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Los emprendedores que sirven café frío
El café de especialidad se instaló hace ya unos tres años en Montevideo. Las cafeterías dispersas por varios barrios sirven muchas variantes, entre ellos el café frío. ¿Pero qué pasa con quiénes quieren tomar café frío para llevar? Los emprendedores de Buna tienen una respuesta al fabricar café frío embotellado. Buna nació como un proyecto personal de dos amigos: Claudio Scarpa y Santiago Marenghi.
“Empezamos solamente porque nos gustaba, como a cualquiera que le gusta el café de forma aficionada. Hacíamos en nuestras casas para nosotros, y después para amigos y ahí comenzamos a notar que podíamos hacer algo más”, cuenta Marenghi. Ya en 2018 la idea se tornó un proyecto claro y materializado.
Comenzaron a fabricar café de especialidad frío embotellado, que venden en cafeterías y también de forma directa. Probaron con distintos orígenes de grano y hoy están trabajando con café brasileño, tostado en uruguay por Culto. La idea es siempre mantener todos los eslabones de producción, para mantener la calidad del producto.
Para los dos emprendedores este factor es clave: partir de una materia prima excelente, respetar la cadena de proceso con el objetivo de que se consuma una bebida de calidad con valor agregado. Por eso hasta el envase es importante.
“Muy poco tiempo usamos otro tipo de botella, cuando recién empezamos. Pero queríamos alejarnos de los envases de cerveza, y llegamos a uno que tiene tapa de rosca”, explica Scarpa. Esto permite tomar con tranquilidad el café por la calle, y hasta como un refresco industrial taparlo y terminarlo de tomar después.
Buna busca ofrecerle a locales gastronómicos café de especialidad y proveer el consumo en locales gastronómicos que lo desean servir pero carecen de personal capacitado o infraestructura adecuada. Pero no solo eso, también trabajan para fomentar el café como bebida con características particulares y con valor cultural.
Actualmente el proyecto está en proceso de incubación en Ithaka, de la Universidad Católica del Uruguay. Previamente los dos emprendedores realizaron un curso de Sinergia junto a Brother, por medio del cual comenzaron a incorporar las primeras nociones para aterrizar su idea y generar un negocio.
Elaborado por sus dueños
Los dos emprendedores se encargan de todo: desde preparar en sí misma la bebida, a diseñar las etiquetas, manejan las redes sociales y también trabajar en la comercialización. Ambos tienen formación audiovisual. Marenghi tiene un perfil más relacionado a lo creativo y trabaja en publicidad, mientras que su socio, Scarpa, es también programador web. Ninguno cuenta con formación específica en gastronomía; solamente realizaron un curso de baristas y después comenzaron a indagar sobre qué más se podía hacer con el café de especialidad. De esta forma y viendo lo que pasaba en otros países con el café frío embotellado, fue que se pusieron a trabajar.
¿Dónde se puede comprar?
El contacto directo por las redes sociales es el mecanismo más sencillo. “Nos pueden comprar y venir a retirar directo, pero siempre damos la opción de los locales, porque nos parece más práctico”, cuenta Marenghi.
El producto está en varias cafeterías: se puede comprar para llevar o para tomar ahí mismo. Entre ellas: Spazio Moka Café y Checoffe, en Punta Carretas. En el barrio Cordón están en Brunch, y en el Centro Infinito Coffee.
La presencia en locales que venden café de especialidad es un “plus” para los emprendedores de Buna. “Si bien en muchos casos ellos tienen su propio café frío para preparar, nuestro producto les facilita la logística”, explica Marenghi. Además los acerca de forma directa a personas que consumen café con regularidad.
La idea ahora es seguir expandiendo la red de locales de venta, y hasta instalarse en sitios que no sean cafeterías.
“Pensamos puede ser una opción muy válida para quienes no consumen alcohol, o sean en esa noche “el conductor designado”, dice Marenghi.
Considera que pueden estar en otras tiendas, como supermercados o empresas especializadas en venta bebidas. Pero por ahora trabajan esto con cautela. “No queremos expandirnos y que eso haga que no podremos mantener la calidad del producto”, enfatiza Scarpa.
