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Paolo Guerrero otra vez en el camino de Uruguay: una historia de patadas, sangre y mucho respeto
Óscar Tabárez parará este miércoles en la mañana el equipo que el jueves jugará contra Perú en Lima por la novena fecha de las Eliminatorias para el Mundial de Catar 2022 donde lo espera un viejo desafío: Paolo Guerrero.
En el entrenamiento del martes, donde tuvo a disposición por primera vez a todos los jugadores que viajarán a Lima (Martín Cáceres está suspendido y llegará el viernes), Tabárez no paró ningún equipo y solo ordenó un movimiento en espacios reducidos.
El entrenador tiene la dura misión de formar un equipo con capacidad de marcar sin la presencia de Luis Suárez, lesionado, ni de Edinson Cavani al que Tabárez optó por no convocar luego de que la Premier League anunciara que no dejaría viajar a los jugadores de sus equipos para las Eliminatorias sudamericanas.
Maximiliano Gómez, Jonathan Rodríguez y Brian Rodríguez son las principales cartas ofensivas a las que puede apelar Tabárez para suplir a Suárez y Cavani. Ausente Nicolás De La Cruz, que fue un soplo de frescura en la Copa América de Brasil, Giorgian De Arrascaeta es número puesto para el armado. Pero habrá que ver con quién lo hace jugar el entrenador.
¿Un posible equipo? Fernando Muslera, Nahitan Nández, José María Giménez, Diego Godín, Matías Viña; Matías Vecino, Brian Rodríguez, Federico Valverde, Rodrigo Bentancur, Giorgian De Arrascaeta; Maxi Gómez o Jonathan Rodríguez (también puede jugar por Brian Rodríguez).
En la defensa pasará el otro gran desafío con nombre propio: Paolo Guerrero. A los 37 años, el centrodelantero de Inter es un ejemplo de vigencia, más allá de que una lesión lo sacó de la Copa América donde su sustituto, Gianluca Lapadula, terminó siendo una de las figuras del certamen.
Contra Uruguay, Guerrero siempre tiene un partido aparte. Se trata de un depredador del área con gran carácter y fuerza física.
Tabárez lo conoce de memoria. En la Copa América de Venezuela 2007, el primer partido oficial del proceso Tabárez, Perú sorprendió a Uruguay con un contundente 3-0 y Guerrero marcó uno de los goles.
El desquite llegó en las Eliminatorias para el Mundial de Sudáfrica 2010 cuando en el Centenario, Uruguay le endosó un contundente 6-.0 a Perú. Guerrero terminó sacado y fue expulsado.
Diego Forlán hizo tres goles, Carlos Bueno dos y Sebastián Abreu el sexto.
Contra Diego Lugano, Guerrero siempre tuvo duelos calientes. En la selección y también en un São Paulo-Flamengo, en el último ciclo del zaguero uruguayo como jugador.
Para las Eliminatorias de Brasil 2014, Walter Gargano le dio un codazo tremendo a Guerrero que le partió la ceja y lo dejó con el rostro ensangrentado. El juez argentino Patricio Loustau juzgó a la acción como casual y no amonestó al actual volante de Peñarol.
En aquel entonces no había VAR... Aquella noche, en Lima, Uruguay ganó 2-1 con doblete de un Suárez exuberante descontando Jefferson Farfán.
Los jugadores uruguayos siempre respetaron a Guerrero por su combatividad en el campo de juego. Y también por sus grandes condiciones futbolísticas. Lugano llegó a decir: "Después de Luis Suárez, Paolo Guerrero es el mejor 9 de América". Jorge Fucile, entrevistado el martes por El Comercio, dijo "admirar" al centrodelantero peruano.
Por esa razón, cuando la participación de Guerrero estuvo en duda para el Mundial de Rusia 2018 a causa de una sanción por dopaje, tanto Godín como Suárez se manifestaron públicamente en su apoyo para que pudiera ser parte de la máxima fiesta futbolera, algo que finalmente aconteció. "Nuestro apoyo a Paolo Guerrero en este momento difícil. Nosotros también nos solidarizamos", escribió entonces Godín.
Guerrero también le anotó a Uruguay en el Centenario en las Eliminatorias para el Mundial de Brasil 2014. Pero esa vez la celeste ganó 4 a 2.
El delantero le marcó por última vez en Lima, para las Eliminatorias de Rusia 2018.
En aquel partido, donde Uruguay arrancó 1-0 con gol de Carlos Sánchez, el Perú de Ricardo Gareca utilizó una fórmula que le dio enorme rédito: presionó a Uruguay en la línea media y tras recuperar lanzó permanentemente en largo a espaldas de José María Giménez y Godín para la potencia de Guerrero y compañía. En una de esas acciones, el 9 cuerpeó al actual zaguero de Cagliari, lo desparramó y fusiló a Fernando Muslera. Los incaicos vencieron 2-1 y Guerrero dio la asistencia del segundo gol, obra de Edison Flores.
Posteriormente jugaron tres veces con dos empates y un triunfo para Uruguay. En la Copa América 2019, empataron 0-0 en cuartos de final y Perú avanzó por penales. Guerrero, por supuesto, cumplió con su cuota de gol. El único que erró fue Suárez.
Después del Mundial de Rusia jugaron dos amistosos. Uno en el Centenario, que ganó Uruguay con un gol de Brian Rodríguez. El otro fue en Lima y fue empate 1-1. La celeste lo empató de atrás y con un hombre menos por expulsión de Martín Cáceres. El gol lo hizo Darwin Núñez tras asistencia de Matías Viña.
