Por Alfredo Etchegaray
Con la natural diversidad de situaciones, nacemos, estudiamos y trabajamos, con actitud y acciones para crecer y vivir mejor en lo económico. Soñamos con una mayor calidad de vida material y emocional, en un mundo cuyo ritmo, cambios y presiones, con frecuencia nos supera en velocidad, generando una permanente carrera detrás de esos sueños, a veces origen de ansiedades que llegan a desvirtuar la búsqueda de los equilibrios y terminan distorsionando nuestra tan importante paz interior que nos permite el disfrute de los afectos, la familia, la naturaleza y el desarrollo de nuestras artes, oficios y habilidades creativas.
La faceta positiva es que son los sueños y proyectos de la gente y las mentes de los habitantes de una nación los que crean la riqueza y su efectiva consecuencia en la estimulación de buenos empleos, sin necesidad de llegar a las disciplinas extremas de otras culturas de Oriente, pero sí mejorando las nuestras, con mayor pasión, orden y perseverancia.
¿Es posible imaginar un resultado diferente, haciendo más de lo mismo? Notoriamente, este nuevo escenario mundial nos enfrenta al desafío de informarnos nuevamente, capacitarnos y evolucionar, en un trabajo de equipo con la administración pública que, afortunadamente, tiene la actitud necesaria para aggiornarse.
Innovación es la clave del éxito, que requiere una cuota de coraje para animarnos a salir del área de confort, aprendiendo de las experiencias de regiones que crecen más y mejor.
En el mercado inmobiliario de nuestro país es muy alto el porcentaje de operaciones al contado o con la muy costosa participación de créditos privados, debido a la “rica en obstáculos” accesibilidad a créditos bancarios. Consulten y conocerán que miles de uruguayos en Europa, los Estados Unidos y otras regiones del mundo acceden rápidamente a la compra de valiosas propiedades a través de eficientes servicios de leasing a largo plazo y tasas muy bajas, con beneficios extra luego de cierto período de cumplimiento, logrando multiplicar el ritmo y volumen de ventas a dimensiones de asombro, como también se observan en las bolsas y sus volúmenes de inversión.
Lógicamente, fácil se accede y rápidamente se pierden los derechos adquiridos en función de la disciplina y cumplimientos, para que otro cliente sustituya al disruptivo. Así como en el turismo la conectividad accesible y eficiente es la base del éxito, además de la calidad de productos y servicios, en los negocios del mercado inmobiliario la accesibilidad es también la clave del éxito, a través de créditos con el formato de leasing, que en nuestro país son una rareza.
En un estado de derecho y con las sagradas libertades empresariales, sería interesante intercambiar información para evaluar en qué condiciones es viable crear este nuevo ámbito de negocios, que muy probablemente multiplicará el ritmo y las dimensiones de las operaciones y empleos para todos, con los previsibles ciclos de ajustes que se dan en todos los mercados, apalancados por políticas de Estado de reactivación acelerada. Trabajando juntos lograremos cambios.
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