En el marco de la segunda edición del ciclo de conferencias denominado Creando Futuro, el escritorio Zambrano & Cía presentó su nuevo producto de inversión denominado AgroBono, que brinda la posibilidad de invertir en ganadería y en agricultura a inversores de la ciudad y del campo.
En la oportunidad, Alejandro Zambrano –uno de los directores de Zambrano & Cía– explicó que el Bono Ganadero surgió a partir de que las empresas agrícolas fueron dejando los campos que para ellas eran marginales, pero que para otros rubros productivos son muy buenos, a lo que se sumó la rotación obligatoria de cultivos que exige el Plan de uso y manejo de los suelos. Pero muchos propietarios de campos vieron que volver a la ganadería es muy costoso.
A través del Bono Ganadero el inversor será el dueño del ganado, la marca, guía y trazabilidad todo estará a su nombre. Consiste en un negocio de capitalización con el dueño del campo. El inversor obtendrá una rentabilidad equivalente al 30% o 40% de los kilos que produzca el ganado durante un año, y los demás serán para el dueño del campo, quien además se encargará del cuidado y manejo de los animales.
En este negocio ganadero se asegura un retorno mínimo de la inversión del 3%. Ese porcentaje lo asegura la renta que debe pagarle el inversor al dueño del campo (en caso que el resultado económico del negocio sea negativo, ese 3% se le retendrá al dueño del campo y se lo pagará al inversor).
El negocio se hace con un seguimiento mensual y trimestral a través la plataforma SMGZ, de Zambrano & Cía (se puede visitar en www.zambrano.com.uy), sin costo para el inversor. El escritorio consignatario se encargará de realizar todas las gestiones y trámites correspondientes y en los costos de inversión también está incorporada la asesoría legal de un estudio jurídico.
Por otra parte, el inversor que quiera salir del negocio antes de terminado el período podrá hacerlo, sin costo, recuperando el 100% del monto en menos de una semana.
El máximo a invertir en esos casos es 20% del capital, explicó detalladamente Alejandro Zambrano durante el encuentro.
Zambrano & Cía avala 100% del negocio y también ofrece la posibilidad de invertir en el rubro de cría, un negocio de más largo plazo, pero que permite diluir riesgos.
Con renta fija el inversor aporta capital de giro al agricultor, y como garantía el agricultor transfiere ganado a Zambrano & Cía. Además se pueden contratar seguros de producción o cesión de cobros sobre producción.
La renta fija del Bono Agrícola es de 8% anual. El seguimiento de toda la operativa y ejecución, en caso que corresponda, la hará Zambrano & Cía.
En el caso de la renta variable el negocio es más riesgoso, pero puede tener mayor retorno. A través de esta modalidad el dueño del campo pone la tierra y la renta, y el inversor los demás costos. También puede participar un contratista en este negocio, aportando los servicios de maquinaria y obteniendo un porcentaje del resultado.
La rentabilidad anual, tomando cifras de rendimiento conservadoras (2.200 kilos de soja por hectárea), puede llegar a 15% anual.
"Son inversiones a medida, buenas apuestas de negocios, una herramienta para juntar el capital con la producción", concluyó Alejandro Zambrano.
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