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Juez brasileño ordena detener partidos por altas temperaturas
Un juez brasileño ordenó el viernes a la FIFA a seguir sus propias reglas y detener el juego en los partidos del Mundial cada 30 minutos para que los futbolistas se refresquen si la temperatura es de 32 grados Celsius o mayor.
Rogerio Neiva Pinheiro, juez del Tribunal Laboral en Brasilia, también ordenó que la FIFA pague 200.000 reales (89.686 dólares) por cada partido que no cumpla con la reglamentación de las interrupciones por calor.
La demanda fue presentada en nombre de los jugadores del Mundial por fiscales laborales que buscaban un fallo para que se implementen interrupciones para refrescarse bajo los estándares de regulación laboral brasileños de 30 grados centígrados, según la decisión judicial.
La FIFA calificó la decisión como en buena parte irrelevante.
"No llegamos o superamos los 32 grados en ningún momento de ningún partido hasta ahora", dijo la portavoz de la FIFA Delia Fischer a Reuters.
"La corte solo nos está ordenando seguir nuestros propios procedimientos, que es algo que siempre planeamos hacer", agregó.
FIFA ha enfrentado una creciente ola de críticas por su insistencia de que países que organizan grandes eventos como el Mundial adapten sus leyes para cumplir con los requerimientos del organismo.
Brasil ya había accedido a suspender una prohibición sobre la venta de cerveza en los estadios durante el torneo, implementada para reducir los enfrentamientos y muertes entre los hinchas, a pedido de la FIFA y su patrocinador, el gigante cervecero Budweiser.
La FIFA no dijo si planea apelar el fallo. Fiscales públicos en Brasil con frecuencia desafían a compañías e individuos ante la Justicia. Si bien con frecuencia se otorgan órdenes judiciales, también son frecuentemente anuladas.
