Las papas fritas más caras del mundo salen US$200 por porción

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Las papas fritas más caras del mundo: ¿qué hace que valgan US$200 y dónde se comen?

Un restaurante de Manhattan tiene ahora tres récords mundiales: las hamburguesas, el helado y las papa fritas más caros del mundo
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28 de julio de 2021 a las 14:00

El restaurante Serendipity 3, en el este de Manhattan, es la casa de los récords mundiales para la hamburguesa más cara del mundo (US$ 295) y el helado más caro del mundo (US$ 10000), ahora suman a la lista sus famosas papas fritas.

El 13 de julio pasado el plato de papas fritas del excéntrico restaurante neoyorkino obtuvo el certificado del Guinness World Record (Record Mundial Guinness) y son oficialmente las papas fritas más caras del mundo, con un valor extravagante de US$200 por porción.

Fueron creados en un restaurante neoyorquino y hay semanas de espera para probarlas

El director creativo y chef de Serendipity 3, Joe Calderone, dijo: "Serendipity es un lugar realmente feliz, las personas vienen aquí a celebrar, a veces a escaparse de la realidad". Y parte de esa experiencia son las "Crème de la Crème Pomme Frites", las aclamadas papas fritas.

¿Qué tienen de especial las papa fritas más caras del mundo?

El proceso de cocción de las papas fritas "Crème de la Crème Pomme Frites" del restaurante Serendipity 3 se distingue de la norma. Las papas se blanquean, o escaldan, en vinagre y champán, y luego se fríen en grasa pura de ganso, no en aceite, y no una sino dos veces, para que queden crujientes por fuera y esponjosas por dentro.

Una vez fritas, son espolvoreadas con oro comestible y sazonadas con sal de trufa y aceite de trufa. Se sirven en un plato de cristal con una orquídea, trufas en rodajas finas y un dip de queso Mornay, uno de los quesos más caros del mundo. La salsa que acompaña las papas fritas también está impregnada de trufas. El chef ejecutivo, Frederick Schoen-Kiewert, dijo que las trufas son "la estrella principal" del plato.

Luego del golpe duro por la pandemia del covid-19, Calderone y Schoen-Kiewert pensaron que transformar un clásico como las papas fritas en un excéntrico plato gourmet era la forma ideal para volver al mundo gastronómico. Tenian razón, actualmente hay una lista de espera de ocho a diez semanas para poder probar las famosas "Crème de la Crème Pomme Frites".

El Cronista

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