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La pérdida de salario real de los trabajadores uruguayos se agudizó en enero
La pérdida de salario real de los trabajadores uruguayos se agudizó en el primer mes del año, y en la medida en que se cumplan los pronósticos de los expertos, la caída del poder de compra podría llegar a ser más pronunciada aun en el correr de este año.
Según los datos difundidos este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el salario real de los trabajadores tuvo en enero un deterioro de 2,3% respecto a igual mes del año pasado.
De esta manera, la caída se hace más pronunciada respecto al 1,5% con que cerró el año y lleva el nivel actual de poder de compra salarial a su menor valor para el mes de enero desde el año 2017.
La baja se debió, por un lado, a un menor ritmo de aumento salarial. El salario medio en términos corrientes subía a un ritmo de 7,8% anual en diciembre y en enero, esa tasa se moderó a 6,3%. Esto se debió a que en el mes de enero de 2020 los salarios subieron en promedio 4,9% respecto a diciembre y su ajuste fue de 3,5%.
Este menor aumento salarial se vio levemente suavizado por un menor empuje inflacionario. En los 12 meses finalizados en diciembre, los precios al consumo subían a una tasa de 9,4% mientras que el último registro de inflación interanual, a enero, fue de 8,9%.
Acuerdo puente
El acuerdo salarial puente negociado por el gobierno con el PIT-CNT y las cámaras empresariales preveía un ajuste de 3% en enero para el grueso de los salarios nominales y de 4% en el caso de los salarios más sumergidos. El relevamiento del INE recoge un incremento de 3,5% respecto a diciembre y de 6,3% en el acumulado de los últimos 12 meses.
Para el resto del año, el acuerdo puente prevé un correctivo por inflación que se ejecutará el 30 de junio. Sin embargo, ese ajuste está condicionado al desempeño de la economía debido a que a la inflación de los 12 meses a junio se deberá restar los tres puntos de aumento obtenidos en enero y los puntos de caída del Producto Interno Bruto (PIB) del año pasado.
Con las últimas proyecciones de la Encuesta de Expectativas Económicas del Banco Central, realizada entre analistas de coyuntura privados, centros de investigación económica e instituciones financieras, el correctivo de mediados de año quedaría en cero.
La mediana de analistas prevé una inflación de 7% para los 12 meses a julio. Teniendo en cuenta además una caída estimada de la actividad durante 2020 de 5,7% –los datos finales se conocerán a mediados de marzo–, los 1,3 puntos restantes ya habrían sido cubiertos con creces por el ajuste de enero.
Sin nuevos aumentos que esperar a lo largo del año, es probable que 2021 cierre con una pérdida aun mayor del poder de compra. Los expertos esperan una inflación de 7,1% para el cierre de 2021. Si se tiene en cuenta el incremento salarial de enero como el único en el año, de cumplirse los pronósticos, 2021 podría cerrar con una pérdida anual de 3,4% en el salario real.
