Jullia Wendell, la joven que decía ser Madeleine McCann, la niña desaparecida en 2007, admitió en un vivo de Instagram que no es ella pero que podría ser otra niña secuestrada. "Hay evidencias", aseguró en la red social, recoge La Nación.
Wendell había creado la cuenta de Instagram @iammadeleinemccan para difundir su teoría y pedir un ADN para saber si ella era Madeleine. Desde allí compartió varias publicaciones comparando sus rasgos con los de la menor desaparecida y también con los de Gerry y Kate McCann, los padres de la menor.
La joven decía que no estaba segura de su identidad ni tampoco de su edad. Según relató, tiene 21 años, pero cree que su edad podría no ser esa. En la actualidad, Madeleine tendría 19 años.
“Creo que puedo ser Madeleine. Necesito una prueba de ADN. Los investigadores de la Policía del Reino Unido y Polonia intentan ignorarme. Contaré mi historia en publicaciones aquí. Ayúdame”, se lee en la descripción de su perfil de Instagram.
Según recoge La Nación, Wendell había dicho que sus padres habían negado a hacerse la prueba de ADN, algo que fue desmentido por su familia.
La representante legal de Julia, la médium Fia Johansson dijo a The Sun que están intentando investigar la identidad de Wendell. “Hacemos todo lo posible para descubrir la verdad sobre sus antecedentes y, así, su verdadera identidad”, señaló. “Investigamos a su familia, sus antecedentes, las personas con las que fue a la escuela, todo lo que se nos ocurre”.
Esta no fue la primera vez que en redes se hace viral el caso de una joven que sostiene o sospechaba ser Madeleine. Algunos de estos casos fueron desmentidos por las propias mujeres que recocieron estar bromeando o por sus familias.