Los cuestionamientos de los productores de leche a las recientes medidas sindicales -motivadas por el anuncio del cierre de la planta de Conaprole en Rivera- tienen como explicación que alterar el ordeñe regular de las vacas genera de inmediato perjuicios y no solo productivos, también sanitarios y para los trabajadores de los tambos.
El martes pasado, en la conferencia de prensa que en la sede de la Asociación Nacional de Productores de Leche (ANPL) brindaron representantes de 11 gremiales de productores de leche -para expresar su posición sobre el conflicto en el que están enfrentados la empresa y la Asociación de Obreros y Empleados de Conaprole (AOEC)-, se destacó que no ordeñar a tiempo compromete la salud y el bienestar de las vacas, reduce la cantidad y calidad de leche, genera pérdidas económicas significativas e impacta negativamente en el trabajo de las personas del tambo.
¿Cómo sigue?
El sindicato, al cierre de la semana, informó que las medidas gremiales dispuestas en adelante quedaban "en suspenso", considerando que para este lunes 21 a la hora 17 se citó a una reunión tripartita para considerar el conflicto, en la que participarán el sindicato, directivos de Conaprole y representantes del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS).
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Alterar el ritmo del ordeñe perjudica a las vacas y complica al personal del tambo.
Juan Samuelle
Perjuicios en los tambos por atrasos al ordeñar
En la mencionada conferencia, con base en un aporte del Dr. Ramos Rama, se informó que entre los factores de impacto negativo en la salud y bienestar asociados al corte de los ciclos regulares del ordeñe destaca la congestión mamaria por acumulación de leche y presión sobre los tejidos, lo cual genera inflamación de la ubre y dolor.
Además, aumenta el riesgo de infecciones intramamarias, lo cual lleva a un impacto significativo en pérdidas de producción, aumento del uso de antibióticos, descarte de leche y gastos veterinarios.
La pérdida de calidad de leche por aumentos de células somáticas por mastitis es otra consecuencia.
También se señalo la instauración de estrés y dolor con pérdida del bienestar de los animales.
Si no se ordeña con regularidad, se explicó, la vaca reduce naturalmente la producción por la presión generada sobre células secretoras de leche y la secreción de hormonas que dan la señal de interrumpir la producción de leche.
Una interrupción en el ritmo regular de ordeñe puede, también, acortar la duración del pico de producción de las vacas.
Se genera además con esa alteración una mayor carga de trabajo para las personas, dado que cada caso de mastitis requiere atención adicional con tratamientos, monitoreo y ordeñe por separado, incrementándose el estrés y la fatiga del personal del tambo.
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Sistemas productivos de leche: dos ordeñes diarios que deben realizarse sin alteraciones para evitar perjuicios y que haya una productividad y bienestar animal adecuados.
Juan Samuelle
