Almagro realizó al menos 34 viajes con la asesora de la OEA que fue su pareja

Los viajes tuvieron lugar entre 2018 y diciembre de 2019, y fueron presentados por Almagro en una serie de informes sobre sus actividades fuera de la sede de Washington a la presidencia del Consejo Permanente. En 15 de esos viajes la única acompañante de Almagro es Viadurri.

Entre esos viajes hay una visita a Bahamas en octubre de 2019, una participación en un seminario sobre populismo en Buenos Aires realizado en marzo de ese año, y un viaje a Medellín para un conversatorio con jóvenes en la universidad Eafit, detalló El País.

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Algunos viajes fueron costeados por los organizadores de los eventos a los que Almagro y Viadurri asistieron, mientras que en otras ocasiones los organizadores pagaban los costos del secretario general, y la OEA costeaba la participación de los asesores.

La OEA decidió contratar a un equipo de abogados independientes para investigar la relación entre Almagro y Viadurri, quien trabajaba en la Secretaría para el Fortalecimiento de la Democracia del organismo antes de pasar a trabajar con el secretario general, luego de recibir una denuncia anónima.

El código de ética de la OEA, así como de otros organismos internacionales establece que un miembro del personal no debe mantener una relación íntima con un colega de manera tal que “interfiera con el desempeño de sus funciones o coloque en desventaja a otras personas en el Lugar de Trabajo”.

Según el medio español, Almagro confirmó en noviembre su relación con Viadurri, que aseguró era conocida por "prácticamente todos". Duró tres años, los que definió como "los mejores" de su vida, y culminó meses antes de estas declaraciones.

En el libro Luis Almagro no pide perdón, de los periodistas Gonzalo Ferreira y Martín Natalevich en noviembre de 2020, se cuenta una historia "profunda" e "intensa" entre Almagro y la funcionaria Marián Vidaurri.

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"Si bien lo había visto un par de veces, se conocieron realmente en un viaje a Filadelfia. «Eso fue un viernes y el lunes me llamó a su oficina y me dijo: “Vente a trabajar conmigo”». Tiempo después la relación trascendió lo profesional", continúa el libro, citando a la funcionaria mexicana.

"Fue y es una conexión en todas las dimensiones. Muy profunda y muy intensa", cuenta Vidaurri en el libro de 2020. "Le digo siempre: 'Yo soy más inteligente porque me costó nada más que treinta y ocho años conocerte, a ti te costó como cincuenta y pico'", bromeaba sobre la edad de ambos.

"Nunca fui supervisor de ninguna persona con quien tuviera una relación, nunca la promoví, ni nunca aumenté su salario, que son las condiciones especiales establecidas en el código de ética de trabajo", aseguró el excanciller uruguayo en octubre.