Dos golpes al mentón de la ganadería uruguaya

El precio  de  los terneros  está en mínimos de dos años. El del novillo, a punto de caer por debajo de los US$ 3 por kilo de carcasa, es decir en el nivel más bajo desde diciembre de 2017.

A medida que se aproxima el verano, los productores bajan la carga ganadera en los campos. La oferta es creciente y con una industria mejor posicionada –iniciando la faena de ganados de corral con destino a la Cuota 481– el mercado del ganado gordo en Uruguay lleva ocho semanas consecutivas de baja en el precio. 

El novillo especial de exportación cotiza en el eje de los US$ 3,10 por kilo en cuarta balanza. Un escenario muy diferente al registrado hace un año atrás, cuando alcanzaba un máximo histórico de US$  4,36 por kilo, con China comprando a todo ritmo.

Cuatro semanas de baja en la faena

La oferta de ganado se ha acelerado, pero la industria no la absorbe. Van cuatro semanas de baja en la faena. Y la baja del ganado gordo se traslada al mercado de reposición y así  el ternero quiebra la referencia de los US$ 2 por kilo en pie, que ha sido el piso de precios durante varios años.

El promedio de los últimos tres remates por pantalla fue US$ 1,97 por kilo, el más bajo desde noviembre de 2018 y un 25% por debajo del precio de un año atrás (US$ 2,62). Las ventas de Plaza Rural de esta semana quedaron por debajo de esa referencia.

Con el pronóstico climático de La Niña encima todo hace pensar  que el riesgo hasta marzo seguirá presente. Y eso es un fuerte contraste con el año pasado, lluvioso y sin pandemia, con China comprando a todo ritmo y el precio arriba de US$ 4 por kilo de carcasa y subiendo.

Con esto, para el invernador que disponga de reservas forrajeras, se da el premio de una relación de reposición favorable. La relación de reposición –cociente entre el precio del ternero y el de novillo gordo– está en el valor más bajo del año.

El sobreprecio del ternero es de 13% respecto al del ganado para faena, con base en los precios de la Asociación de Consignatarios de Ganado (ACG). En 2020 alcanzó máximos de 1,36 en marzo. Hay una necesidad de bajar carga muy fuerte que se ve en la abundancia de ganado que sale a la venta en las diferentes subastas que se hacen en las pantallas.

A la vez, la posibilidad de que Turquía aparezca dando piso a los precios del ternero a través de compras en pie parece lejana, al menos hasta el último mes del año. La moneda de Turquía atraviesa una depreciación muy fuerte que la semana pasada llevó al relevamiento del equipo económico; la lira cotizaba a 5 por dólar y está por encima de 8 liras esta semana. Alejandro Dutra, directivo de la Unión de Exportadores de Ganado en Pie, destacó a Blasina y Asociados que “se ha achicado la diferencia entre el precio del ternero de Uruguay y de Brasil, lo que le da una ventaja a Uruguay a la hora de concretar nuevos negocios, no solo con Turquía, sino con otros países de Medio Oriente, pero hoy por hoy el margen es muy ajustado y a pesar de que hay mayor interés no hay concreción de negocios”.

Uruguay cae, la región sube

En la región, Brasil le saca ventaja a Uruguay. El precio del novillo gordo en Brasil sigue batiendo récords y superó por primera vez desde enero de 2018 al de Uruguay, consolidándose como el de precio más alto de la región, ayudado esta semana además por la valorización del real.

La escasa oferta de animales aptos para faena y la ávida demanda internacional impulsa el precio del ganado gordo en Brasil a máximos históricos en reales.

Al cierre de esta edición, alcanzó los R$ 280 por arroba de 15 kilos (US$ 3,40 por kilo), mientras que en Uruguay bajó por séptima semana consecutiva y es difícil colocar a más de US$ 3 por kilo en cuarta balanza, 16 centavos menos que en Brasil y el precio más bajo desde mediados de abril. Un año atrás valía más de US$ 4.

Según el Centro de Investigación de Economía Aplicada (Cepea) de Brasil, en el último mes el novillo gordo avanzó 8,5% medido en reales y 10,6% en dólares, mientras que el aumento en el último año es de 67% en reales y 21% en dólares.

Según investigadores de Cepea, de aquí a fin de año los precios se mantendrán firmes en Brasil. La expectativa es que China aumente el volumen de carne vacuna importada, ya que necesita cubrir un déficit de hasta 10 millones de toneladas. Además, la valorización del real ha afirmado aún más los precios.

En Argentina el novillo especial de exportación subió la semana pasada, pasando de US$ 2,70 a US$ 2,80 por kilo. Y en Paraguay el precio del ganado gordo pasó de US$ 2,80 a US$ 2,90 por kilo.

La segunda ola

Por el lado de la demanda internacional, las noticias de la segunda ola de covid-19 tuvieron un impacto fuerte. Los importadores europeos postergan negocios de cuota 481 y cancelan embarques de carne a frigoríficos locales, ante un freno en la demanda por el endurecimiento de medidas sanitarias impuestas en la Unión Europea para intentar contener un nuevo avance de coronavirus.

“Europa sigue muy complicado para el enfriado, está prácticamente paralizado (…) se está pidiendo postergar negocios de la 481”, señaló a Blasina y Asociados un operador del mercado cárnico. También se están registrando ajustes de valores.

“Lo peor es la incertidumbre que genera el lockdown (restricciones de la actividad) de varias semanas. Pero hay que ser optimistas, que la medida surta efecto y en un mes puedan volver a operar”, señaló un industrial, que confirmó la postergación y cancelaciones de embarques desde Europa.

La posible vacuna anunciada esta semana todavía no hace efecto en el sector de los hoteles y los restaurantes.

Samy Ragi, director de la empresa de trading Mirasco, dijo al programa Tiempo de Cambio de radio Rural que “los cortes del cupo Hilton no se venden, o se vende a un precio muy bajo”.

China, se muestra estable, con algunos ajustes de precio a la baja, en especial para las cargas de diciembre que llegan luego del año nuevo chino, señaló un trader consultado.

La noticia esta semana de una vacuna contra el covid-19 puede cambiarlo todo en 2021. Pasada la sequía y la pandemia, la ganadería puede volver a brillar. Pero durante esta sequía la segmentación sofisticada de la carne uruguaya hacia restaurantes y hoteles juega en contra. Mientras la sequía genera más oferta, la demanda que absorba ese ganado no aparece.

Producción: Cecilia Pattarino