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La mirada del presidente del BBVA sobre Uruguay y en qué negocio hay "fruta madura"
El presidente del BBVA Carlos Torres Vila esperó a que se abrieran las fronteras para retornar con sus recorridas por los países donde el banco español tiene negocios. Y uno de los primeros que escogió fue Uruguay. En una breve visita, y con una agenda apretada de reuniones con autoridades y ejecutivos bancarios, Torres Vila recibió a la prensa por unos minutos para hablar sobre las perspectivas de la industria financiera, de cómo ve posicionado a la región, y los desafíos que se vienen por delante con varias "frutas maduras" para que la industria bancaria pueda sacar provecho.
Por otro lado, a raíz de la guerra entre Rusia y Ucrania, el ejecutivo avizora un nuevo eje de relacionamiento geopolítico donde Europa buscará "nuevas opciones" para asegurase el abastecimiento de "elementos estratégicos" como la energía y los alimentos. "Tenía muchas ganas de venir a Montevideo, a Uruguay, porque es la primera vez que vengo y hace años que lo tenía programado", dijo a poco de comenzar su exposición.
Consultado por El Observador sobre cómo ve el panorama de la región y Uruguay teniendo en cuenta toda la incertidumbre que provocó la guerra en Ucrania tras el shock de la pandemia, el ejecutivo se mostró optimista. "América Latina está menos impactada por el conflicto. Respecto a Uruguay, somos optimistas con sus perspectivas de crecimiento del PIB. Estimamos un crecimiento en 2022 del 3,8% y de 3% para 2023 con un sesgo al alza", proyectó Torres Vila.
En tanto, en el plano energético, el presidente del BBVA consideró que "todos los países deben avanzar hacia la descarbonización" de sus economías y, al mismo tiempo, promover una mayor independencia y diversificación de sus fuentes de energía, lo que debe servir para movilizar la economía hacia las energías renovables.
"Uruguay es un gran ejemplo en América Latina con su apuesta por la generación energética a partir de fuentes renovables. En Uruguay, BBVA cuenta con un banco que está entre las entidades más sólidas del país, que mejora constantemente su oferta de productos y servicios, apoyados en la innovación tecnológica y que, además, ofrece una amplia gama de soluciones sostenibles. Nuestra prioridad para los próximos años es acompañar a los clientes y las empresas uruguayas en su transformación sostenible e internacionalización, con ayuda de la presencia internacional y la fortaleza financiera del Grupo BBVA", comentó.
Hay negocio y es "rentable"
Torres Vila recordó que se estima que la inversión global para descarbonizar y llegar a 0% de emisiones es del orden de los US$ 300 millones de millones (cerca del 8% del PIB mundial). En ese sentido, estimó que algo más del 40% de esas inversiones no necesita subvenciones de los Estados de ningún tipo ya que son "rentables" desde el punto de vista económico. "Esa fruta madura es la primera que hay que abordar y donde estamos fijando el foco a cortísimo plazo", indicó.
"Claramente en la eficiencia energética es un campo donde la inversión se paga sola en el ahorro que tienes, no solo en el sector residencial sino también en los procesos industriales", acotó.
Admitió que todavía "queda pendiente" la otra mitad del problema donde todavía no aparecen "soluciones competitivas", para evitar la emisión de CO2 como la aviación, el transporte marítimo o la fabricación de cemento o acero.
Otro punto donde el presidente del BBVA visualizó una "bolsa clara de oportunidad de corto plazo" y otra "fruta madura" es la sustitución de procesos que utilizan combustible fósil para la movilidad. "La electrificación de la movilidad ya es, en muchos casos, competitiva en función de los costos relativos de la electricidad y del combustible que varían según la región", explicó.
Añadió que hay regiones del mundo donde las cuentas "cierran" ya que comprar un vehículo eléctrico "es más barato" en función de los kilómetros recorridos, además de no emitir gases. Torres Vila se mostró confiado en que los costos de las baterías de los vehículos eléctricos continuarán cayendo en la medida que crezca el volumen de esa industria. Si bien todavía se está en una fase de piloto, consideró que Uruguay es una "promesa grande" para el desarrollo del hidrógeno verde en un futuro.
Asimismo, indicó que también están emergiendo —gracias al desarrollo de la tecnología— opciones para capturar CO2 más allá de las naturales como son las plantaciones de árboles. En ese sentido, Torres Vila comentó que todavía queda "mucho potencial" para capturar CO2 en los suelos. "Con la importancia que tiene la industria forestal en Uruguay, el mundo agro es muy relevante. Acá también hay mucha bolsa de oportunidad de reducir emisiones que se pagan por sí solas", aseguró. En ese sentido, añadió que se puede avanzar hacia cultivos más eficientes y así como realizar un mejor uso de los fertilizantes.
