A priori suena como una idea traída de los pelos: en medio de un apocalipsis zombie, un muerto vivo se enamora de una joven sobreviviente. Sin embargo, Warm Bodies representa el éxito de un híbrido largamente explotado.
La película surge en medio de la creciente realización de mashups de géneros: es decir, la adaptación de historias ampliamente conocidas con una vuelta de tuerca más actual.
En este plan se estrenaron en estos últimos meses Hansel y Gretel: cazadores de brujas, o Abraham Lincoln: cazador de vampiros, pero con un rotundo fracaso en la crítica.
Warm Bodies –que se estrenará en Uruguay el 8 de marzo bajo el nombre Mi novio es un zombie– a pesar de ser ineludiblemente vinculada a Twilight, o incluso a Romeo y Julieta, parecería ser la excepción a la regla.
La película está basada en la homónima novela del escritor estadounidense Isaac Marion, celebrada por darle una visión inteligente y diferente al viejo relato apocalíptico, además de crear un monstruo entrañable, a la altura del mismo Frankenstein.
Entre sus admiradores más reconocidos se encuentra Simon Pegg, actor y coguionista
de otro filme de zombies: Shaun of the dead, quien afirmó que “no es Twilight con zombies. Está dirigido a una audiencia más madura, y como adulto me encantó”.
De acuerdo con críticas de medios como Time, Huffington Post y The Atlantic, esta misma oración se puede trasladar a su versión fílmica.
Mientras que Time la denominó como “la primera película que vale pagar para verla en el cine en el año”, The Atlantic afirmó que, a diferencia de muchas de las comedias románticas que se estrenan sobre el Día de San Valentín, esta sí tiene un “genuino latido”.
Gran parte su éxito se debe a la interpretación de sus protagonistas: el inglés Nicholas Hout en el cuerpo del zombie R, y Teresa Palmer, como Julie, su objeto de deseo, se llevan los mejores halagos. Por su parte, John Malkovich es el nombre más destacado del elenco e interpreta al padre de Julie y líder de la resistencia antizombie.
Al mismo tiempo, la audiencia estadounidense reafirmó efectivamente el atractivo de su premisa. En su primer fin de semana de estreno, la película recaudó más de US$ 20 millones, una cifra sorpresiva tratándose del mismo fin de semana del omnipresente Super Bowl.
La película fue la favorita del fin de semana, dejando muy abajo a la nueva versión de Hansel y Gretel, que solo obtuvo US$ 9,4 millones.
Junto a Warm Bodies también se estrenó Bullet to the Head, la nueva película de Silvester Stallone, en la que interpreta un asesino a sueldo que busca venganza.
El viejo héroe de acción no pudo ganarles a los zombies y tuvo que conformarse con el mísero sexto puesto en la taquilla con solo US$ 4,5 millones recaudados.