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El mensaje de Arbeleche al empresario: Estado más eficiente y sin suba de impuestos
La expectativa era grande. Era su primer discurso ya con el traje de ministra de una de las carteras más relevantes para cualquier gobierno. Ante auditorio repleto por 400 empresarios -que quedó chico y con fila de espera-, la futura ministra de Economía y Finanzas del gobierno de coalición Azucena Arbeleche fue la primera en bajar a tierra alguna expectativa desmedida sobre algún probable anuncio para marzo próximo. “Les tengo que adelantar que no tengo ninguna sorpresa. Lo que vamos a compartir son elementos que venimos trabajando hace mucho tiempo”, dijo este jueves en el arranque de su oratoria en el tradicional almuerzo en el Club de Golf por el Día del Exportador que organizan cada año la Unión de Exportadores del Uruguay (UEU) y el Banco República (BROU).
La jefa del próximo equipo económico optó por no salirse del guión de la agenda de gobierno para 2020-2025, que viene preparando desde hace ya un quinquenio primero para la elaboración del programa de gobierno del Partido Nacional bajo la conducción de su líder y futuro presidente y Luis Lacalle Pou, y luego para la guía que se acordó con la coalición de cinco partidos políticos.
Arrancó su discurso con una frase de John Keynes: “'El problema político de la humanidad es combinar la eficacia económica, la justicia social y la libertad individual'". "Es sobre esos tres pilares, que nosotros entendemos que se debe abordar la política económica”, afirmó. Y añadió que la “persona es el centro en toda decisión de política económica”, una frase que volvió a repetir al cerrar su discurso antes de recibir un aplauso cerrado del auditorio que siguió con una atención llamativa su exposición de poco más de 40 minutos.
Admitió que la “transición comenzó movida” con cuatro días “muy dinámicos” por la polémica que se generó con la administración actual que expresó su intención de no ajustar las tarifas públicas en enero próximo.
En más de una oportunidad se refirió y empatizó con la problemática y pedidos que realizó la presidente de los exportadores Andrea Roth en su discurso de apertura, como una mejora de la competitividad, bajar el costo del las tarifas, mantener un tipo de cambio real competitivo, darle un empujón con estímulos a las pymes -pese a que no son relevante en la estructura exportadora- o una mejora de la inserción internacional.
“No es momento para que de una respuesta concreta, pero abrimos formalmente el diálogo para ver las preocupaciones de los exportadores en general. Son insumos que hemos tomado en cuenta”, aseguró Arbeleche.
La futura ministra dijo que el tipo de cambio se definirá por su oferta y demanda, que el Banco Central (BCU) solo intervendrá cuando haya fluctuaciones bruscas porque de lo contrario puede ser perjudicial para la salud de las empresas o familias y que el rol de la política monetaria de la autoridad monetaria tendrá como foco mantener la inflación dentro del rango meta.
Desvelo de corto plazo
Arbeleche no dudó en expresar que el principal desafío macroeconómico de corto plazo es la creación de empleo, tras la pérdida de los 56 mil puestos desde el pico de ocupación de 2014, y dijo que el futuro gobierno “derogará el decreto que habilita la ocupación” como una extensión del derecho de huelga, un viejo reclamo de las principales gremiales empresariales que ha chocado con la conducción del Frente Amplio en el poder.
Para la ministra, es fundamental volver a una agenda de crecimiento económico y que la inversión deje los números rojos que ha mostrado en los últimos trimestres. Consideró que la exportación tiene un “rol clave” para ser el motor del crecimiento y que por ello se hará foco en mejorar su competitividad y productividad.
Por ese motivo, Arbeleche consideró que no hay otra alternativa que hacer un mejor uso de los recursos públicos con un ahorro del gasto y descartó la vía impositiva para mejorar un rojo de la cuentas públicas que orilla el 5% del PIB.
“Aumentar los impuestos es exacerbar el estancamiento de la economía”, reafirmó, y dijo que el ahorro de los US$ 900 millones -que incluye su plan- no necesita de la ley de urgente consideración que prevé enviar Lacalle al Parlamento apenas asuma.
“El origen del déficit es un gasto creciente del Estado que hay que limitar y restringir”, enfatizó.
Dijo que el rol del Estado será el de “estar presente y activo” para acompañar a las personas más vulnerables y consideró que las políticas sociales siempre deben estar a disposición para atenderlas y no en función de la coyuntura económica de turno.
Es papel incluirá una política más simple y eficaz de varios trámites en el Estado que hoy están duplicados en algunas áreas, una transformación en la gobernanza de la empresas públicas y donde sus objetivos será más precisos.
Apertura comercial e infraestructura
En materia de inserción internacional, Arbeleche consideró que se puede apostar a un Mercosur “diferente” con una nueva agenda. “El Mercosur no podrá ser una jaula”, señaló Arbeleche, que destacó la necesidad de acercarse a mercados asiáticos como China y negociar tratados comerciales a velocidades distintas dentro del bloque dada las diferencias de sus miembros.
La futura ministra también se refirió en otro de sus ejes temáticos a la infraestructura. Allí destacó la necesidad de reforzar la inversión en el sector vial y anunció cambios en el régimen de las PPP porque sus tiempos son “lentos”, existe una superposición de requisitos entre diferentes organismos el Estado en sus garantías, y se debe definir un nuevo esquema de riesgos para las partes. Por ello se creará una única agencia de infraestructura durante la próxima administración.
En el caso del puerto, se presentará un nuevo plan maestro, no solo para mejorar la productividad interna sino también para captar una mayor carga de transbordos de los países vecinos. “Necesitamos vender más servicios a la región”, reconoció Arbeleche.
