Colombia ordenó cerrar todos los pasos ilegales en la frontera con Venezuela

Durante su participación en los diálogos regionales en la ciudad colombiana de Cúcuta, Petro reconoció que desde que se reabrió el tránsito en los puntos autorizados, la situación económica en la zona no mejoró como se estimaba que pasaría.

“La frontera abierta puede ser una posibilidad de prosperidad, pero al cabo de un mes, por allí, solo han pasado dos millones y medio de dólares en productos. ¿Y el resto de productos por dónde están pasando? O sea, abrimos el puente, dimos la pela, corrimos el costo político y la economía sigue pasando por la trocha”, se lamentó Petro en una clara referencia al contrabando.

El jefe del Estado denunció que existen personas que trabajan tanto para el gobierno venezolano como colombiano que estarían lucrando con el paso de productos y viajeros por las trochas. “Porque allí uniformados, funcionarios, de allá y de acá, están cobrando la comisión. ¿Y así vamos a construir la paz? ¿Así vamos a construir la prosperidad?", se preguntó el mandatario de izquierda, según reportan los medios locales El Espectador y El Nuevo Siglo.

En ese contexto, Petro informó que ordenó al Ministerio de Comercio el cierre de todas las trochas y anticipó que impulsará una reunión de alto nivel con su par venezolano, Nicolás Maduro, para resolver el problema, “porque esta frontera es para la gente, no para las mafias”, enfatizó el presidente colombiano.

“El dialogo social debe llevar a que la frontera gire alrededor de una política de la vida centrada en el trabajo y el conocimiento, y no como en el pasado inmediato, alrededor de la muerte, del crimen y de la política aliada con las mafias”, agregó Petro mediante su cuenta oficial en la red social Twitter.

Ayer, al cumplirse un mes de la reapertura, el Gobierno colombiano precisó que entre el 26 de septiembre y el viernes último las exportaciones e importaciones entre los dos países sumaron apenas US$ 2,25 millones a través de la frontera terrestre, que estaba cerrada desde 2015.

Pero ambos gobiernos, y decenas de empresarios, la apertura debía impulsar una era de prosperidad comercial a caballo de la reanudación de las relaciones políticas entre Bogotá y Caracas, interrumpida por el expresidente Iván Duque como parte de una estrategia para acorralar a Maduro, además de facilitar las negociaciones de paz con la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN), que opera a ambos lados de la frontera.