Entre las interrogantes que ha dejado la indagatoria penal sobre Conexión Ganadera aparece la empresa Gladenur, cuyo gerente es el empresario tunesino, Mohamed Montazel Bendeche, conocido como “El Turco”.
Mientras que la viuda de Gustavo Basso, Daniela Cabral dijo al declarar el pasado 3 de junio que no tenía conocimiento de que fuera tomador de ganado de Conexión Ganadera, tanto el gerente operativo, Rodolfo Flores, como el encargado de trazabilidad de la empresa, Diego Quiroga, ratificaron que esa empresa era tomadora de ganado en el último tiempo porque así se los había comunicado Basso.
Cabral fue consultada acerca del cobro de cheques de la firma Gladenur S.A que tienen fecha del 12 de diciembre de 2024 y del 27 y 30 de enero de 2025, y la defensa de la viuda de Basso presentó a la Fiscalía un escrito en el que detalla qué hizo la esposa del productor rural con más de US$ 4 millones que depositaron desde cuentas de Gladenur, perteneciente a Montazel Bendeche.
En el documento, al que tuvo acceso El Observador, se asegura que Cabral depositó desde la cuenta del escritorio de Basso US$ 1.031.300 a Conexión Ganadera bajo la referencia “asistencia a CG”.
En el mismo escrito, se adjuntó un “esquema explicando el negocio de compra/venta de ganado entre escritorio y productores rurales, Gustavo Basso y Gladenur”. Allí se asegura que las compras y consignaciones las hacía tanto la empresa de Basso, otros escritorios rurales y productores particulares.
Luego se pasaba a la etapa de cuarentenas de animales “explotados por Gladenur previo a exportar y cargar en los barcos”, es decir, los lotes quedaban en campos pertenecientes a la empresa del tunesino.
En el mismo esquema se mencionan a los consignatarios que ejercían entre la empresa de Basso y la del empresario tunesino. A modo de ejemplo, aparece Jorge Cunietti o la propia Cabral.
“Contra entrega de cheques diferidos (pagos de Gladenur) se realizaba la venta de los animales” y se realizaba el cambio a nombre de dicha empresa, que luego los utilizaba para exportar. “De esa manera culminaba el ciclo de compra/venta de animales con destino a exportación en pie”, agrega el texto.
En el escrito se adjuntaron comprobantes de cheques por US$ 4.233.641 con respecto a la compra de ganado por parte de Gladenur. Este monto fue abonado en cuatro veces entre diciembre y enero pasados.
La relación de Basso con Montazel Bendeche era de varios años, además de que el fallecido empresario era de los pocos en el rubro que hacía negocio con el turco. Del escrito, surge que muchas veces el fundador de Conexión Ganadera era quien asumía el pago del ganado y luego Montazel Bendeche le pagaba.
“Gustavo Basso y en algunos casos directamente su escritorio rural asumió obligaciones de pago al adquirir el ganado referido las que, en su mayoría, fueron canceladas una vez que Gladenur entregó los cheques”, se indica en el documento.
Finalmente, el escrito detalla qué movimiento hizo Cabral con los más de US$ 4 millones que pagó Montazel Bendeche luego de que muriera Basso.
Alrededor de US$ 836.237 ingresaron a una cuenta del banco HSBC; US$ 1.112.393 al banco Scotiabank; US$ 396.464 “fueron destinados a pagar obligaciones pendientes a Santiago Javier Andrade Esteves; US$ 1.000.000 fueron al fideicomiso que tenía Basso en Scotiabank y finalmente US$ 888.511 corresponden a cheques que “no fue posible cobrar”.
Sobre esto último, el empresario tunesino declaró en Fiscalía que tenía la disposición a saldar la deuda, pero su abogado le recomendó no hacerlo porque “el problema" de la empresa "es grave”.
La versión de los mandos medios de Conexión Ganadera
Por su parte, el gerente operativo Flores dio su versión sobre las deudas de Gladenur y la forma en la que se computaban los pagos. Confirmó que el vínculo de Basso con El Turco venía desde hacía años porque Montazel Bendeche "exportaba (a Oriente) terneros que Basso acopioba" pero “con el tiempo se volvió tomador" de ganado de Conexión Ganadera.
"Yo nunca vi un contrato de él, pero sabía que tenía ganado propiedad de inversores por las liquidaciones mensuales de los bonos ganaderos”, ya que cada contrato generaba un asiento que era un crédito a favor de cada cliente.
Asimismo, Flores se refirió a que los atrasos en los pagos por parte de Gladenur "eran notorios" al punto que Basso en febrero de 2024 lo comentó con sus empleados y dijo "que le faltaba circulante en ese momento". "Normalmente lo que hacía era entregarle cheques pero llegaba la fecha le pedía que no se los depositara o incluso tuvo muchos cheques devueltos", sostuvo.
El gerente operativo explicó que si bien a los tomadores se les pagaba con transferencia bancaria "una vez que se vendiera el ganado", en el caso de Gladenur "no, porque él debía más de lo que generaba".
En ese caso, admitió, se pagaba con fondos de Conexión Ganadera deudas que tenían con el escritorio Basso. Cuando "había un tomador que vendía en el escritorio porque le convenía más o lo que fuera y en Conexión estaba debiendo y vendía por el escritorio, ese saldo no se le pagaba, se volcaba a su saldo deudor en la otra empresa", afirmó.
Quiroga, encargado de la trazabilidad del ganado, ratificó que El Turco era tomador de ganado desde hace un año y medio o dos años. “Gustavo nos dio las instrucciones para hacer productos de bonos ganaderos” en los que “Gladenur iba a pasar a ser tomador de animales y cantidad de monto y cantidad de animales”.
El empleado confirmó que “los animales que entraban en el sistema ya estaban en Gladenur”.
Luego de que el fiscal le mostró los 30 contrataos en los que Gladenur aparece como tomador de ganado de Conexión Ganadera y le dijo que le sorprendía que una gran cantidad de esos contratos eran de mayo de 2023 y eran de bonos ganaderos, Quiroga admitió que la firma que le exhibían no era la de El Turco.
El inversor que contactó a El Turco
La falsificación de la firma de Montazel Bendeche se descubrió luego de que un inversor de Conexión Ganadera que es cirujano-oftalmólogo y habia atendido a El Turco decidió contactarlo directamente al conocer que en su ganado estaba en Gladenur. "Yo lo llamé con el afán de saber dónde estaban mis bichos, ir a buscarlos y llevármelos", declaró en fiscalía el profesional.
"Me dijo que él nunca fue tomador de Conexión Ganadera. Me dijo que él tenía cuarentena nada más para los bichos, entiendo que es un lugar donde descansan los bichos antes de subirlos al barco, y nada más, y que le pasara una copia del contrato. Se lo pasé, y me llamó al rato diciéndome que esa no era la firma de él, que se lo habían falsificado".
Al declarar en fiscalía El Turco admitió que a veces Basso le mandaba la factura a nombre de Conexión Ganadera pero aseguró que jamás le propuso ser tomador de Conexión Ganadera. Admitió también que Cabral le pidió que emitiera cheques a nombre de Basso luego de que ya estaba muerto y dijo que no sabía por qué.