La Justicia imputó a la madre de las dos niñas de 7 y 10 años que fueron abordadas en su casa de Aguas Dulces por un hombre, que abusó de una de ellas en reiteradas oportunidades, informó la Jefatura de Policía de Rocha en un comunicado.
El pasado 7 de diciembre el principal implicado se metió en un hogar en el que estaban solas dos niñas. Allí abusó sexualmente de una de las menores y luego se retiró cuando llegó el hermano de las niñas, que tiene 13 años.
El implicado fue formalizado en abril por varios delitos de "abuso sexual agravados" con 120 días de arresto domiciliario nocturno, tras comprobarse que abusó de una menor con el consentimiento del padrastro de la víctima, quien también fue imputado días después por varios delitos de abuso sexual agravados, junto a otro de violación de domicilio, pero en este caso con 120 días de prisión preventiva.
Ya desde el comienzo de la investigación la fiscal de Rocha, Josefina García, puso un ojo sobre la madre de las niñas, que dejaba solos a sus hijos porque "se ausentaba hacia otra localidad". Por esto, la Justicia determinó que los tres menores queden bajo la protección del Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay (INAU).
Este retiro de los niños fue clave para que la Justicia determinara la prisión domiciliaria del principal implicado, situación que llevó a protestas de los vecinos de Aguas Dulces ante el Juzgado de Castillos.
La jueza a cargo del caso entendió que como los menores ya estaban bajo el amparo del INAU no existía un peligro para ellas si el hombre esperaba la investigación en su casa. Sin embargo, un Tribunal de Apelaciones revocó la decisión en mayo y el hombre fue enviado a prisión preventiva.
La investigación continuó y este martes la justicia imputó a la madre de las niñas, de 31 años, por el delito de "violencia doméstica agravada", en reiteración real con varios cargos por "omisión de los deberes inherentes a la patria potestad". Se le impusieron diversas medidas cautelares por 120 días.
