La Autoridad Garante de la Competencia y el Mercado de Italia (AGCM) impuso una multa de 255,7 millones de euros a Ryanair y a su sociedad matriz por abuso de posición dominante, al considerar que la aerolínea obstaculizó de forma sistemática la actividad de las agencias de viajes en la venta de billetes.
Según el regulador, las prácticas se habrían extendido al menos entre abril de 2023 y abril de 2025, período en el que Ryanair fue líder del mercado italiano, con una cuota estimada de entre el 38% y el 40% de los pasajeros transportados. Esa posición, señala la AGCM, la convertía en un actor clave para el negocio de las agencias.
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Agencia de viajes italiana
La investigación concluyó que la compañía desplegó una estrategia “compleja y progresiva” para bloquear o dificultar, desde el punto de vista técnico y económico, la compra de vuelos a través de agencias físicas y online. Entre las medidas detectadas figura la introducción de procedimientos de verificación mediante reconocimiento facial aplicados únicamente a clientes que habían adquirido billetes a través de intermediarios, así como bloqueos totales o intermitentes de reservas realizadas por agencias en la web de la aerolínea.
A comienzos de 2024, Ryanair también exigió a las agencias online la firma de acuerdos específicos para poder vender sus vuelos, una condición que luego se extendió a las agencias físicas. Estos contratos, según el regulador, incluían limitaciones para ofrecer billetes de Ryanair combinados con otros servicios, lo que habría reducido la competencia y la calidad de la oferta para los consumidores.
Para la AGCM, estas prácticas perjudicaron directamente a las agencias de viajes, al limitar su capacidad para adquirir y comercializar vuelos de la compañía y para integrarlos en paquetes turísticos u otros servicios.
Ryanair anuncia recurso
Tras conocerse la sanción, Ryanair informó que recurrirá la decisión ante los tribunales. La aerolínea calificó la multa de “extraña y errónea” y sostuvo que fue “impuesta injustamente”, al entender que contradice una sentencia del Tribunal de Milán de enero de 2024, que avaló su modelo de distribución directa y consideró que beneficia a los consumidores al permitir tarifas más competitivas.
La compañía defendió su política de fomentar la venta directa a través de su web y afirmó que la resolución responde a la presión de una agencia de viajes online y de un grupo reducido de agencias tradicionales en Italia. Además, negó ostentar una posición dominante en el mercado, al asegurar que su cuota real ronda el 30% y que los cálculos del regulador no incluyen vuelos de larga distancia ni rutas en las que no opera.