Nacional > Contradicciones
Director del instituto que produce vacunas de Sinovac dice que aún no está asegurada la cantidad de dosis anunciadas por Lacalle
El director del Instituto Butantan de San Pablo, Dimas Covas, aseguró que todavía no existe un acuerdo cerrado con el gobierno de Uruguay por la compra de la vacuna del laboratorio chino Sinovac. Si bien hay un preacuerdo, las conversaciones siguen.
Butantan es un centro de investigaciones científicas con casi 120 años de existencia y uno de los principales productores de vacunas de Brasil, y fue el Instituto que llegó a un acuerdo con el laboratorio chino para funcionar como intermediario en las negociaciones con los países de América Latina.
Dimas Covas dialogó con el programa de radio No toquen nada, y aseguró que hubo un “inicio de conversación” y que el Ministerio de Salud Pública de Uruguay hizo algunos “cuestionamientos lógicos” pero que las conversaciones siguen, según describió la periodista Denise Mota, que mantuvo la conversación con Covas.
Dimas Covas señaló que el acuerdo de compra todavía no está cerrado y tampoco hay un número exacto de dosis. Esta versión contradice lo anunciado por el gobierno el pasado fin de semana.
El presidente, Luis Lacalle, anunció el sábado en conferencia de prensa la compra de 1,75 millones de dosis de la vacuna Sinovac que comenzarán a llegar en marzo. Las vacunas de Sinovac se suman a otros 2 millones de dosis comprados a Pfizer/Biontech y a los 1,5 millones del fondo Covax.
Además, el director del Instituto Butantan descartó la posibilidad de que el gobierno uruguayo haya comprado directamente al laboratorio chino porque, según dijo, “por contrato” ellos son los intermediarios con los países de América Latina.
Solo Chile y Honduras, que ya tenían conversaciones con el laboratorio antes de que el Butantan firmara el convenio para ser el intermediario, negociaron directamente con el laboratorio del gigante asiático.
Dimas Covas agregó que Uruguay mostró un firme interés en las vacunas y que se habla de cerca de 1,5 millones de dosis.
La Coronavac, la vacuna fabricada por Sinovac, comenzó a ser aplicada en San Pablo el 17 de enero y en todo Brasil a partir del lunes 18. El Instituto Butantan depende del gobierno de San Pablo y la aplicación de la vacuna ha generado un enfrentamiento político entre el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, y el gobernador de San Pablo, João Doria. El gobierno de San Pablo fue el que inició las conversaciones con el laboratorio chino para adquirir las vacunas.
El Observador intentó comunicarse tanto con el ministro de Salud Pública, Daniel Salinas, como con el secretario de Presidencia, Álvaro Delgado, para consultarlos sobre este tema pero no obtuvo respuesta.
