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La búsqueda de activos financieros seguros
El aumento de las fricciones entre Estados Unidos y China ha derivado en un flujo de las inversiones financieras desde el dólar hacia otros activos considerados como más seguros. Así, el precio del oro, que es muy sensible a los temores sobre el futuro de la economía mundial, está subiendo desde principios de año.
En el mercado cambiario internacional, el yen y el franco suizo son en estos tiempos las dos monedas más buscadas entre las de los países industriales. En el curso de este año, el yen se apreció un 3 % con relación al dólar, en el que ha sido el mayor registro en esa relación. A su vez, el franco suizo está en su nivel más alto contra el euro desde junio del 2017.
Ante esta realidad, el Banco de Japón y el Banco Nacional de Suiza enfrentan una difícil opción de política económica para evitar una mayor apreciación de sus respectivas monedas. En el pasado, la intervención directa en el mercado cambiario o el manejo de la tasa de interés fueron los dos instrumentos de uso más habitual para evitar ese riesgo.
Pero en estos tiempos, los dos bancos centrales deben tener en cuenta el eventual apercibimiento que podría anunciar el Tesoro de Estados Unidos ante sus respectivas políticas cambiarias, puesto que tiene con ambos un déficit comercial importante. Además, sus respectivas tasas de interés ya están en niveles usualmente bajos.
En las últimas semanas el yen se ha aproximado al nivel de Y 105 por dólar, pero el BJ se ha abstenido de intervenir, pese a que es un nivel que siempre se creyó que defendería.
En cambio, por primera vez en dos años, el BNS ha estado vendiendo francos en el mercado cambiario para limitar su apreciación. Hacia el futuro, de persistir las condiciones actuales del mercado internacional, se especula que podría recurrir a una nueva baja de la tasa de interés, pese a que ella ya es negativa.
