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Actividad portuaria cayó 15% en primer bimestre y preocupa a operadores privados
En los dos primeros meses del año el puerto de Montevideo tuvo una caída de actividad de 15,5%. El menor movimiento de contenedores preocupa a los operadores privados porque entienden que los números de comienzo de año consolidan un comportamiento a la baja de la principal terminal marítima del país.
“Ahora uno camina por la rambla portuaria y ve el agua; antes no, veía contenedores en cuarta fila, contra los muros y hasta algún colapso en el tráficos por la cantidad de camiones en la entrada”, graficó a El Observador el presidente del Centro de Navegación, Alejandro González.
En el análisis de los datos que efectuó la gremial se constató que entre enero y febrero de este año se movilizaron dentro del puerto montevideano 69.390 contenedores. En el mismo período de 2018 habían sido 82.116, lo que mostró un descenso interanual de 15,5%. Un dato relevante es que se verificó una caída de todos los movimientos. En el caso de las exportaciones la baja fue de 17,7% y en las importaciones de 11,2%.
La disminución más significativa se registró en los contenedores en tránsito; allí fue de 21,1%. Entre enero y febrero de este año llegaron 6.961 contenedores menos bajo esa modalidad que en el mismo período de 2018. La fuerte retracción se produjo por una menor llegada de mercadería paraguaya al puerto para ser transbordada a buques de ultramar y trasladada hasta su destino final.
El año pasado, la caída de la operativa total de contenedores fue de 14,3% frente a 2017.
“Lo importante es que consolida una tendencia a la baja y eso es lo que preocupa”, dijo González. Y no es algo que se note solamente en Montevideo. Añadió que una recorrida por la terminal de Nueva Palmira los operadores privados le informaron sobre una baja de la actividad de entre 30% y 40%. Pero por el volumen lo que más alarma es la situación del principal puerto.
Ante ello, González indicó que mantuvo reuniones con los dos principales operadores privados, Montecon (que trabaja en las áreas públicas del puerto) y Terminal Cuenca del Plata (TCP, propiedad mayoritariamente de la multinacional belga Katoen Natie). Allí se definió que el Centro de Navegación elaborará un plan de acción con el objetivo de potenciar la actividad. Si ese documento tiene el aval de ambos privados le será presentado al ministro de Transporte, Víctor Rossi.
“La disminución está afectando mucho al sector portuario; las agencias marítimas en general no la están pasando bien, los depósitos intraportuarios que dependen de los tránsitos también están con preocupación”, expuso. La menor operativa, agregó, también se hace sentir en los números de las empresas del sector. “Se les hace difícil cargar con los costos fijos y la falta de actividad las convierte en más débiles y con puestos de trabajo más vulnerables”, explicó.
Ante la baja de los tránsitos, en los últimos meses jerarcas de la Administración Nacional de Puertos (ANP) mantuvieron contactos con autoridades bolivianas para que carga de ese país transitara por la hidrovía hasta Uruguay y posteriormente se embarcara al exterior.
Sin embargo, González informó que en mayo un servicio de contenedores que comenzara a operar desde Bolivia optó por dirigir su carga hacia el puerto de Buenos Aires y no hasta Montevideo.
Además, a principio de año llegó una noticia similar. La naviera paraguaya Guaran Feeder decidió modificar su operativa. Esa compañía era una de las que más carga de su país traía hasta Montevideo en tránsito. Pero como parte de una estrategia comercial, decidió enviar parte de su flota de barcazas hacia la terminal bonaerense.
