4 de mayo 2025 - 10:06hs

Dick Morris es un mito viviente. Tiene 76 años y es considerado uno de los consultores políticos más importantes (y provocadores) de los Estados Unidos. Fue el estratega clave en la reelección de Bill Clinton en 1996. En tiempos de auge republicano, le aconsejó a Clinton adoptar políticas más moderadas y se convirtió en la persona más influyente sobre el presidente demócrata.

Fue columnista de New York Post, de The Hill y Fox News. Trabajó en las campañas de Donald Trump, a quien conoció mucho antes de convertirse en su asesor político. El papá del mítico consultor estadounidense era abogado de la familia Trump. Así, Morris lo trató de cerca cuando todavía nadie sospechaba que saltaría del real estate de Manhattan a la Casa Blanca.

Morris también prestó servicios en América Latina, donde es socio del analista Luis Rosales. En México asesoró a Vicente Fox; en Uruguay a Jorge Batlle; y en Argentina a Fernando de la Rúa, a Mauricio Macri y a José Luis Espert. Todavía fuente de consulta del mundo MAGA, acaba de lanzar una academia digital de ciencias políticas, marketing político y estrategia electoral. En la Dick Morris Academy, él mismo dictará algunos cursos.

Más noticias

En diálogo exclusivo con El Observador USA, Morris defiende la gestión de Trump y relativiza las encuestas que lo dan en baja tras 100 días en la Casa Blanca. Reivindica al presidente argentino Javier Milei y afirma que Trump gobierna en favor de los trabajadores de cuello azul antes que para Wall Street o Silicon Valley.

¿Cuál es el objetivo real de la guerra de aranceles que inició Trump?

Trump comenzó con el deseo de terminar con la discriminación contra los productos estadounidenses en el mercado global. Inició un esfuerzo para que los países abrieran sus mercados a los productos americanos, ya que estos se encuentran muy limitados en muchos casos. Por ejemplo, en los automóviles nuevos, Estados Unidos impone una tarifa del 2% sobre los coches europeos, mientras que Europa aplica un 10% sobre los coches de Estados Unidos. Y este tipo de ejemplos se repite en diferentes sectores. Su objetivo original fue eliminar la discriminación contra los productos americanos.

Trump - anuncio de aranceles - AFP.jpg

¿El objetivo de revertir el déficit comercial después se amplió?

Sí, posteriormente se convirtió en un deseo más amplio de aumentar la inversión en Estados Unidos. Trump quiere una economía robusta, pero sin causar inflación. Incrementar la demanda interna a través de imprimir más dinero y ofrecer beneficios aumenta la inflación. Por lo tanto, buscó una forma de aumentar la inversión sin disparar la suba de precios.

¿Y cree que lo está logrando?

Sí, consiguió que tanto las empresas extranjeras como las nacionales inviertan más en Estados Unidos. Desde que asumió la presidencia, Trump afirma que ha atraído 8 billones de dólares en inversiones de empresas farmacéuticas y otras. Este tipo de inversión no genera inflación, ya que no está vinculada directamente con la demanda de los consumidores, sino con la inversión empresarial. Eso marca un cambio importante, ya que obliga a las empresas extranjeras a mover su producción a Estados Unidos para vender en ese mercado. Es un gran logro y un cambio.

Trump también está pensando en reemplazar el IRS, la agencia encargada de recaudar impuestos, por un ERS, un servicio de recaudación de beneficios externos, utilizando dinero extranjero para financiar a Estados Unidos. Trump también está pensando en reemplazar el IRS, la agencia encargada de recaudar impuestos, por un ERS, un servicio de recaudación de beneficios externos, utilizando dinero extranjero para financiar a Estados Unidos.

¿Una mayor recaudación del Estado es otro de los objetivos de la guerra comercial?

La idea original evolucionó aún más cuando Trump empezó a interesarse por los ingresos provenientes de los aranceles. Cuando se fundó Estados Unidos, no existía un impuesto sobre la renta, ya que la principal fuente de ingresos eran las tarifas de comercio. Esto se perdió con el tiempo, pero el año pasado Estados Unidos obtuvo 80 billones de dólares en ingresos por tarifas extranjeras. Trump propuso un arancel del 10% a todos los productos importados, lo que podría generar hasta 400.000 millones, además de tarifas extra a países como China, México, Canadá y Europa, que podrían sumar hasta un billón de dólares. Este flujo de ingresos permitiría a Trump proponer grandes recortes en el impuesto sobre la renta, posiblemente un 33%, financiados por los ingresos derivados de las tarifas. Trump también está pensando en reemplazar el IRS, la agencia encargada de recaudar impuestos, por un ERS, un servicio de recaudación de beneficios externos, utilizando dinero extranjero para financiar a Estados Unidos. Esta es una manera de revertir el enfoque de 80 años de Estados Unidos ayudando a otros países y cambiarlo hacia un modelo donde se beneficien más los intereses internos.

¿Y la sociedad le tendrá paciencia a Trump? Las encuestas muestran una fuerte caída en el apoyo.

Creo que las encuestas no son un reflejo preciso. La base que realmente apoya a Trump sigue siendo leal. Los sectores que se benefician de los aranceles más bajos, como aquellos que tienen relaciones comerciales con China, intentan alimentar la narrativa de que las tarifas son impopulares, pero eso no es cierto. Los estadounidenses, en general, serán pacientes y los resultados positivos de las políticas de Trump se reflejarán en las estadísticas en los próximos meses.

¿Qué consecuencias tendrá la reconfiguración del orden mundial que ensaya Trump, generando una rivalidad con Europa?

Trump ve a América como el centro de su universo. Quiere reconfigurar las políticas globales con Estados Unidos en el centro. Él cree que Europa ha estado estancada: no ha crecido, no ha aumentado su población ni su producción. Europa es vista como una región que vive de vacaciones largas y semanas laborales cortas. Trump siente que otros países deberían seguir el ejemplo de Estados Unidos y no quiere esperar que Europa se ponga a la altura. Su propuesta a las empresas es: múdense aquí, disfruten de bajas tarifas impositivas y no enfrenten obstáculos migratorios. Su enfoque es atraer a las empresas y a las personas hacia Estados Unidos, que pasen de ser extranjeras a domésticas.

La guerra en Ucrania continúa y China se muestra dispuesta a redoblar la carrera de aranceles contra EEUU. ¿Trump subestimó a Vladimir Putin y a Xi Jinping?

No creo que Trump haya subestimado a Putin ni a Xi Jinping. En cuanto a Rusia, está trabajando en resolver la guerra con Ucrania y creo que lo logrará en los próximos meses, incluso mediante el uso de tarifas comerciales contra Rusia. En lo que respecta a China, Estados Unidos compra aproximadamente 500.000 millones de dólares en productos de China al año, mientras que China compra solo 170.000 millones de Estados Unidos. Las tarifas aplicadas por ambos países son una ventaja para Estados Unidos. Los consumidores estadounidenses consumen dos tercios de lo que producen, mientras que en China, solo un tercio de lo que producen se consume internamente, por lo que dependen de otros países para vender el resto. Esta diferencia hace que Estados Unidos tenga una ventaja a largo plazo en una guerra comercial.

Sobre la dura política migratoria de Trump, ¿qué balance hace de las detenciones de ICE y las deportaciones a El Salvador?

Las políticas de inmigración y las deportaciones de ICE son muy populares en Estados Unidos. Hasta ahora, las decisiones judiciales han sido de tribunales de menor rango, pero cuando lleguen a instancias más altas, como la Corte Suprema, creo que Trump prevalecerá. Ya ha deportado a 100.000 personas y arrestado a 125.000. El ritmo de las deportaciones es sorprendentemente intenso y creo que, a pesar de las críticas, Trump sigue manteniendo un fuerte apoyo en estas áreas.

Deportados venezolanos llegan a El Salavador - Reuters.webp
Deportados venezolanos a El Salvador

Deportados venezolanos a El Salvador

¿Dónde está la principal oposición a Trump: en alguno jueces, en la izquierda del Partido Demócrata con Ocasio Cortez y Bernie Sanders, en los medios de comunicación o en las universidades de elite?

De todos esos lados que enumeraste. La oposición a Trump proviene de varios frentes, incluyendo el Partido Demócrata, los jueces, los medios y las universidades de élite. Pero Trump tiene una base sólida que apoya sus políticas, y los tribunales terminarán cediendo. Incluso ganará en la Corte Suprema de Justicia.

¿Cómo explica la pelea con Harvard y otras universidades?

En Harvard y las otras universidades, este es un proceso muy largo, donde Trump está determinado a detener la conversión de instituciones educativas en instituciones políticas de propaganda. Creo que está determinado a hacer que ese punto de vista se sienta. Creo que también va a retirar las exenciones de impuestos que tienen, que generarán un gran ingreso para los Estados Unidos y forzarán a las universidades a dejar afuera a sus formas izquierdas extremas.

¿Harvard está infiltrada por el marxismo?

Ha sido un proceso largo, ha tomado mucho tiempo para el comunismo y el marxismo infiltrar a las universidades, pero lo han hecho. Y ahora demora mucho tiempo tiempo para sacarlos de ahí. Trump ahora está trabajando para revertir la influencia marxista en las instituciones educativas.

Universidad de Harvard - AFP.jpg
Universidad de Harvard

Universidad de Harvard

La reciente salida de Mike Waltz como asesor de seguridad nacional marcó el primer gran cambio en el gabinete de Trump. También existen tensiones entre figuras como Elon Musk y Peter Navarro. ¿Qué análisis hace de las peleas interna en el trumpismo 2.0?

Este año ha habido menos tensiones internas en comparación con el primer mandato de Trump, que básicamente fue caótico. Muchas de las peleas que se reportan son exageraciones o directamente son producto de la imaginación de los medios. Por ejemplo, cuando Waltz fue despedido como asesor de seguridad nacional, no fue porque Trump no lo quisiera, sino porque se le ofreció el puesto de embajador ante la ONU. Las pequeñas peleas están muy sobre-expuestas.

Aunque en el corto plazo Musk está más centrado en Tesla, en el largo plazo su relación con Trump sigue siendo muy importante. Aunque en el corto plazo Musk está más centrado en Tesla, en el largo plazo su relación con Trump sigue siendo muy importante.

¿Qué va a pasar con Elon Musk, quien empezó con mucha centralidad en el DOGE, perdió poder y parece estar por irse?

Musk ha sido muy influyente en la agenda de Trump, especialmente con los recortes que propuso y que fueron incluidos en el presupuesto de Trump. Así que sus ajustes serán permanentes. El presupuesto es una especie de ratificación y aprobación de los cortes de Musk. Musk y Trump se unen muy bien. Aunque en el corto plazo Musk está más centrado en Tesla, en el largo plazo su relación con Trump sigue siendo muy importante.

¿Musk seguirá siendo un aliado importante de Trump aún afuera del gobierno?

No debemos olvidar que Musk, además de ser el hombre más rico del mundo, es un defensor clave de las políticas de Trump, especialmente a través de su control de Twitter. Musk gobierna Twitter y tiene un poder tremendo para apoyar la agenda de Trump. En este momento tiene que dar más atención a su propia compañía, a Tesla, que creo que es un problema de corto plazo.

Elon Musk con Trump - 22-3- AFP.jpg

¿En favor de quién gobierna Trump: de los trabajadores de cuello que han perdido dinero y estatus en las últimas décadas; de Wall Street; de Silicon Valley?

Sin duda para los trabajadores blue collar, los que hacen tareas manuales, fabriles, de construcción. Trump los descubrió como un grupo que ha sido históricamente ignorado: los trabajadores de cuello azul que no han ido a la universidad y que no viven en Nueva York o California. Hay negros, hay latinos, hay mujeres, hay jóvenes. Representan el 36% de la población estadounidense y, en su mayoría, han sido olvidados. Trump trabaja para darles voz y poder, promoviendo políticas como la reubicación de empresas extranjeras a Estados Unidos. Este enfoque va a generar un tremendo crecimiento económico en áreas que antes estaban desatendidas. En ese enorme sector de América al que mucha gente ignora, al que sólo cuando vuela de Nueva York a California mira por la ventana de avión, pero sólo ve nubes y montañas.

¿Cree que esos trabajadores manuales serán los ganadores del segundo ciclo de Trump?

Sí, creo que con Trump ganará en este sector. Su enfoque de imponer aranceles, de enojar al mundo y hacer que las empresas se muden a Estados Unidos es para ayudar a los trabajadores de cuello azul, no a Wall Street ni a Silicon Valley.

¿El tercer mandato presidencial de Trump es una idea posible o es sólo un juego?

No, no hay posibilidad, pero es un juego y es divertido. Porque creo que Trump tendría una una gran posibilidad de ganar nuevamente. Pero no hay chances.

¿Ve a JD Vance o a Marco Rubio como un posible sucesor de Trump?

Creo que JD Vance tiene potencial, pero es demasiado pronto para decirlo. Si mantiene una buena relación con Trump, es muy posible que sea él el candidato a la sucesión.

Milei en EEUU - AFP.jpg
Javier Milei en una visita reciente a EEUU

Javier Milei en una visita reciente a EEUU

Usted trabajó y conoce bien a la Argentina. ¿Qué balance hace del año y medio de Javier Milei como presidente?

Milei ha hecho un gran trabajo con la economía. Ha logrado mantener la inflación baja y ha hecho importantes recortes sin causar un gran desastre social. Merece mucho crédito por lograr cambios revolucionarios sin una revolución. Estoy bien informado sobre su trabajo a través de mi amigo Luis Rosales.

¿Por qué cree que a Trump le importa la suerte de Milei?

Creo que Trump ve mucho de sí mismo en Milei. Le gusta la idea de un economista que no sigue el pensamiento convencional. Trump ha sido un gran apoyado de Milei y, aunque inicialmente su apoyo era más simbólico, ahora Trump siente que puede hacer más para ayudar más a la Argentina en el futuro.

¿Más ayuda como la línea de crédito para Argentina que sugirió el secretario del Tesoro, Scott Bessent?

Sí, como eso. Además creo que el Fondo Monetario Internacional no le hubiera dado a la Argentina 20.000 millones de dólares sin la debida gestión de Trump.

Temas:

aranceles Wall Street Silicon Valley Donald Trump Dick Morris EEUU estadounidense Argentina Javier Milei china

Seguí leyendo

Más noticias

Te puede interesar

Más noticias de Uruguay

Más noticias de Argentina

Más noticias de España