsi respalda a los ministros después de la marcha atrás con las cosas mal hechas", criticó Delgado este viernes en rueda de prensa consignada por Telemundo de Canal 12.
El excandidato a presidente blanco afirmó que en estos cinco meses el gobierno de Orsi ha tenido "errores no forzados", como por ejemplo los pasaportes que se emitieron desde abril, que generaron controversia y una posterior marcha atrás.
Los pasaportes uruguayos experimentaron un cambio a inicios de este año para incluir el país de ciudadanía/nacionalidad en el documento y eliminaron el campo de lugar de nacimiento, para evitar que ciudadanos legales tuvieran problemas para ingresar a algunos países que, según afirman, los discriminaban por su lugar de nacimiento.
Pero estas modificaciones motivaron inconvenientes en los países ya citados, en algunos casos para viajes de corta estadía y en otros para acceder a visas.
El canciller de la República, Mario Lubetkin, había defendido la normativa diciendo que era algo que había iniciado la anterior gestión y que fue bien recibido por organismos internacionales.
El martes pasado las autoridades comunicaron la vuelta al documento viejo. La marcha atrás desató una catarata de reacciones en la oposición pidiendo la renuncia del canciller.
"El canciller Lubetkin trató de explicar e incluso llegó a una cosa insólita", según Delgado. "Nunca vi un canciller polemizando con los embajadores, no está bueno. Si hay un error, lo primero que tiene que hacer es reconocer el error y echar para atrás", agregó el nacionalista debido a información contradictoria que se generaba entre el Ministerio de Relaciones Exteriores y las propias embajadas.
"Al final tanto se insistió, era tan ridícula la situación, generó tanto perjuicio, que volvieron para atrás", sentenció el presidente blanco.