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En medio del debate político, arroceros vuelven a la carga para liberar importación de gasoil
La Asociación de Cultivadores de Arroz (ACA) divulgó un comunicado este miércoles insistiendo con la libre importación de combustibles, debido “a la gran preocupación que existe en el sector por la involución en términos de competitividad del precio del gasoil” desde diciembre 2019 a marzo de 2020.
Según el documento, en marzo el precio del gasoil se situó un 21% ($ 7 por litro) por encima al de la paridad de importación. Para la ACA, la principal razón son “las operaciones monopólicas de Ancap”.
“Vemos una y otra vez como se prometen mejoras, las administraciones cambian, pero lamentablemente los problemas originados a raíz del monopolio persisten. En el momento en que Ursea (Unidad Reguladora de Servicios de Energía y Agua) dé a conocer los números de abril del corriente año, observaremos un incremento aún mayor en dicho desajuste, el cual representará, sin lugar a dudas, uno de los peores guarismos de competitividad en el precio del gasoil desde que se llevan registros”, se expresó por parte de la gremial de productores.
La ley de urgente consideración enviada por el Poder Ejecutivo al Parlamento prevé en su artículo 229 la derogación del monopolio de la importación, exportación y refinación de petróleo crudo y derivados del mismo establecidos a favor del Estado y gestionados por Ancap. Sin embargo, esta iniciativa presenta opiniones diferentes dentro de la coalición de gobierno, sobre todo de parte de Cabildo Abierto y del Partido Colorado, que no están de acuerdo con la idea de liberalizar la importación de combustibles por medio de la LUC.
En entrevista con El Observador, el nuevo presidente de Ancap, Alejandro Stipanicic (vinculado al Partido Colorado), reconoció que existen ineficiencias comparativas en la refinería de Ancap con respecto a otras con mayor capital y tecnología, pero dijo que le parecía “irrelevante” si la petrolera estatal tiene monopolio o no.
“La refinería dentro de los recursos que tiene lo hace muy eficientemente, pero no es comparable con otras instalaciones del mundo. Ahí hay un gap (brecha) que tenemos que bajar internamente. La obsesión de este Directorio va ser vender combustibles en la puerta de la plantas de distribución a paridad de importación. Eso hace irrelevante si hay monopolio de Ancap o no a futuro”, aseguró.
En 2019 volvió a ser más barato importar naftas y gasoil que refinar en el país, de acuerdo a los datos sobre precios de paridad de importación que elabora y publica la Ursea.
Durante el 2019 adquirir un litro de gasoil 50 S en el exterior tuvo un costo en promedio de $ 37,96 –incluyendo el margen de intermediación e impuestos-, frente a un valor de ese mismo producto en un surtidor de Uruguay de $ 40,4 por litro, lo que implicó un sobreprecio de 6%.
En tanto, para la nafta Súper 95 el costo promedio de importación fue de $ 51 por litro y el precio su comercialización en las estaciones fue de $ 54,95, es decir un 7% más caro.
La determinación de los precios de paridad de importación se basan en el ejercicio teórico que realizan los técnicos de Ursea de calcular el precio en el mercado local de productos terminados de similar calidad a los producidos por Ancap, en la hipótesis de que los mismos se importaran.
Ancap tiene diferencias con algunos aspectos de la metodología que utiliza la Ursea y se entiende que el sobreprecio es menor al estimado por ese organismo regulador.
Sin embargo, la brecha respecto a los valores que publica la Ursea para ambos productos se ha venido reduciendo fuertemente y en diferente medida a lo largo de los últimos dos años. El precio del gasoil -que es de $ 40,4 por litro- se mantiene incambiado desde enero de 2018. Por ese entonces la diferencia con el producto importado era de 23%.
