¿Es posible recuperar el estado físico luego de dar a luz?

1. Esperar seis semanas para volver a la actividad física

Es verdad. Se recomienda que la mujer espere entre cuatro a seis semanas luego del parto para comenzar con la actividad física. Esto puede variar un poco, ya que todos los cuerpos se adaptan en tiempos distintos.

"Piensa que una vez que sale el feto te quedas con un desorden a nivel fisiológico bastante importante y el cuerpo necesita tiempo para volver a la normalidad", explicó Sánchez Diego. En suma, afirmó que el cuerpo sufre una distensión, que hace que se adapte durante el embarazo y lleva su tiempo para volver a la normalidad.

Se suma otra variante que depende de si es un parto natural o cesárea. De igual forma, en cualquiera de los casos las mujeres tienen permitido hacer rutinas con baja intensidad, para fortalecer el suelo pélvico a los días del parto.

2. ¿Hay que hacer mucha cantidad de abdominales?

Es un mito. Es inevitable que se produzca un debilitamiento en toda la zona CORE del cuerpo, a pesar de lo entrenada que pueda estar la mujer. Sin embargo, la solución no es someterse a una carga física alta, sin pasar por el proceso de recuperación. El experto dijo que "la anatomía también cambia y todo lo que es la zona lumbar va a sufrir bastante tensión. Por ello es importante tener la musculatura fuerte en ese sector". A pesar de esto, no es bueno abusar de los abdominales. "Primero es salir andar, pero lo mejor es una combinación entre pilates y ejercicios hipopresivos", agregó.

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3. ¿Hay riesgo por la falta de sueño?

No es así. Hacer ejercicios ayuda a activar el metabolismo, se tiene más vitalidad y ayuda a contrarrestar la depresión postparto que suelen sufrir las madres. Sánchez Diego explicó que "el ejercicio tendrá un beneficio tanto físico como psicológico".

El cuerpo descansa cuando es sometido a gimnasia, ya que se va quitando la tensión corporal. La zona más afectada suele ser el abdomen y esto colabora para conseguir un nivel de relajación que permite establecer un mejor patrón de sueño.

4. Cómo afecta la lactancia

No tiene relación alguna con el ejercicio. Según cita BBC Mundo, un estudio del Centro Nacional de Biotecnología de Estados Unidos concluyó que la "implementación de programa de entrenamiento de bajo impacto para mejorar el estado de forma no afecta los niveles de las hormonas relacionadas con la lactancia".

Lo que sí hay que tener en cuenta es la alimentación, ya que es fundamental para amamantar. Será necesario compensar lo que el cuerpo requiere para el esfuerzo físico y para darle los nutrientes necesarios al bebé.

"Pese a que tiene que ser una dieta alta en calorías la mujer no aumentará de peso ya que la estará combinando con una rutina de ejercicio", señaló el experto en preparación física femenina.

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5. ¿Cambian los pies?

No son los pies los que cambian, sino la pisada. De igual forma, es cierto que las embarazadas pueden experimentar cierto tipo hinchazón.

Sánchez Diego recomendó a las mujeres que consulten a su podólogo para conocer su nueva forma de pisar y así poder elegir el calzado adecuado. Aunque aclaró que "no es el tamaño lo que cambia y que la transformación que sufren los pies durante el embarazo es sólo temporal por la inflamación".

6. El cuerpo nunca volverá a ser el mismo

Sánchez Diego afirmó que es difícil volver al cuerpo a su total normalidad, y en especial cuando la mujer está concentrada en su nuevo bebé, en el trabajo, entre otras cosas. "Sí podría, pero cuesta mucho", agregó el experto que ha visto numerosos casos de mujeres que han recuperado la forma en pocas semanas de ejercicio.

Para lograr una eficiente recuperación, la clave está en haber estado en activa antes, durante y después del embarazo. "Eso será lo que marcará las pautas de la recuperación".