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Jueza negó el ingreso de US$ 3 millones para pago a la AUF
La Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) tiene problemas económicos evidentes, al punto que pagar el sueldo del cuerpo técnico de la selección mayor se ha convertido en un dolor de cabeza. Pero además, en estas horas, padece una disputa interna por poder. En medio de esta turbonada, la jueza María Helena Mainard, especializada en Crimen Organizado, negó el ingreso al país de US$ 3 millones con los que la empresa Full Play pagaría su deuda a la AUF. La magistrada fundamenta su negativa en que esos fondos son sospechosos de lavado de dinero, informaron fuentes judiciales a El Observador.
La AUF vendió a Full Play en US$ 6 millones los derechos de televisación de los partidos que la selección uruguaya juegue de local en las Eliminatorias sudamericanas para el mundial de Rusia 2018. En ese mismo contrato, Full Play cedió a la AUF los derechos televisivos para la emisión en Uruguay de los 81 partidos restantes de las Eliminatorias. A su vez, la AUF revendió los derechos de esos partidos (los de la selección uruguaya en el exterior y los de los restantes equipos) a Tenfield por US$ 12 millones.
El contrato entre AUF y Full Play se estaba cumpliendo hasta que el 27 de mayo del año pasado, cuando un sismo judicial sacudió a la FIFA y a la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol). Aquel día, siete dirigentes de FIFA y Conmebol fueron detenidos en el lujoso Hotel de Baur au Lac, en el centro de Zúrich, Suiza. El Departamento de Justicia de Estados Unidos había pedido las detenciones de los dirigentes –a quienes acusó de cobrar coimas– y la requisitoria de empresarios acusados de pagar esas coimas, entre ellos, Hugo y Mariano Jinkis, directores de Full Play.
Veinte días después de que estallara el escándalo de corrupción en Suiza, los Jinkis se presentaron en un juzgado de Buenos Aires. El juez dispuso que debían cumplir arresto domiciliario durante el tiempo que se tramitara el pedido de extradición de Estados Unidos. Mientras, en Uruguay, la jueza Adriana de los Santos congelaba los giros y las cuentas bancarias asociadas a Full Play o los Jinkis, por sospechas de lavado de dinero.
Los pagos y las deudas
En febrero de 2015, Full Play pagó US$ 1 millón a la AUF, pero la siguiente cuota, de US$ 500 mil, fue retenida por orden judicial. El escándalo desatado en Zúrich daba sus primeros coletazos en Uruguay.
Ante esa situación, la AUF rescindió el 28 de agosto de 2015 de forma unilateral el contrato con Full Play, bajo el argumento de que, al estar embargada, la empresa no podría pagar las restantes cuotas.
Full Play se presentó el 12 de setiembre ante la Justicia Civil para que se mantuviera el acuerdo con AUF. El juez Guzmán López intimó entonces a Full Play a depositar una garantía de US$ 1.750.000 para mantener el contrato. La cadena colombiana Caracol Televisión SA depositó entonces
US$ 1.750.000 como garantía de que Full Play cumpliría con el convenio, dinero que fue embargado por la jueza De Los Santos.
Luego, en noviembre, la jueza embargó US$ 1 millón que la empresa inglesa de marketing deportivo Pitch depositó en una cuenta de la AUF por el pago de dos cuotas del contrato. Por esta sucesión de embargos, Full Play, con el consentimiento de la AUF, pidió permiso para girarle US$ 3 millones desde una cuenta en Estados Unidos que es auditada por el Departamento de Justicia de ese país. La jueza Mainard, que quedó en lugar de De Los Santos, también se opuso a que esos fondos ingresaran al país.
Además de negar el giro por existir sospechas de lavado, la jueza pidió información a Estados Unidos sobre el titular de la cuenta y el origen de los fondos. Cuando tenga en su poder esa información, resolverá si autoriza el pago. Hugo y Mariano Jinkis fueron citados a indagatoria en Uruguay pero no pudieron declarar porque estaba en curso el juicio de extradición a EEUU. Finalmente, el juez federal argentino Claudio Bonadio denegó la extradición de los Jinkis a ese país.
