Puede sonar a frivolidad, algo menor, un detalle que no vale ni la pena destacar. Pues no, no lo es. Durante 15 semanas, todos los lunes en horario central, una mujer de 51 años le mostró a los miles y miles de televidentes que miraban MasterChef que la tinta de pelo no es una obligación establecida para las mujeres.
Alicia Patella –la nueva ganadora del reality de cocina que tiene entusiasmados a los uruguayos que mantienen la tradición de mirar la televisión, e incluso a aquellos que no le prestaban tanta atención a la pantalla abierta– tiene muchas características que la hacen diferente. La primera y más evidente es la seguridad que demuestra. En el programa del domingo previo a la final, Alicia –sentada en el living de su casa en Salto– dijo: "Ahora que estoy acá tengo que ganar". En el país de la humildad (cada vez más celebrada gracias a las conferencias de prensa de Óscar Washington Tabárez y su proceso en la selección uruguaya) la confianza y convicción de Alicia no eran del agrado de algunas voces altisonantes en las redes sociales. Pedante, soberbia, altanera se repetían en coro en Twitter, la red en la que MasterChef se palpita en vivo.
La segunda característica que la diferencia, muy vinculada con la seguridad con la que se plantaba semana a semana en el horario central de la televisión nacional, es su pelo cano y corto. Si Uruguay fuera Francia o incluso Inglaterra, esto no sería un asunto. Alicia sería una mujer que, como tantas otras, decidió (o tal vez ni siquiera se lo cuestionó) dejar que sus canas crecieran sin recurrir a la tinta.
En 2001 Hillary Clinton, en una charla con estudiantes de Yale, dijo sobre el tema del pelo y las mujeres lo siguiente: "Hay una lección que mi familia no me enseñó. En la que Wellesey y la escuela de derecho de Yale fallaron en insistir: tu pelo va a enviar mensajes importantes a aquellos que están a tu alrededor.(...) Prestale atención a tu pelo porque todo el mundo lo va a hacer". Pasaron los años y, por suerte, aparecieron mujeres que le demostraron al mundo que sí, el pelo es el mensaje y que si es gris es un gran mensaje. Sobre todo en tiempos en los que la juventud es un valor en sí mismo y el paso del tiempo la peor de las condenas.
Inicio de sesión
¿Todavía no tenés cuenta? Registrate ahora.
Para continuar con tu compra,
es necesario loguearse.
o iniciá sesión con tu cuenta de:
Disfrutá El Observador. Accedé a noticias desde cualquier dispositivo y recibí titulares por e-mail según los intereses que elijas.
Crear Cuenta
¿Ya tenés una cuenta? Iniciá sesión.
Gracias por registrarte.
Nombre
Contenido exclusivo de
Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.
Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá