La Unión Nacional de Trabajadores Metalúrgicos y Ramas Afines (Untmra) denunció en las últimas horas el despido de 78 trabajadores y el envío de otros 128 a seguro de paro en la planta ensambladora de vehículos de la firma Nordex. Sin embargo, desde la empresa afirmaron que la desvinculación tiene que ver con la sustitución de una línea de actividad por otro proyecto "de enorme magnitud" que requerirá una inversión de US$ 25 millones.
Al ser consultado sobre los despidos y envíos a seguro de paro, el CEO de Nordex, Nelson Rebelo señaló que efectivamente se envió a 130 personas al seguro de paro pero negó los 78 despidos. Son "70 (trabajadores) contratados a término hasta la finalización del proyecto, que culminó a finales de enero, obedece a los plazos requeridos habituales como en cualquier proyecto industrial automotriz de envergadura, para la implantación y diseño de los medios necesarios para su puesta en marcha", argumentó.
En ese sentido, desde la empresa dijeron que la sustitución de una de las líneas de actividad de Nordex se realiza de "forma programada e informada con antelación". No obstante, Rebelo adelantó que el nuevo proyecto que prevé la compañía "demandará la reincorporación del personal actual", así como también un incremento en la plantilla laboral a inicios de 2026.
Según lo que adelantó el CEO de Nordex, a partir del mes de marzo, reincorporarán "al 50% del personal que se encuentra en seguro de paro", mientras que, en paralelo, "los colaboradores que fueron contratados a término tendrán prioridad absoluta de reingreso".
En la planta de Nordex la mayoría de la plantilla no está afiliada a la Untmra. En paralelo, funciona una comisión de trabajadores que oficia como “sindicato”, pero que no es “reconocida” por el Ministerio de Trabajo. “La comisión defiende a la patronal y no a los trabajadores”, criticaron desde el sindicato de los metalúrgicos.
Sobre ese punto, señalaron que la comisión tendría que manifestarse en contra de los despidos y reclamar la rotación en el seguro de paro como paliativo a los despidos. Otra fuente del sector indicó a El Observador “que hay una situación complicada” en la empresa.
Por su parte, el presidente de la Cámara de Industrias (CIU), Leonardo García dijo a El Observador que si bien no tiene una notificación oficial de la empresa, sí estaba al tanto de que a partir de febrero de este año, Nordex trasladaría parte de su operativa a Argentina, pero dijo no tener más detalles sobre los impactos y consecuencias de esa decisión en el resto de sus operaciones.
La planta de Nordex, ubicada en el barrio Colón de Montevideo, es la única que está operativa actualmente en el país, tras el cierre de Lifan en San José tiempo atrás. Su actividad se incrementó fuertemente en los últimos años tras millonarias inversiones del empresario argentino Manuel Antelo que permitieron modernizar la fábrica para desarrollar nuevos negocios enfocados a la región.
Desde la empresa informaron que actualmente trabajan 900 personas de forma directa en la planta y que tienen una actividad sostenida de fabricación de unos 100 vehículos por día para las marcas Fiat, Citroen, Peugeot, Ford y Kia.
El cierre de Yazaki
A finales de enero la autopartista Yazaki cerró sus dos fábricas en Uruguay y anunció que trasladaría sus operaciones a Paraguay y Argentina. En menos de un año el sector presenció la salida del país de dos armadoras de componentes automotrices.
La visión industrial es que la falta de competitividad local es muy difícil de sobrellevar y que otras compañías podrían recorrer el camino de la multinacional japonesa.
En esa línea, el presidente de la CIU había dicho en entrevista con El Observador que "hay otros grupos industriales en retirada de Uruguay o bajando la producción". El próximo miércoles habrá una reunión entre la CIU y la Cámara de Autopartes para analizar la situación actual de la industria.