Marcelo Abdala, presidente del PIT-CNT, durante una conferencia de prensa por el paro general

Opinión > CARTA DEL DIRECTOR

Una medida inapropiada

Parece que un paro general fuera como tomarse una aspirina aunque debería ser un recurso de última instancia. Si se quiere que genere una reflexión deberá administrarse con suma cautela
Tiempo de lectura: -'
18 de septiembre de 2022 a las 05:03

El pasado jueves el PITCNT organizó un paro general que, como es habitual, perseguía múltiples objetivos.

En este caso, el paro fue en reclamo de “trabajo de calidad, salario” y en contra de “la rebaja salarial y la carestía”. También fue en contra de la reforma de la seguridad social, a la cual la central sindical se ha opuesto antes de conocer el anteproyecto. Ahora se sigue oponiendo pese a que el anteproyecto aún no entró al Parlamento.

Desde filas sindicales calcularon que más de un millón de personas se adhirieron al paro, cifra muy difícil de estimar para cualquier observador, sobre todo si se centra en la actividad pública y no en el conjunto de la actividad privada que estuvo mayoritariamente abierta. Además, esa cifra que representaría a unos dos tercios de la población activa es algo que no se condice con el mejor termómetro de la actividad que es el consumo de energía eléctrica.

Según este indicador, el consumo del jueves 15 fue similar al del jueves 8 y ligeramente inferior al del miércoles 14. A diferencia del pasado, hay un factor que dificulta las mediciones y que es el teletrabajo, algo que llegó para quedarse. De lo cual es bueno que tomen nota gobierno, empresarios y sindicatos.

Por su parte, el ministro de Trabajo, Pablo Mieres, dijo que el paro es legítimo pero “desproporcionado e injusto”. Si bien reconoció pérdida de salario en algunos sectores, señaló que en otros no lo hubo y que, en lo general, se está yendo hacia la recuperación acordada cuando se estableció el mecanismo vigente en el año 2020 para privilegiar el cuidado de los puestos de trabajo.

Y el ministro se mostró especialmente molesto de que el paro fuera contra la carestía, siendo este un fenómeno universal que afecta incluso a los países más desarrollados, y contra la reforma de la seguridad social que aún no ingresó al Parlamento.

En una línea similar se pronunció la ministra de Economía, Azucena Arbeleche, quien discrepó con la mezcla de conceptos en la plataforma sindical. Recalcó, al igual que Mieres, que se está en una fase de recuperación salarial y que la reforma de la seguridad social es “justa” y “necesaria”.

El problema que tenemos es que la central sindical no reclama solamente por cosas puntuales como rezago salarial o inflación. En este último caso es muy válido el apunte de Mieres respecto a que hoy estamos ante un fenómeno mundial producto de años de expansión monetaria sin control tanto en Europa como en Estados Unidos, a lo que se suman las consecuencias de la invasión de Rusia a Ucrania sobre el precio de la energía y de los alimentos básicos.

La crítica sindical es hacia un supuesto modelo capitalista que estaría aplicando este gobierno con el afán de incrementar la desigualdad, favorecer a los malla oro, y perjudicar a los más pobres. Es algo difícil de probar.

Parte sobre todo de una lectura ideológica previa: este gobierno –que bueno es recordarlo tiene más del 50% de los votos– es neoliberal. Y fue acusado de querer privatizar la enseñanza, los combustibles, la seguridad social, la seguridad pública, etc.

O sea, no importa que el salario suba o baje, que la inflación esté alta o que mañana vuelva a situarse dentro del rango meta, las críticas al gobierno multicolor no aflojaran. Porque las discrepancias son mucho más de fondo que si la gente llega o no a fin de mes y si los supermercados remarcan más rápido de lo que suben los salarios.

El gobierno actual lleva en sus espaldas a mitad de camino cinco paros generales. ¡Cinco paros!. Parece que un paro general fuera como tomarse una aspirina aunque debería ser un recurso de última instancia. Si se quiere que tenga efecto, que genere una reflexión deberá administrarse con suma cautela.

¿Qué se ha conseguido en cambio? Según los sindicalistas, enviar señales muy fuertes al gobierno. Según los referentes del gobierno, reconocimiento de la legitimidad de los paros pero falta de oportunidad de los mismos, desproporción y reclamos muchas veces contradictorios o confusos. Para no entrar en la dinámica “inflación-salarios” miremos el reclamo de “trabajos de calidad”.

Ello implica, por de pronto, dos cosas. Por un lado, mano de obra calificada para esa “calidad”, lo que a su vez requiere educación y capacitación. Educación que cada vez que se intenta mejorar encuentra una tenaz oposición sindical: la tuvo Germán Rama en los 90, la tuvo Mujica, y la tuvo Tabaré Vázquez al tratar de cambiar el ADN de la educación.

De otro lado, “empleos de calidad” requieren inversión privada de calidad. La inversión no se consigue por decreto gubernamental sino con un clima de negocios favorable a la inversión. Cinco paros generales no es algo que suene a música en los oídos de los empresarios nacionales o extranjeros. Tampoco suena a música el recurso de ocupaciones y piquetes.

Para generar “empleos de calidad” hay que establecer una estrategia donde todos ganan. Y eso va directamente contra el axioma de la lucha de clases que propone el PIT-CNT en cada uno de sus actos y manifestaciones.

Los paros generales no alientan la inversión, ni la creación de empleo ni los buenos salarios. Si realmente se buscan “empleos de calidad” hay que ir por otro lado, radicalmente opuesto al que viene transitando la central sindical.

Comentarios

Registrate gratis y seguí navegando.

¿Ya estás registrado? iniciá sesión aquí.

Pasá de informarte a formar tu opinión.

Suscribite desde US$ 345 / mes

Elegí tu plan

Estás por alcanzar el límite de notas.

Suscribite ahora a

Te quedan 3 notas gratuitas.

Accedé ilimitado desde US$ 345 / mes

Esta es tu última nota gratuita.

Se parte de desde US$ 345 / mes

Alcanzaste el límite de notas gratuitas.

Elegí tu plan y accedé sin límites.

Ver planes

Contenido exclusivo de

Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.

Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá

Cargando...