Huracanes en un paraíso: ¿porque a las Bahamas las golpean tantos de estos fenómenos?

El archipiélago –conformado por 700 pequeñas islas, 39 de ellas deshabitadas, y más de 2.000 cayos– está bañado por el océano Atlántico y el mar Caribe, y se ubica 80 kilómetros al sur de Florida. 

Estas islas cercanas a Jamaica, Cuba y Haití regularmente son utilizadas como punto de tránsito para migrantes que tratan de llegar a Estados Unidos. De acuerdo con la Organización Internacional para las Migraciones, cerca de 5.000 haitianos trabajan legalmente en las Bahamas, pero entre 20 mil y 50 mil compatriotas suyos están en ese país de manera ilegal. El 85% de la población es de origen africano.

La posición estratégica del archipiélago lo ha convertido también en un centro para el tráfico de drogas, contra el cual Estados Unidos trabaja de manera estrecha con las autoridades locales.
Destino turístico  El turismo es su principal fuente de ingresos, con el 80% de los 4 millones de visitantes al año procedentes de Estados Unidos. Este sector representa el 60% de los más de US$ 12.000 millones de PIB y emplea a la mitad de las personas en edad de trabajar.

Su principal atracción es Atlantis Paradise Island, un vasto complejo turístico frente a la capital Nassau. Este paraíso tropical de fina arena bañada por mares en tonos de azul es el sitio ideal para los amantes de la playa. Es también un imán para quienes disfrutan de la pesca de clase mundial, paseos en barco, buceo, esnórquel y vela.
Por su atractivo natural, es el hogar de numerosas celebridades, desde el actor escocés Sean Connery –residente desde hace mucho por razones fiscales– hasta el estadounidense Johnny Depp, quien igual que otras estrellas tiene una isla privada.

Azotes del clima

Sin embargo, las Bahamas son normalmente golpeadas por huracanes y tormentas. En 2016, con el huracán Matthew, los aeropuertos de Bahamas fueron cerrados y las autoridades llamaron a los habitantes a trasladarse a tierra firme por el temor a las inundaciones. Aunque hubo fuertes daños, no se registraron víctimas.

En 2014, nueve personas murieron durante la tormenta tropical Jeanne. En 1999, el huracán Floyd, que provocó olas de más de 15 metros e inundaciones en varias islas, dejó un muerto y fuertes daños, en tanto golpeó con dureza a la economía. En 1992 cuatro personas murieron por el huracán Andrew.

(Basado en AFP)