Kim Kardashian y Kanye West se separaron y se preparan para el divorcio

Según el sitio de espectáculos Page Six, los dos están "hartos" de los comportamientos del otro. West manifestó su disconformidad con el lujo y las excentricidades de su esposa y su familia, como el festejo del 40 cumpleaños de Kardashian en una isla privada en Tahití, que le valió grandes críticas por su costo (más de un millón de dólares) y por su ostentación, en un contexto de crisis económica mundial provocada por la pandemia de covid-19.

West fue tarde al festejo, que duró varios días, y se fue poco tiempo después, luego de entregar su regalo, que demuestra el mundo paralelo de las celebridades: un holograma de su suegro, el fallecido abogado Robert Kardashian. El rapero no apareció en ninguna de las imágenes del evento, y está recluido en una granja de su propiedad desde hace meses. También criticó la actitud de su familia política y llegó a llamar a su suegra "Kris Jong-un", en referencia al dictador norcoreano, Kim Jong-un.

Kardashian, por su parte, y según ese mismo medio, está agotada de "las locuras" de West, y contrató a la abogada Laura Wasser, especialista en divorcios y cuyos servicios han sido utilizados por otras estrellas, como Angelina Jolie y Johnny Depp. Entre la inminente larga lucha por una separación de bienes, la mansión familiar en California, tasada en US$ 40 millones, se perfila como la joya de la corona por la que ambos debatirán en los juzgados. 

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Según el sitio TMZ, la pareja aún no ha empezado el proceso legal de divorcio, aunque la opción está en la mesa. Como último recurso, Kardashian y West se han sometido a terapia de pareja, pero que las diferencias son cada vez más, y van desde el estilo de vida hasta las ideas políticas de ambos. El único punto en común, reconocen, es la crianza de sus cuatro hijos.