La decisión supuso mantener en la mayor jerarquía al oficial más antiguo en actividad y que ya venía desempeñándose como “encargado de despacho” de la comandancia desde el pase a retiro del almirante Jorge Wilson al finalizar la administración de Luis Lacalle Pou.
Fuentes de Defensa señalaron a El Observador que el presidente y la ministra ponderaron el desempeño de Elizondo estos meses de interinato y que se decantaron por una solución que –entienden– será la que genere menos dolores de cabeza.
En el gobierno reconocen que pueden ocurrir pases a retiro voluntarios de contralmirantes como consecuencia de la decisión. Informalmente, Diego Vizcay, Gustavo Luciani y Miguel de Souza transmitieron que harán eso.
En una entrevista previa al nombramiento, Lazo reconoció que había “presiones reales y legítimas” para designar y que entendía la necesidad de tener un “don de mando”. A su vez, mencionó que durante este tiempo –con Elizondo como interino– la Armada logró funcionar, no tuvo problemas y el nuevo comandante mostró “lealtades” hacia la institución y una actitud de “cuidarla”.
Asumirá este lunes a las 12 con un acto en la Escuela Naval. Permanecerá en el cargo hasta 2028, cuando deba pasar a retiro obligatorio por edad.
En este período, tendrá que afrontar una serie de desafíos que van desde ordenar la situación interna hasta conducir el proceso de construcción de las polémicas patrullas oceánicas (OPV) encargadas a Cardama.
A su vez, deberá construir liderazgo en el mando. Porque si bien sus pares reconocen su capacidad, será la primera vez que el almirantazgo recaiga en alguien proveniente de la Prefectura Naval y no del Cuerpo General.
El asunto no es menor, ya que en la interna los integrantes de la prefectura suelen ser observados despectivamente, aunque también hay quienes entienden que las tareas se seguirán cumpliendo como indican los reglamentos y la doctrina. “La misión de la Armada se va a cumplir con gestión, con recursos y con ejemplos de liderazgo, eso es lo que espera el marinero hasta el capitán de navío”, dijo una fuente.
Dos bibliotecas
A este tema se suma una discusión jurídica que ya corre por los caminos políticos y que expone la existencia de “dos bibliotecas”.
En el gobierno justifican la designación en que la ley más reciente (la orgánica de las Fuerzas Armadas del 2019) señala en su artículo 103 que los comandantes de cada fuerza serán designados entre los “oficiales generales” de cada institución. Elizondo cumple con esa exigencia ya que es contralmirante. La interpretación es que abandonó la especialidad (cuerpo de prefectura) al asumir el cargo.
Sin embargo, hay quienes –como el líder de Cabildo Abierto, Guido Manini Ríos– entienden que no puede asumir porque la ley orgánica vigente de la Armada (de 1946) establece que el comandante debe pertenecer al cuerpo general. “No tengo dudas de la capacidad profesional y hombría de bien del C/A Elizondo, pero la ley debe respetarse o, si se quiere, modificarse…”, señaló el exsenador y comandante en jefe (r) del Ejército.
Esta línea ha sido expresada, informalmente, por algunos de los contralmirantes en actividad, que han señalado que recurrirán administrativamente la decisión. Tres han manifestado que pedirán su pase a retiro, un extremo considerado por el gobierno pero que aún no ocurrió. “Hay que ver si los dichos se transforman en acciones”, señaló una fuente oficial a El Observador.
Algunos retirados, nucleados en clubes, evaluaban al cierre de esta nota si reunían las firmas necesarias para convocar una asamblea y emitir un comunicado cuestionando la legalidad del nombramiento.
“Titulares de prensa”
Aunque el Ejército y la Fuerza Aérea tuvieron sus escenas, en los últimos años la Armada ha sido protagonista en los medios por situaciones negativas como errores en procedimientos y casos de corrupción.
Lazo dijo que no podía permitir que un periodista le dijera “son todos ladrones” pero tampoco podía “tapar el sol con un dedo y negar que hay investigaciones abiertas”.
La línea de la ministra sigue la expresada en marzo del 2020 por Wilson durante su discurso de asunción.
Tras ser investido en el mando, en el mismo lugar donde estará Elizondo, el entonces flamante comandante dijo que en los últimos diez años la Armada había estado “en forma recurrentemente en los titulares de prensa no como hubiera sido deseado, sino que como consecuencia de casos de corrupción o desvío del marco legal vigente, la mayoría de las veces en pos de un beneficio personal, encontrándose el último de los casos aun en órbita de la justicia”.
“Todo esto ha tenido gran impacto en la moral del personal a todo nivel. Mientras dure mi comando, no se tolerará ningún desvío de las normas, tanto de quienes participen en este tipo de actos ilícitos, impropios o que afecten a la moral de la fuerza, así como con aquellos que en conocimiento de las mismas pretendan escudarse en falsas interpretaciones de compañerismo o espíritu de cuerpo”, expresó.
A cinco años de esas palabras, algunos oficiales le reprochan incumplimiento y señalan que Elizondo deberá ser más duro para ordenar la interna. Mencionan la investigación en Fiscalía por la desaparición de carne y víveres, denuncias de acoso y abuso, casos de corrupción que no fueron debidamente investigados y el análisis en marcha de cómo se decidió comprarle las dos patrulleras a Cardama.
Esto último, de hecho, es de especial atención ya que el Frente Amplio desde la oposición –y ahora en el gobierno– ha rechazado y criticado la elección. Como contralmirante, Elizondo fue uno de los que se mostró a favor de la compra en la Junta de Almirantes, pero ahora deberá reordenar la discusión y definir si es necesario renegociar el contrato por los incumplimientos denunciados por los oficiales que asistieron a Vigo a ver las obras.
Una crítica
El senador y exministro de Defensa, Javier García, cuestionó que el gobierno haya tardado ocho meses en designar al comandante, en referencia a los tres de la transición y cinco de gobierno.
“Le hizo un enorme daño a la Armada Nacional. Es fruto de prejuicios contra la Armada. Corresponde que de una vez por todas se pongan a trabajar y no dividan y lastimen más. Tienen por delante la tarea de cuidar nuestro mar, dejar de boicotear la construcción de las OPV que es lo que va a garantizar nuestra pesca, riquezas y sistema medioambiental en el mar, que los narcotraficantes y el crimen organizado no se hagan un picnic. Tienen que dejar de boicotear el proyecto”, le dijo a Telenoche.