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Si de inversiones seguras y rentables hablamos, los bienes raíces logran un excelente equilibrio entre estas dos premisas. La inversión en propiedades ha sido, a lo largo del tiempo, una de las formas más utilizadas y probadas para generar riqueza.
Esta forma de inversión ha demostrado ser resistente frente a las fluctuaciones del mercado con múltiples ventajas a corto y largo plazo, representando una gran oportunidad para aquellos que desean diversificar sus ingresos.
Invertir en bienes raíces en Uruguay no solo es una estrategia para proteger el capital, sino también una forma de construir riqueza a largo plazo. Con la capacidad de generar ingresos pasivos, apreciación del valor, y diversificación del portafolio, los bienes raíces ofrecen una combinación única de seguridad y rentabilidad.
Con el paso del tiempo las propiedades tienden a revalorizarse, más aún si se compran en sectores claves, en puja, cuyo desarrollo y dinamismo se hacen notorios.
Desde el año 2011, en nuestro país, la Ley de Vivienda Promovida N° 18.795 ha sido fundamental en el desarrollo inmobiliario de la última década.
El objetivo inicial de la ley fue facilitar el acceso a la vivienda para buena parte de la población, exonerando impuestos y gastos que elevaban los precios de las propiedades.
Debido a los beneficios fiscales que comenzó a ofrecer esta ley tanto a desarrolladores como a compradores, se impulsó la creación y comercialización de miles de nuevos proyectos, con especial énfasis en los departamentos de Montevideo, Canelones y Maldonado.
Según un informe de la Agencia Nacional de Vivienda, desde la creación del régimen de Vivienda Promovida, Montevideo lleva 16.090 unidades comercializadas lo que equivale al 82% del total. Canelones se encuentra en segundo lugar con 1.495 unidades vendidas y le sigue Maldonado con 1.124 unidades.
Como toda decisión importante, la inversión debe ser pensada, planificada y llevada a cabo con responsabilidad. No se necesita ser experto o especialista para poder realizar una inversión en bienes raíces, pero sí será necesario aprender e informarse sobre ciertos aspectos claves.
Educación: el primer paso es asesorarte sobre el mercado inmobiliario. Esto incluye comprender las tendencias del mercado, conocer los diferentes tipos de propiedades (residenciales, comerciales, terrenos) y cómo se valoran. Los expertos inmobiliarios o asesores financieros suelen ser buenos aliados para tomar decisiones informadas.
Definir un presupuesto: determiná cuánto estás dispuesto a invertir. Esto incluye no solo el costo de adquisición de la propiedad, sino también los costos asociados como conexiones, tributos, honorarios, seguros, entre otros.
Elegir la propiedad correcta: considerá factores como la ubicación, infraestructura, acceso a servicios, y la zona en general. Las propiedades en zonas emergentes pueden ofrecer mayores retornos a largo plazo. El factor de la ubicación es uno de los más importantes a tener en cuenta. El valor de una propiedad puede variar considerablemente, tanto si es para alquilar o para revender.
Realizar una due diligence: antes de realizar una compra, asegurate de realizar una investigación exhaustiva de la propiedad. Esto incluye verificar el estado legal, inspeccionar el estado edilicio, y revisar la documentación necesaria para evitar sorpresas desagradables. Tener en cuenta que puede suponer un gasto extra si la vivienda tiene que ser refaccionada Para un mejor resultado, podés pedir ayuda a un profesional.
El mercado uruguayo es sólido en diversos aspectos. Desde el punto de vista jurídico, económico y social, brinda garantías que hacen posible una proyección a largo plazo por su historial de equilibrio. Esto último es algo que atrae a los inversores extranjeros, que ven a nuestro país como una plaza fiable para invertir.
Además, ofrece beneficios tributarios muy interesantes (como el caso de los proyectos de vivienda promovida), alta demanda habitacional principalmente en la capital (ideal para propiedades alquiladas), y una constante revalorización que ayuda a mantener valores por encima de la inflación.
La inversión en bienes raíces es una estrategia sólida para quienes buscan un equilibrio entre seguridad y rentabilidad. Ya sea para diversificar ingresos, generar rentabilidad pasiva o proteger el capital a largo plazo.
Apostar por el sector inmobiliario en un entorno estable como el uruguayo sigue siendo una opción inteligente y confiable para construir un futuro financiero sólido.
