Presentan respiradores artificiales hechos "en tiempo récord" en Uruguay

Uno de los emprendimientos, bautizado con el nombre “Respiradores Neumáticos Modulares de Emergencia (RNME) para conexiones individuales o colectivas”, recibió $ 4,5 millones. Fue hecho en conjunto entre Spectrum Uruguay, Viviestar y Fundación Latitud. Los autores esperan tener prontos para el próximo viernes 20 de los 25 respiradores. El resto, los terminarán de ensamblar en los próximos días.

Pablo Díaz, el coordinador del proyecto, aseguró que fue un logro de un trabajo multidisciplinario de un equipo que promedió los 30 años. "Se hicieron en tiempo récord porque hubo gente que puso mucho tiempo y dedicación", comentó.

El primer contacto entre los miembros del equipo fue el 25 de marzo. En ese momento, planteó la idea a su grupo de trabajo ya que había visto el llamado de la ANII. A partir de ahí empezaron a bosquejar la idea que terminaron de diagramar el 30 de marzo, la fecha que se habían propuesto. El organismo se la adjudicó el 3 de abril.

Desde ese momento, hicieron el diseño de ingeniería, prototipado y producción. "Hubo empresas que nos ayudaron para hacer pruebas para que podamos optimizar nuestro producto. Hubo una total disponibilidad del sector público y privado. Esto hubiese sido imposible sin el aporte de ellas", comentó Díaz, que trabajó full time en la iniciativa.

Hubo días en los que trabajaba hasta la medianoche (incluido fines de semana) haciendo pruebas o modificando elementos. En algunos casos, muchos terminaban su jornada laboral en sus empresas y luego se dedicaban a desarrollar este prototipo. 

Una de las etapas centrales en este proceso fue la prueba en animales. Se elaboró un protocolo de ética para asegurar que el equipo funcionase y de esa manera experimentarlo en un cerdo. Para ello fue fundamental el aporte de la cátedra de Cirugía Experimental de la Facultad de Medicina. Primero se probó en el cerdo "sano" y luego se le generó un distrés pulmonar con el objetivo de que tuviese el mismo proceso que una persona con covid-19. "El resultado fue satisfactorio", indicó Díaz. Eso permitió avanzar con la plan.

Uno de los mayores obstáculos que tuvieron fue la importación de insumos. Esto se produjo porque en todos los países ha existido demanda de diferentes elementos para armar estos aparatos. 

En un contexto sin pandemia, Díaz estima que se habría demorado más. La excepcionalidad del momento hizo que casi todos los empleados se volcaran a trabajar de manera simultánea y casi focalizados 100% en este proyecto. 

Los otros 25

La asociación de las empresas Ingenca, Pensur, Tadomer S.A. y Note SRL fueron apoyadas con $ 1.500.000 para fabricar otros 25 respiradores que denominaron Respirone. Según describieron son “de fabricación rápida, confiables, completos, seguros, en funcionamiento comprobado y avalados por los estándares de las organizaciones médicas correspondientes”. 

Germán Bardier, de la empresa Ingenca, dijo que llegarán con 15 el próximo viernes y los restantes los culminarán la semana siguiente.

En su caso, el proyecto no fue probado en animales. Los médicos que participaron en su iniciativa lo experimentaron en simuladores.

Luego de que presenten todos estos dispositivos, Bardier prevé desarrollar dos respiradores para cada departamento. "Es una idea mía", indicó y explicó que en este nuevo plan no está implicada la ANII.