En un comunicado conjunto emitido por sus respectivas cancillerías, Argentina, Brasil, Chile y México expresaron su "profunda preocupación" por la decisión del Gobierno de Israel de construir nuevos asentamientos de colonos y legalizar otros nueve en la Cisjordania palestina bajo ocupación militar israelí desde 1967.
Los gobiernos de los cuatro países expresaron en el texto que los planes del Ejecutivo israelí del primer ministro Benjamin Netanyahu, quien lidera en su regreso al poder una coalición de partidos ultranacionalistas y religiosos, podrían dificultar la creación de un Estado palestino, posibilidad a la que ratificaron su apoyo y que cuenta con la aprobación de Naciones Unidas (ONU).
El comunicado se da una semana después que el nuevo Gobierno de Israel, que asumió en diciembre pasado y es considerado el más de derechista de la historia del país, anunciara planes para construir 10.000 nuevas casas en las colonias israelíes en Cisjordania y su intención de "legalizar" nueve asentamientos en la región.
Israel capturó Cisjordania y Jerusalén este en la guerra de 1967 contra los países árabes, y desde entonces levantó allí decenas de colonias en las que ahora viven 475.000 israelíes, entre 2,8 millones de palestinos que reclaman el territorio para fundar allí un Estado, solución que cuenta con el apoyo de la mayor parte de la comunidad internacional.
En la práctica, las negociaciones de paz entre Israel y Palestina se encuentran estancadas hace años ante la negativa israelí a detener lo que califica como un "crecimiento natural de las colonias", al tiempo que los palestinos argumentan que el avance demuestra la mala fe de Israel y sus intenciones de conservar los territorios ocupados.
Los nueve asentamientos que Israel decidió "legalizar" ahora eran ilegales hasta hace poco según la legislación israelí porque se establecieron sin la aprobación del gobierno. Sin embargo, la ONU considera ilegal todo asentamiento judío en Cisjordania, según el derecho internacional y de acuerdo a la resolución número 2334 del Consejo de Seguridad de diciembre de 2016.
En su comunicado, los gobiernos de Argentina, Brasil, Chile y México calificaron los planes de Israel como "medidas unilaterales" que "constituyen graves violaciones del Derecho Internacional y de las Resoluciones del Consejo de Seguridad”, al tiempo que enfatizaron que las intenciones del gobierno de Netanyahu “contribuyen a elevar las actuales tensiones".
"Nuestros gobiernos expresan su oposición a cualquier acción que comprometa la viabilidad de la solución de dos Estados, en la que Israel y Palestina puedan compartir fronteras seguras e internacionalmente reconocidas, a la vez que se respeten las legítimas aspiraciones de ambos pueblos de vivir en paz", agrega la nota.
"Los Gobiernos de Argentina, Brasil, Chile y México llaman a israelíes y palestinos a abstenerse de actos y provocaciones que puedan promover una escalada mayor de la violencia y a reanudar las negociaciones para alcanzar una solución pacífica al conflicto", dice el comunicado, que se suma a los cuestionamientos hechos la semana pasada por Estados Unidos y la Unión Europea (UE) a los planes anunciados por Netanyahu y sus aliados.