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Una banda criminal asesinó 18 personas en el estado mexicano de Guerrero
El alcalde Conrado Mendoza, de la comunidad de San Miguel Totolapan, fue asesinado ayer junto a otras 17 personas en un ataque armado de una banda criminal. Además de los fallecidos, dos personas resultaron heridas.
El alcalde pertenecía al Partido de la Revolución Democrática (PRD) y se encontraba en el palacio municipal cuando fue asaltado por pistoleros aproximadamente a las 14:00, hora local (19:00 GMT). Testigos afirman que los caminos de acceso al pueblo fueron bloqueados temporariamente por vehículos de gran tamaño para impedir la llegada de fuerzas de seguridad.
"Hasta este momento tenemos la muerte de 18 personas confirmadas y dos lesionados", dijo a la televisora Milenio la fiscal de Guerrero, Sandra Luz Valdovinos.
Entre los fallecidos, según informes de la fiscalía citados por medios locales, se cuenta además al padre de Mendoza, quien años atrás fue alcalde del poblado, jefes policiales y uniformados.
"Se desplegó un operativo para ubicar y detener a los responsables del ataque armado", informó en un comunicado la Coordinación para la construcción de la paz, en la que participan autoridades estatales y federales.
El PRD condenó en Twitter el "cobarde asesinato" del alcalde. "Exigimos justicia, basta de impunidad", señala el mensaje.
La gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado, del oficialista partido Morena, condenó en la misma red social el ataque y aseguró que ha ordenado agilizar las investigaciones para esclarecer los hechos.
"No habrá impunidad ante la artera agresión contra el presidente municipal", escribió.
De acuerdo con un recuento de la consultora Etellekt, con Mendoza suman 94 los alcaldes asesinados en México desde el 2000.
Los atacantes, según la prensa, son de la banda Los Tequileros, del estado de Jalisco, aliados del poderoso cartel Jalisco Nueva Generación y supuestamente, antes del ataque hicieron circular videos donde anunciaban su retorno a la región, en la ya habían estado antes combatiendo a una banda rival
San Miguel de Tolapan, con una población de 4.300 habitantes, se encuentra ubicado en el corazón de una región conocida como Tierra Caliente, escenario de la acción de los violentos carteles de la droga en el oeste mexicano, donde varios grupos se disputan el control de las rutas de la droga a lo largo del corredor Pacífico sur. La región es conocida por las plantaciones de amapolas para producir opio y por la existencia de laboratorios de heroína.
Los Tequileros habían actuado años atrás en esta comunidad, perpetrando sobre todo secuestros extorsivos, pero su influencia se vio mermada en 2018 tras la muerte de su líder Raydel Jabobo de Albamonte a manos de policías comunitarios. El apodo de Albamonte -el tequilero- fue el origen del nombre de la banda.
Desde hace más de dos décadas, Guerrero, uno de los estados más pobres del país, ha sido sacudido por la violencia desatada por la presencia grupos rivales que buscan controlar el tráfico de drogas y el cultivo de amapola y marihuana.
México registra más de 340.000 asesinatos, la mayoría atribuidos a las organizaciones criminales, desde el lanzamiento de la discutida “guerra contra las drogas” lanzada en diciembre de 2006 por el entonces presidente Felipe Calderón.
