José Mario Fassanello, el productor de huevos que traslada esa pasión a sus hijos y llegó a la UAM
José Mario Fassanello, orgulloso de vivir en la “capital de la avicultura nacional”, fue uno de los empresarios que estrenó la Unidad Agroalimentaria Metropolitana (UAM)
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01 de marzo de 2021 a las 05:00
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Hace unos 40 años, José Mario Fassanello, cuando era niño y adolescente, se fue criando viendo cómo su padre desarrollaba labores de granja, entre ellas una suerte de producción casera de huevos. “La actividad que hoy tengo es una pasión que heredé y que se la voy pasando a mis hijos”, reflexionó cuando El Observador le preguntó cómo se fue convirtiendo en uno de los tradicionales productores de huevos que hay en Canelones, departamento que le aporta al consumo local la mayor cantidad de producción de ese alimento.
“Yo era chico, mi padre tenía como actividad principal la producción de artículos de chacra y llevar mercadería a flete al Mercado Modelo, pero además tenía unas cuantas gallinas ponedoras y así fui aprendiendo cómo manejarlas. Él tenía al huevo como complemento, era algo más, pero me gustó, fui averiguando, fui aprendiendo, viendo a los colegas que tenían experiencia por ejemplo y me metí del todo”, detalló.
La entrevista se realizó en su nuevo puesto en la Unidad Agroalimentaria Metropolitana (UAM), el lunes 22, primer día de actividades en ese espacio tras la mudanza del viejo Mercado Modelo, donde fue uno de los empresarios mayoristas durante cuatro décadas. El puesto de la Granja Avícola San Sebastián es uno de los que hay en el Mercado Polivalente.
Allí se pudo ver varias cosas que dan cuenta de la pasión de este productor por lo que hace y cómo lo hace: el logo de su empresa en su abrigo, en el termo, en varias banderas y obvio en el packing, en todos lados con una frase que eligió: “Tan natural como un huevo”.
Con alegría, mientras atendía el puesto, contó que en su oficio no solo lo ha acompañado siempre su esposa, también la familia: tienen cuatro hijos y el mayor es parte de la empresa, otro de 15 años se está sumando de a poco, hay un tercer varón aún en edad liceal y la hija se dedica a otra cosa, pero relacionada: “Es nutricionista y de cierta manera me ayuda porque tiene claro y lo dice siempre que el huevo es un gran alimento muy sano, 100% natural, totalmente recomendable”.
Rápidamente, sobre eso, dijo que “la gente ya como que ha ido dejando atrás aquel cuco de que el huevo genera colesterol o no hace bien... los médicos y los nutricionistas aconsejan al huevo en las comidas, por algo será”.
De todos modos, se apresuró a señalar que “sería bueno” que haya una campaña publicitaria de estímulo al consumo, como sucede por ejemplo con la Lista Inteligente, mediante la cual cada 15 días el sector hortifrutícola recomienda a la población el consumo de un conjunto de productos.
“Soy uno de los integrantes de la Asociación de Productores Avícolas Sur, recuerdo que hace un tiempo hubo algo de eso, una campaña a favor del huevo y el consumo mejoró”, mencionó.
Añadió que por su experiencia puede afirmar que la producción nacional de huevos es “de máxima calidad” y es “100% segura”.
Además, remarcó, “tenemos la enorme ventaja para esto del consumo de alimentos frescos de ser un país chico, todo está cerca, estos huevos que hoy estoy vendiendo un lunes fueron producidos el viernes o sábado... eso en otros lugares del mundo no es posible”.
Mas huevos en pandemia
A propósito del consumo, como sucedió con otros rubros –por ejemplo el vino cuya demanda y consumo se elevó desde marzo de 2020–, “la pandemia que hizo que nos quedáramos más en casa, que se cocine más entonces, aumentó la comercialización de huevos para su consumo directo o como ingrediente para las diferentes elaboraciones”, subrayó. Algo que le vino bien a toda la cadena, desde el que cría hasta el eslabón final, el comerciante.
La capital avícola del país
Con inocultable orgullo, este productor explica que su principal ámbito de trabajo está a la altura del km 73 de la ruta 65, en San Bautista, localidad canaria reconocida como “la capital de la avicultura nacional”.
En su casa realiza dos de las labores: el packing de los huevos y la elaboración de la ración con la que se alimenta a las gallinas.
Para elaborar esa ración José Mario utiliza una mezcla diseñada de modo profesional, con base en maíz, harina de soja, carbonato de calcio y vitaminas, insumos que adquiere en todos los casos en la plaza local.
“El sistema que tenemos es muy sencillo: hay cinco granjas con las que trabajo, les llevo las gallinas y el alimento y ellos como façoneros me entregan los huevos, lo que tiene claro está un pago por ese servicio”, explicó.
Recibidos los huevos, en sus instalaciones los clasifica con base en lo que pesan –eso determina el tamaño– y hace al empacado, en piezas con media docena, 15 huevos o 30, para comercializarlos mediante distribución propia a diferentes comerciantes o como mayorista en la UAM.
La producción de la granja de José Mario se deriva a feriantes, puesteros, bolicheros, almaceneros, supermercadistas y a comerciantes que adquieren huevos para su uso en la producción de alimentos y en la gastronomía.
Sobre el tema precio, tras citar que como sucede con las frutas y las verduras “hay momentos de más o menos oferta y más o menos demanda que inciden”, señaló que en estos momentos “el precio bajó y es accesible para la gente”.
A nivel mayorista, que es como él vende en el nuevo mercado de camino Pérez y la ruta 5, el día de la entrevista colocó el cajón con 30 docenas a $ 1.500 (es decir a $ 50 la docena), para el caso de lo que llamó “un huevo estandar”, dando a entender que puede haber huevos por más o menos dinero. Según puntualizó José Mario, “a esos valores el que me compra y vende en un puesto de la feria, por ejemplo, le tiene que recargar algo porque ese comerciante tiene sus costos y por supuesto su necesidad de una ganancia”.
Por otro lado, señaló, “ahora ese precio que se recibe por parte del productor no nos permite un margen de rentabilidad, la verdad es que estamos muy justos, porque el precio del huevo está algo bajo y han subido mucho los insumos, por ejemplo el precio del maíz y de la harina de soja”.
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