Google Chrome, el navegador más utilizado por los usuarios, cumple 10 años de funcionamiento rápido y seguro. En la actualidad, cuenta con más de 2.000 millones de usuarios a nivel global. Y para festejar su éxito, Google lanzó la versión Chrome 69, más moderna y sofisticada que las anteriores, con cambios en su diseño y algunas novedades como un gestor de contraseñas. ¿Pero cómo se hizo imprescindible?
Google Chrome marcó un antes y un después en la historia de los navegadores desde su llegada. El rey anterior, Internet Explorer (de 1995), se vio amenazado primero por la llegada de Mozilla Firefox en 2004. Sin embargo, la competencia creció con Chrome. Con solo cuatro años en el mercado, este sobrepasó a las otras opciones. La pregunta es: ¿cómo pasó a ser el preferido? Una de las claves es que presentó diferentes diseños a lo largo de los años, pero siempre se destacó por ser una red segura.
Según la revista especializada Wired, los desarrolladores de Google no le brindaron las mismas mejoras a Chrome que las que introducían sus competidores; sin embargo, diseñaron el servicio de navegación más segura y confiable.
En el marco del lanzamiento de Chrome en 2008, este medio destacó que era una plataforma prometedora. “La forma en que maneja las pestañas, la forma en que trata los errores, su velocidad deslumbrante. No hay dudas de que esto cambia el juego en el mundo del desarrollo web”, se leyó en ese entonces.
En un comienzo, Chrome presentó una mejor administración de pestañas que permitía ejecutar sus propios permisos, pero a su vez proteger la memoria. De esta manera, si una pestaña era bloqueada, no se bloqueaba todo el navegador. Como también si un atacante intentaba atacar a un usuario de Chrome no podría hacerlo de más de un sitio a la vez.
Por primera vez, un navegador se asemejaba más al funcionamiento de un sistema operativo, en el que se ejecutaban muchos programas aislados en un sistema de permisos.
A su vez, Chrome se destacaba por tener actualizaciones automáticas y por su zona de pruebas de vulnerabilidad. Estas características marcaron la diferencia hasta hoy, aunque en su momento fueron criticadas. Con el correr de los años, los ciberataques evolucionaron, lo que provocó que Chrome se apresurara a tapar ciertos agujeros. Por ejemplo, se reforzó para que fuese más difícil robar datos de los usuarios. Luego, se abogó por el uso generalizado de conexiones encriptadas en la web. A principios de 2017, Chrome lanzó un llamado de atención a los sitios que aún no contaban con la protección HTTPS.
A medida que Chrome fue ganando terreno, la comunidad web se volvió más cuidadosa, lo que impulsó a los desarrolladores a optimizar los sitios para su uso por encima de otras plataformas.
Con 10 años encima, Chrome propone ahora un nuevo diseño para computadoras y móviles. Pero si se mira a futuro, la empresa habla de integraciones más profundas de inteligencia artificial y aprendizaje automático, acompasando los otros servicios de Google. El objetivo sería que la realidad virtual y las herramientas de realidad aumentada permitan una mejor navegación.
La nueva versión, la 69, trae nueva iconografía y paleta de colores. Para la versión para iOS, la barra de direcciones pasa a la parte inferior para que sea más fácil de acceder. La forma en la que aparecen los menús y las URLs en la barra de direcciones también es nueva, al igual que la Omnibox, que combina la barra de direcciones con la barra de búsqueda.
En cuanto a la gestión de contraseñas, Chrome pasa a hacer el trabajo manual de rellenar los campos de las contraseñas, direcciones o números de tarjetas de crédito de forma automática. Para poder lograrlo, toda esa información estará almacenada en la cuenta de Google del usuario y eso facilitará su escritura en los formularios web.
A su vez, cada vez que el usuario necesite crear una cuenta en un sitio o servicio web, Chrome le permitirá generar una contraseña única y fuerte. Luego se encargará de almacenarla y de que se use a partir de ese momento sin tener que volver a escribirla. Incluso se sincronizará entre el escritorio y el teléfono móvil donde se usa Chrome con la cuenta de usuario.
Esta nueva versión quitó el HTTP y el HTTP de la página, lo único que se ve es la información importante que marca los sitios visitados como no seguros. Asimismo, ya no avisa cuando un sitio web es seguro.
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