Recalculando: cómo están enfrentando los empresarios la crisis del coronavirus

El sector gastronómico es uno de los que presenta mayores dificultades. Los restaurantes cierran y mandan empleados a seguro de paro, sin tener claro cuándo van a abrir sus puestas y si van a poder reincorporar a todos sus colaboradores. La librería-café, Escaramuza, debió idear un plan estratégico para hacer llegar sus productos a los clientes y no abandonar la actividad, pero no pudo salvarse de mandar el 40% de sus trabajadores a seguro de paro.

El restaurante Tona no corrió con la misma suerte, y cerró sus puertas dejando a 12 trabajadores en seguro de paro. “Hay que cerrar porque tenés un stock de mercadería que no se te va a mover y no tenés forma de afrontar todo lo que son los salarios y pago de impuestos porque no hay ingresos”, afirmó el fundador, Hugo Soca.

Los propietarios de los locales de comida tienen poca liquidez y eso obliga a que solo se puedan hacer cargo de los gastos fijos, como por ejemplo impuestos. De la mano de esto, otros sectores se ven afectados como los frigoríficos –donde la actividad ya se encontraba impactada por la caída de las exportaciones a China.

Otro de los rubros que está siendo golpeado es el del comercio, ya que el consumo disminuyó y las ventas cayeron. Para el presidente de la Cámara de Comercio, Julio César Lestido, hay que ir pensando en la solución antes de que todas las empresas decidan cerrar. “Vamos a tratar de mantener abiertas las puertas, hasta que haya una orden de cerrar”, sostuvo al respecto.

Pero esta situación no solo genera problemas a nivel de ventas, sino que complica a muchas empresas a la hora de plantear estrategias de trabajo. Si bien el teletrabajo es la vedette de estos tiempos, muchas compañía todavía están tratando de ponerse a tiro.

Café y Negocios consultó a algunos empresarios para saber qué decisiones están tomnado para mitigar las consecuencias de la pandemia y qué esperan que suceda cuando regrese la calma.

Hugo Soca – Dueño del restaurante Tona

"En el sector de la gastronomía la primera medida es cerrar por un tema de que es lo que se está pidiendo. Luego, en el plano empresarial, hay que cerrar porque tenés un stock de mercadería que no se te va a mover y no tenés forma de afrontar todo lo que son los salarios y pago de impuestos porque no hay ingresos. La gran mayoría de los restaurantes locales mandaron a sus trabajadores a seguro de paro. En el caso de Tona pasó lo mismo.

Después de que pase todo, que creo que va a llevar por lo menos 15 días, van a haber unos cuantos meses de recuperación por parte de la economía para que todo vuelva a la normalidad. La repercusión económica creo que va a ser grande, porque las cosas pueden volver a la normalidad pero no creo que todo vuelva a ser igual. En Tona no tenemos un plan b para el después, cuando llegue ese momento veré de qué forma se van dando las cosas; en el caso del negocio gastronómico hay que buscar algo efectivo para que la gente se anime a volver a salir y gastar dinero. Otra cosa que preocupa es que no sé si todas las empresas vamos a poder reincorporar al personal. En mi caso concreto que tengo 12 personas al mando, no creo que pueda volver a emplear a todos de una vez sola. Para eso el apoyo del gobierno va a ser determinante, porque los impuestos son muy altos y creo que es momento de que nos devuelvan algo de lo hemos aportado por tantos años porque al empresario no se le da ningún apoyo.

Me cuesta mucho estar en mi casa, porque yo generalmente llego a dormir y el resto del día estoy con actividades. En ese sentido, creo que este tiempo nos tiene que servir para que todos –como sociedad- reflexionemos mucho sobre la vida en general, para tratar de disfrutar de esas pequeñas cosas que hacen al día a día y las hacemos pasar desapercibidas. También lo digo desde el punto de vista empresarial, me di cuenta de que paso viajando mucho por trabajo y que quizá tengo que estar más presente en el restorán".

Alejandro Lagazeta – Director de Escaramuza

"De lunes a miércoles de la semana pasada lo que hicimos fue tratar de comprender bien lo que estaba pasando, de pensar en las recomendaciones que daban las autoridades. En Escaramuza somos 50 empleados, tenemos una circulación diaria de 600 personas, además de unos 20 talleres por día. Evidentemente lo primero que hicimos fue parar la máquina para pensar cuál era la situación.

En ese proceso nos quedaron muy claras dos cosas: que tenemos una crisis sanitaria y una económica en puerta. Entonces comenzamos a idear una estrategia de salida que retenga a la mayor cantidad de trabajadores y cumpla con todas las condiciones sanitarias que se exigen. Así se generaron dos procesos: el take away, que básicamente es generar un proceso de alimentos saludables en donde los clientes –con todos los cuidados que se tienen que tomar- puedan venir y levantarlos. Lo mismo pasa con los libros, que también están disponibles para nuestros usuarios.

Pero, además, se desarrolló una estrategia de entregas a domicilio a 10 cuadras a la redonda, relacionado con los alimentos y con los libros. Luego hay una propuesta para todo Montevideo donde tenemos camionetas –que son higienizadas con todos los recaudos que se deben tomar-  para llevar alimentos, cultura y toda la oferta de Escaramuza. Al interior del país no llegamos con los alimentos pero sí con los libros. Todo esto es sin costo y con todos los cuidados a nivel sanitario.

Lamentablemente, a pesar de haber ideado esta estrategia, tuvimos que mandar al 40% de nuestros trabajadores a seguro de paro, pero tenemos la convicción de que estas nuevas unidades de negocio van a lograr recomponer a los compañeros.

De cara al futuro tenemos claro que la situación es muy dinámica, pero también entendemos que esto puede ayudar a que reincorporemos a la totalidad de la plantilla porque ya vamos a tener músculo en esta nueva estrategia planteada. Es decir, vamos a tener menguada nuestra forma de trabajar presencial, pero más desarrollado todo lo que tiene que ver con las entregas.

Recién hace un día (viernes pasado) que empezamos con esta nueva forma, pero si todo sigue así y nos va bien, Escaramuza puede estar encontrando una nueva modalidad de conectarse con la gente. Entonces, cuando esto pase, vamos a tener la Escaramuza de siempre y estas nuevas estrategias que escalarán por toda la ciudad y por todo el país".

Christopher Jones – CEO de Ta-Ta

"Todo lo que se pueda desconcentrar, se desconcentra. La atención al cliente te diría que hoy en día y cómo está la cosa es casi un servicio público pero que ahora está sometido a todas las medidas correspondientes para mitigar el contagio.

Con respecto al teletrabajo estamos aprendiendo mucho y vamos a sacar muchos aprendizajes de esto. Habíamos empezado hace un tiempo y estaba funcionando bastante bien pero esto nos forzó la máquina a pesar de que todos reaccionaron muy bien. Acá la tecnología se adaptó muy bien, quizá la comunicación por celular es lo que más se está usando.

En cuanto al negocio no se ha visto afectado, por lo menos en relación a las primeras evaluaciones que hemos venido haciendo. Cabe aclarar que todas ellas son muy recientes y esta es una situación dinámica. La gente comenzó a desesperarse y a tratar de comprar la mayor cantidad de cosas posibles y, en ese sentido, tuvimos algunas categorías que fueron afectadas. Igualmente la distribución ayudó a llegar a tiempo a todas las sucursales tanto montevideanas como del resto del país. Incluso esto no cambió nada en materia de promociones, y seguimos realizando las mismas de siempre.

Espero que la situación mejore, pero tengo claro que eso depende de todos nosotros. El actuar de los ciudadanos acá juega un papel fundamental, porque está en juego la salud humana y también la económica. El futuro es bastante incierto, pero siempre hay una luz al final del túnel, cada cual sabrá cómo hacer para encontrarla".

Julio César Lestido – Presidente de la Cámara de Comercio y director de Julio César Lestido S.A

"En lo que refiere al teletrabajo no tengo evaluaciones, porque recién las estamos haciendo. El sector comercio y servicios abarca una gran cantidad de empresas, entonces es muy difícil pasar raya todavía. Lo que sí es que es una nueva moda de trabajo y lo importante es adaptarse.

Para nosotros no hay problema con el trabajo remoto porque permite dos cosas: cumplir con las disposiciones del gobierno y mantener las empresas andando. Cualquiera de las opciones son buenas, porque el objetivo son dos: primero el tema sanitario pero también hay que tratar de que esto impacte lo menos posible. Que ya está impactando muy fuerte.

En lo que tiene que ver con las consecuencias para el negocio, el martes (pasado) hablaba con la Asociación de Concesionarios, no se pudo hacer ninguna operación de venta porque cerró el registro de la Intendencia de Montevideo. Distinto es el tema de los talleres, por ahora siguen dando servicio.

Respecto a las ventas, están paradas o están muy quietas. No puedo vender un auto usado, no puedo hacer nada. No se puede hacer nada. Respecto al comercio, se está generando un problema y hay que ir viendo la solución, porque si no las empresas van a tener que mandar a seguro de paro. El sector no ha tomado ninguna de esas medidas pero sí se están evaluando. Vamos a tratar de mantener abiertas las puertas, hasta que haya una orden de cerrar".

Respecto a las ventas, están paradas o están muy quietas

Marcelo Secco –  CEO para el Conosur de Grupo Marfrig

"Todo es muy prematuro todavía, sobre todo si pensamos en la mano de obra. En nuestro caso hay una particularidad que es que tenemos que tener un alto estándar de dos cosas: primero de higiene a nivel de las instalaciones del frigorífico. Y lo segundo es la capacitación intensa que brindamos a nuestros empleados, referido a lo que son las buenas prácticas –que se llaman BMP (Buenas Prácticas Manufactureras). Obviamente eso no nos exime de no contagiarnos pero sí nos permite generar una conciencia en nuestros colaboradores y esos hábitos son llevados también a su vida privada. Eso le baja bastante el riesgo de contagio, por supuesto que hay que ir tomando medidas para tratar de seguir bajando el riesgo.

En cuanto al resto de cosas que no son de mano de obra, se han simplificado mucho gracias a la tecnología. Es decir, tenemos procesos de automatización y de trabajo remoto que nos permite ya estar un poco entrenados para cuestiones de esta índole. Claramente afecta y estamos alerta pero sobre todo para cuidar el equilibrio de nuestra gente y su relacionamiento con el entorno y trabajar sobre lo que son las medidas preventivas. Además, corremos con la ventaja de que no es un riesgo para el producto, entonces hacemos un chequeo en la misma empresa para detectar si hay contagio o no y así tomar medidas.

En cuanto al negocio, no es tan nuevo para nosotros porque ya lo sufrimos con China y Europa. Pero agudiza un poco más todo, porque al parar muchos restaurantes u hoteles, nuestros clientes no pueden asumir los compromisos económicos porque no tienen suficiente liquidez. Además, en estas situaciones abruptas, el cliente siempre tiene 30 o 40 días de carne viajando. O sea, hay carne que se cargó hace un mes que recién ahora se está recibiendo. Eso sí impacta directamente en el flujo de comercio, en los pagos… lo mismo que pasó con China.

En cuanto a las medidas que se tomarán, no se ha hablado de seguro de paro. Simplemente, se intentarán maximizar las medidas de prevención porque primero está la gente. Intentaremos que el daño en el mercado sea el menor posible, tanto para la empresa como para el obrero; es como cruzar un bañado: nos vamos a mojar pero esperamos no quedar enterrados".

Álvaro Moré – Presidente de Young & Rubicam Group

"Nuestra compañía se preparó para esto, sobre todo en tecnología haciendo pruebas de trabajo remoto. Con esto ahorramos bastante tiempo porque hay procesos que ya estaban aceitados y se implementaron de primera, sin ningún tipo de inconvenientes. Ahora estamos  con un protocolo de trabajo remoto: levantarse a la misma hora, darse una ducha y vestirse un poco más cómodo pero como para ir a trabajar. Una cosa bien importante es vernos las caras a través de las videoconferencias, porque muchos viven solos y no tienen contacto directo con nadie.

En mi caso he tenido un exceso en la cantidad de horas trabajadas. Estos días han sido los que más he trabajado en los últimos años de mi vida, porque tengo una serie de decisiones que tomar y hay que estar más cerca de los clientes y de mis compañeros.

Veremos cómo estamos como sociedad, qué tan solidarios somos y quién es quién. Esto nos está poniendo a prueba

En cuanto a la industria, las noticias vienen impactando cada vez más. En ese sentido, nuestra compañía tiene como prioridad cuidar a las personas. Pero también hay que cuidar la continuidad del negocio, porque es una manera de cuidar a las personas. Va segundo pero es muy importante, porque las cuentas hay que pagarlas y la luz te la cortan.

Esto va a pasar y ¿cómo va a ser todo? Yo no creo que todo vuelva a su lugar original, pero lo digo desde un punto de vista optimista. Hay cosas que van a cambiar, por ejemplo, el teletrabajo se va a implementar cada vez más porque estamos aprendiendo mucho. Y también, después de que pase todo, veremos cómo estamos como sociedad, qué tan solidarios somos y quién es quién. Esto nos está poniendo a prueba". 

Laura Macció – Directora de Aranvanlabs

"La primera medida que se tomó en la empresa fue crear un comité de crisis para analizar el riesgo de contagio del personal y definir medidas. También analizar la situación del negocio y así plantear estrategias. Dentro de lo primero brindamos kits de protección a todos los colaboradores. A su vez, designamos a las personas que realizan el trabajo compatible para que puedan llevar adelante el modelo de labor remota. Redactamos protocolos específicos de recepción de insumos, pedidos y repartos. Modificamos el horario de los empleados, para reducir la cantidad de gente por metro cuadrado y distribuimos información sobre el correcto manejo de guantes y tapabocas.

Por otro lado, creemos que la situación es propicia y brindamos asesoramiento a las empresas para reducir los riesgos de contagios: desde redacción de protocolos, asesoramiento para la desinfección y capacitación de operarios.

En cuanto a las consecuencias futuras, habrá muchas, pero quiero remarcar una en particular: el Estado debe tomar consciencia de la importancia que tiene la ciencia y las empresas biotecnológicas en un país que depende de la importación de insumos como kits de diagnósticos.

Actualmente, con otras start ups del sector, estamos trabajando en la posibilidad de producir hisopos de muestreo para el posterior diagnóstico del Covid-19. Como es sabido, estos insumos están siendo demandados a nivel mundial y Uruguay debe apostar, de una vez por todas, a tener una fuerte plataforma BIO funcionando en a nivel local. Esto generará más conocimiento, empleo de calidad y valor agregado y no solo transformará nuestra matriz productiva, sino que nos independizará en situaciones como esta".

Leticia Mato – Fundadora y CEO de CirComedia

"Cuando se decretó la suspensión de clases, no se contempló directamente nuestra actividad pero sí nos afecta. Obviamente, decidimos cerrar para colaborar con las autoridades nacionales y la sociedad en general.

Para paliar la situación se pasó a la modalidad virtual, para no dejar a los alumnos sin entrenar o ir a clases. En nuestro caso es  más complicado porque hay trapesistas, cuerdistas, gente que hace aro; se necesita sí o sí el elemento aéreo colgado. Entonces, armamos grupos virtuales en el horario que funciona la compañía y creamos todos los contenidos virtuales para que los alumnos trabajen; esto incluye desde lo que es el entrenamiento hasta ejercicios para los que sí tienen aéreos en sus casas.

De todas formas, tenemos un respaldo importante de contenidos teóricos que hasta ahora estaba limitado para los profesores pero decidimos abrirlo a los alumnos. Son más de 200 personas que hay que mantener estudiando y trabajando, y esa fue la manera para poder seguir adelante".

María Laura Volpi – Gerenta de Consultoría en Capital Humano de KPMG

"Las empresas tienen mucho miedo, sobre todo en el sector industrial que no tiene la opción de teletrabajar. En este sentido, no hay ningún plan b, si llega el momento en que tengan que cerrar las puertas es muy difícil poder encontrar una alternativa. Además, la mayoría están evaluando qué hacer, porque la situación es muy dinámica y cambia cada día.

Lo que sí es importante a tener en cuenta son los aspectos transversales, es decir, sobre todo el económico porque la espalda que cada compañía tenga es un factor fundamental. A partir de esto, las empresas tienen que decidir cuáles son los pasos a seguir e idear un posible futuro a corto plazo, para manejar las acciones a tomar. Quizá en un principio lo prioritario fue evaluar los aspectos tecnológicos y de estructura, hoy en día ya pasa más por un tema financiero.

Pero sí es muy difícil hablar de consejos o guías a nivel generar, porque la situación de cada empresa es única y no siempre pueden hacer todas lo mismo. Por eso, los líderes de las firmas siguen debatiendo, viendo qué hacer y cómo seguir. No son decisiones que se tomen de un día para el otro, tanto a nivel de recursos humanos como en general".

Milton Rodríguez – CEO de Mi Cheque

"Cuando todo empezó, comenzamos a ver cómo podíamos hacer para adaptarnos mejor. Hay personas que nunca trabajaron remoto, entonces tuvimos algunos inconvenientes en ese sentido. Pero decidimos aprovechar la oportunidad para probar cosas, por ejemplo, hace un tiempo que estamos tratando de sacar la gente del mostrador. Digamos que hacia la interna, el desafío estuvo en explicarle a los empleados cómo trabajar desde su casa de manera eficiente.

También implementamos la cadetería y los depósitos bancarios sin costos, para que la gente no venga al local. Gracias a eso, es que la empresa está funcionando. Digamos que es por la ausencia presencial de gente y el trabajo que están haciendo todos los colaboradores desde sus casas.

En nuestro caso, nos venimos adaptando bien, pero hay rubro y emprendimientos que demandan la presencia fija. En ese sentido, creo que es un gran desafío para los emprendedores porque esta situación es muy complicada y, generalmente, el factor económico no es algo que abunde. Pero creo que el mundo emprendedor siempre le encontró la vuelta a las dificultades y no creo que esta sea excepción, pero sin dudas es como tirarse al agua sin saber nadar porque no sabemos con exactitud qué va a pasar.

Igualmente, esto tiene que generar oportunidades para el futuro. Por ejemplo, para el interior del país. De la mano del trabajo remoto, se pueden dar muchas fuentes laborales en otros lugares que no sean Montevideo. Entonces, todo esto para las empresas y los emprendientos es fundamental, porque pueden encontrar muchas oportunidades. Pero creo que es vital pensar por fuera de la caja. Muchos emprendedores toman la postura de “esto me mata” y se queda allí, pero hay que entender que todas las crisis tienen muchas oportunidades y encontrarlas depende cada uno".

Todo esto para las empresas y los emprendientos es fundamental, porque pueden encontrar muchas oportunidades