El déficit fiscal se situó en 5% del Producto Interno Bruto (PIB) en los 12 meses a febrero, lo que implicó un empeoramiento respecto a enero, según los datos publicados este martes por el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).
Así, la segunda administración de Tabaré Vázquez (que había arrancado en marzo de 2015 con un rojo del 3,3%) entregó a su sucesor Luis Lacalle un déficit de las cuentas públicas casi 2 puntos por encima de ese guarismo. Durante el último quinquenio, la economía sufrió un notorio enlentecimiento y estancamiento en los últimos dos años.
El resultado del Sector Público No Financiero (SPNF) se ubicó en -4,2% del PIB. Este resultado se encuentra afectado por adelantos de pasividades y salarios públicos correspondientes al mes de marzo que se pagaron el último día hábil de febrero debido a cuestiones operativas. Dejando de lado dicha distorsión, el resultado se ubica en -3,1% del PIB, lo que implica un deterioro de 0,5% del PIB respecto a lo observado en enero.
En tanto el impacto de los ingresos por el Fideicomiso de la Seguridad Social –ley de cincuentones-, se mantuvo en febrero en 1,2% del PIB.
De esa manera, el resultado fiscal del SPNF depurado de este efecto fue de -4,3% del PIB.
Los ingresos del SPNF se ubicaron en 30,3% del PIB, disminuyendo 0,4% del PIB respecto al mes anterior. La recaudación de la DGI disminuyó 0,2% del PIB en parte como consecuencia del desfasaje en términos caja a marzo de un pago del BPS correspondiente a recaudación del mes de febrero (0,1% del PIB), informó el MEF.
Adicionalmente, en la línea Otros ingresos del Gobierno Central se observó una reducción de 0,2% del PIB asociada a que en febrero de 2019 se había registrado un ingreso por utilidades del BROU del ejercicio 2018. Finalmente, los ingresos del BPS y el resultado primario corriente de las Empresas Públicas permanecieron constantes en términos del PIB, según informó el MEF.
Los egresos primarios del SPNF se ubicaron en 32,2% del PIB, aumentando 1,1% del PIB respecto a enero de 2020. Dicho aumento se explica casi enteramente por el aumento de las remuneraciones y pasividades antes mencionado. Sin tener en cuenta ese efecto, las pasividades tuvieron un aumento de casi 0,1% del PIB que fue compensado por menores inversiones, transferencias y gastos no personales.
En tanto, el pago de intereses del SPNF permaneció incambiado en términos del PIB respecto al mes anterior (2,4%).
Por otra parte, el resultado global del BCU se ubicó en -0,7% del PIB, empeorando 0,1% del PIB respecto a enero de 2020. Esto se debió principalmente a mayores intereses pagados por dicho organismo, según los datos oficiales.
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