Bajar costos será la gran prioridad del ministro de Industria

La primera fila del auditorio estuvo copada por las autoridades del directorio y gerencias del locatario (Ancap), pero también dijeron presentes los presidentes actuales de UTE, Gonzalo Casaravilla, Antel, Andrés Tolosa, y El Correo, Solange Moreira. El expresidente Julio María Sanguinetti y la actual vicepresidenta de la Reública Beatriz Argimón tuvieron su lugar en primera fila, mientras que el Secretario de la Presidencia Álvaro Delgado acompañó a las autoridades en el estrado principal. 

A diferencia de otras ceremonias, el subsecretario del MIEM, el colorado Walter Verri, abrió el acto con un breve discurso. Aclaró que el gobierno de coalición no venía con un “afán refundacional” sino a trabajador con “diálogo” y “esfuerzo” con todos los actores incluidos los propios funcionarios de su cartera.

“Tenemos muchas afinidades con el ministro y vamos a trabajar todos juntos y con las puertas abiertas”, aseguró.

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El cierre estuvo a cargo del ministro Paganini, quien trazó los grandes titulares para las diversas áreas que están bajo su responsabilidad. Una de las primeras tareas que mencionó Paganini fue la de trabaja para reducir los costos de las industrias uruguayas, un viejo reclamo y anhelo de la Cámara de Industrias (CIU). 

“La ciudadanía votó por un cambio. Es un cambio de orientación y en cada área ello puede significar cosas distintas”, puntualizó Paganini, que prometió impulsar el desarrollo productivo y la generación de empleo. 

“Como principal desafío quiero resaltar el de la competitividad. Que el país tiene problemas no es una novedad para ninguno. Producir en Uruguay es caro, complicado”, admitió. En ese sentido, anunció que habrá que poner “énfasis” en áreas como la productividad, costos, y con precios de la energía que estén en niveles similares a la región tanto en combustibles, energía eléctrica como transporte. 

Paganini advirtió que la estructura actual del ministerio está "obsoleta" para abordar los cambios que se están procesando en toda la matriz energética como una tendencia a la autogeneración de energía o el avance del transporte eléctrico. Además, consideró que Ancap “debe jugar en la cancha grande” a la hora de definirse como un refinador de combustibles no solo para Uruguay sino también para la región. 

“Es clave que dejemos de pensar en un esquema institucional donde los entes sean juez y parte. Por ello queremos fortalecer los reguladores y darles independencia”, anunció Paganini. 

En el caso de la industria, el jerarca indicó que atraviesa un momento difícil (el corazón del núcleo industrial volvió a contraerse por segundo año consecutivo en 2019). “Una vez más los desafíos aquí son de competitividad”, admitió, y dijo que habrá que trabajar en acceso a mercados, productividad y los costos de la energía. 

También habló sobre la necesidad de velar por el cuidado del medioambiente y sobre la importancia de subirse a la ola de la inteligencia artificial y su capacidad de incorporarla a los procesos productivos del país.