Mides propone cambios al Sistema de Cuidados porque "no se ha desarrollado con humanismo"

Además, una comisión formada la semana pasada tendrá el cometido de rediseñar el protocolo referido a reclamos, denuncias y quejas referidas al que fue uno de los buques insignia de la pasada administración: el Sistema Nacional Integrado de Cuidados. 

Su flamante directora, Florencia Krall, recibió un pedido directo del ministro Martín Lema: un cambio total de rumbo con base en la evidencia. Para las actuales autoridades del ministerio el Sistema de Cuidados fue “bien inspirado” pero en los hechos “no se ha desarrollado con humanidad ni con profesionalismo”. 

Así lo indica un informe elevado por el ministerio al Parlamento que enumeró una serie de razones para este dictamen. En primer lugar, que se trata de un modelo “injusto” para la persona que debe recibir el cuidado. 

En particular porque, cuando se termina la relación laboral no está claro quién debe responder ni qué pasa, ya que el vínculo entre cuidador y persona cuidada, legalmente, es confuso y, en ocasiones, se ha colocado como empleadores al que requiere el cuidado. 

Un problema que, subrayó la cartera, ha generado juicios que terminaron perjudicando a gente en una situación sumamente compleja. 

“La justicia laboral va a juzgar a esa persona, que muchas veces cuenta con un subsidio del 100% del sistema porque ya tiene vulnerados sus derechos por otras razones”, dice el secretario nacional de Cuidados y Discapacidad, Nicolás Scarela. “Va a ser juzgado como cualquier empresa, incluso como una multinacional, con la diferencia que no puede elegir a sus empleados: le dan tres opciones”. 

El plan otorga un subsidio para que familias de ingresos medios y bajos contraten asistentes personales para adultos mayores en situación de dependencia, niños de hasta tres años y personas con discapacidad severa. 

El Mides dice que no puede estar supervisando 6.200 relaciones laborales que, técnicamente, son independientes, por lo que habrá que ir hacia un “plan superador” que ataque directamente este tipo de situaciones. 

Pero hay otro tipo de problemas que hacen, según el ministerio, fundamental ajustar los protocolos de denuncias. “Es la puerta de entrada a la información de cómo se están llevando a cabo los cuidados y cómo se está desarrollando desde el punto de vista de los derechos humanos”, dice el ministro Lema en su informe al Parlamento. 

Una auditoría de gestión que comprendió el período 2017-2019 detectó la falta de un procedimiento para recibir esas denuncias y, sobre todo, realizar el seguimiento correspondiente. 

Se pudieron constatar más de 100 denuncias, algunas de" muchísima gravedad". Casos de abuso sexual, hurto, privación ilegítima de libertad, tentativa de homicidio y violencia privada, entre otros, que están detallados en el informe.

En su plan, el Mides pretende además atender los casos que no llegaron a la Justicia y conocer qué trámite se le dio a esas situaciones. 

Además de los 6.200 binomios cuidador-cuidado, el sistema abarca a otros 1.700 usuarios a través de teleasistencia. También otorga becas para 700 niños de cero a tres años de edad. 

A los efectos el Mides comenzó a trabajar en un plan piloto para mejorar el sistema, en el que participarán los asistentes personales. En el informe el ministerio ratifica que “va a defender” el Sistema Nacional Integrado de Cuidados pero que, tal como está, solo seguirá creando el tipo de situaciones que se pretenden corregir. 

Accesos

Una primera “radiografía” realizada por el ministerio detectó que en la cartera hay 64 líneas de acción, de las que 50 corresponden a programas. Entre ellos las transferencias, que suponen el 58% de su presupuesto. 

En el informe elevado al Parlamento, Lema confirmó que la mitad de los programas tendrán cambios de diseño o de metas, o serán sustituidos. En algunos, la cantidad de metas hace imposible su monitoreo y evaluación. Por lo tanto, no se puede controlar si los recursos llegan a quienes tienen que llegar.

La Rendición de Cuentas propone sustituir el programa Uruguay Trabaja por otro, denominado “Accesos”. Uno de sus objetivos es hacer “más competitivos” a sus participantes. 

Seguirá teniendo unos 3.000 beneficiarios, que pasarán de recibir $11.400 a $18.000. 

En una segunda fase a partir de 2022, el programa implementará las “empresas madrinas”, que podrían brindar una “oportunidad sostenible” para que la persona “tenga la ilusión” y la expectativa de una salida laboral sostenible. 

Estas empresas recibirán un sello distintivo y las exoneraciones patronales correspondiente. Según lo anunció Lema, un convenio firmado con Tienda Inglesa permitirá cubrir el 30% de las vacantes que se generen en esa empresa con personas vinculadas al programa de inserción laboral del Mides. Otra “empresa privada muy importante”, asegura la cartera, está dispuesta a ofrecer el 50% de las vacantes. 

Otra de las decisiones del Mides pasa por  “focalizar” las transferencias. Así, incrementará el seguimiento de los beneficiarios. Así, el pasado lunes comenzó a implementarse un plan piloto en cinco oficinas territoriales para comenzar a tramitar las declaraciones juradas de los que perciben asistencia a través de la Tarjeta Uruguay Social. 

Líneas saturadas

El informe subraya la atención a las personas que pernoctan o que directamente viven en la calle en estos días de invierno. Los datos indican que, en promedio, se atendieron 3.900 casos por noche. 

La línea telefónica destinada a la recepción de alertas sobre esta situación, se afirma, se saturó varios días. 

El sábado 28 de junio, por ejemplo, hubo 225 llamados. El domingo 27 se superaron los 800 y el lunes siguiente los 1.700. 

El ministro Lema afirmó haber llamado personalmente a la línea 0800 destinada a ese fin. La demora, aseguró, fue de 6 minutos y 30 segundos. A través de la Gerencia Informática del ministerio se logró bajar el mismo día la demora a 1 minuto 11 segundos.